Urdangarin: ¡°La Casa del Rey no asesor¨®, autoriz¨® ni aval¨® mis actividades en N¨®os¡±
El duque de Palma ha sido preguntado por tres delitos de fraude fiscal Ha tratado de crear un cortafuegos entre su trabajo en N¨®os y La Zarzuela La segunda declaraci¨®n del esposo de la infanta Cristina en el juzgado ha sido grabada
El yerno del Rey, I?aki Urdangarin, imputado por supuesta corrupci¨®n, declar¨® ayer durante cuatro horas en el juzgado de Palma de Mallorca donde se instruye el caso N¨®os.Pero antes de contestar a las preguntas del juez y del fiscal, en una estudiada estrategia de sus asesores, ley¨® un alegato para desmarcar al Rey y a la Casa del Rey de cualquier actuaci¨®n de amparo a sus negocios sucios con fondos p¨²blicos, por los que est¨¢ acusado de hasta ocho delitos. ¡°La Casa de S. M. el Rey no opin¨®, asesor¨®, autoriz¨® o aval¨® las actividades que yo desarrollaba en el Instituto N¨®os¡±, asegur¨®.
De este modo, Urdangarin quiso salir al paso de lo que llam¨® ¡°un proceso p¨²blico al pretendido papel de la Casa Real¡±, tras la divulgaci¨®n de sus correos electr¨®nicos y las declaraciones de su antiguo socio Diego Torres. Este hab¨ªa dicho que nada se hac¨ªa en N¨®os que no fuese avalado o conocido por La Zarzuela. El yerno del Rey afirm¨® que las aportaciones de correos y las manifestaciones judiciales de su antiguo aliado correspond¨ªan a una maniobra de ¡°desplazamiento del foco de esta instrucci¨®n¡±.
Texto ¨ªntegro le¨ªdo por Urdangar¨ªn ante el juez Castro
El duque de Palma ha le¨ªdo un texto exculpatorio para la Casa del Rey antes de iniciarse el interrogatorio ante el juez Jos¨¦ Castro. La declaraci¨®n textual es la siguiente:
"Antes de someterme a las preguntas en este Juzgado, quiero declarar que, como consecuencia de la entrega y difusi¨®n de determinados correos y documentaci¨®n presuntamente relacionados con este procedimiento, se ha producido en las ¨²ltimas semanas un desplazamiento del foco de esta instrucci¨®n de los hechos propiamente dichos hacia un proceso p¨²blico al pretendido papel de la Casa Real en los mismos.
A este respecto, declaro que la Casa de S. M. el Rey no opin¨®, asesor¨®, autoriz¨® o aval¨® las actividades que yo desarrollaba en el Instituto N¨®os. Por el contrario, cuando tuvo conocimiento de la existencia de reproches pol¨ªticos a las administraciones p¨²blicas contratantes, la Casa de S. M. el Rey me traslad¨® las recomendaciones oportunas para que dejara de realizar una actividad que no consideraba adecuada para mi status institucional. Y as¨ª lo hice".
El esposo de la infanta Cristina lanz¨® su proclama en el juzgado y, de inmediato, la agencia Efe la divulg¨®. El texto ocup¨® durante horas las portadas de las p¨¢ginas webs. Hasta media tarde se ignor¨® el contenido del interrogatorio, que era secreto. En apenas 170 palabras, el antiguo deportista del Bar?a de balonmano quiso cargar con las posibles responsabilidades p¨²blicas pero el texto no tiene ninguna trascendencia en el proceso penal, seg¨²n fuentes judiciales. El comunicado, que tambi¨¦n exculpa a la Infanta, es semejante a otro del a?o pasado. No fue le¨ªdo por el yerno del Rey ante la nube de medios de comunicaci¨®n que cubr¨ªan su comparecencia, sino a puerta cerrada, ante el juez Jos¨¦ Castro y el fiscal Pedro Horrach.
Seg¨²n su relato, cuando La Zarzuela tuvo conocimiento de ¡°la existencia de reproches pol¨ªticos¡± por los contratos con la Generalitat valenciana y el Gobierno de Baleares (5,8 millones de ingresos para el Instituto N¨®os), ¡°la Casa de S. M. el Rey me traslad¨® las recomendaciones oportunas para que dejara de realizar una actividad que no consideraba adecuada para mi estatus institucional. Y as¨ª lo hice¡±.
El esposo de la Infanta y su abogado, Mario Pascual, cuestionaron la validez de los correos hechos p¨²blicos por Diego Torres. Urdangarin dijo que no contestar¨ªa sobre su contenido. Pero en el largo interrogatorio asumi¨® preguntas sobre episodios y hechos contenidos en los correos. Habl¨® de los e-mails de Corinna zu Sayn-Wittgenstein, amiga del Rey, y de la Fundaci¨®n Laureus. Pero no record¨® por qu¨¦, en 2005, la arist¨®crata alemana le pidi¨® su cuenta corriente y la de la Infanta.
Asumi¨® la propiedad de los diferentes dominios de correos de Internet, menos uno que es de Telef¨®nica. En manos de Diego Torres existe m¨¢s material delicado sin aportar a la causa, que est¨¢n en el disco duro del servidor de la malla de empresas que cre¨® N¨®os, con 500 de gigas de capacidad inform¨¢tica.
¡°Yo no he cobrado nada de esto¡±, fue una de las frases m¨¢s repetidas desde el banquillo de la sala judicial por I?aki Urdangarin, seg¨²n distintas fuentes. La t¨¢ctica defensiva, tras levantar con el comunicado un dique de contenci¨®n ante La Zarzuela, fue encastillarse en su inocencia, en una funci¨®n institucional, altruista, en proyectos deportivos y eventos de impacto tur¨ªstico.
Afront¨® las preguntas del juez, del fiscal y de la Abogac¨ªa del Estado sobre los posibles delitos contra la Hacienda P¨²blica. El interrogatorio aludi¨® en buena parte a los tres nuevos delitos fiscales que se le atribuyen, en 2007 y 2008 por impagos en su renta por cobros en Aizoon y en 2008 por no abonar el impuesto de sociedades del Instituto N¨®os. Se escud¨® en que hac¨ªa lo que le recomendaron o se?alaron sus asesores fiscales y dijo que aportar¨¢ expedientes de la inspecci¨®n tributaria a la que est¨¢ sometido.
¡°?Por qu¨¦ factur¨® trabajos que usted realiz¨® a su empresa Aiz¨®on \[compartida con la Infanta\]?¡±, insisti¨® el fiscal Horrach. Ese es uno de los puntos clave de los supuestos delitos. Defraud¨®, supuestamente, casi medio mill¨®n de euros en dos ejercicios. Cobr¨® grandes cantidades de empresas de las que es asesor y consejero e hizo pasar esos abonos como trabajos desde su empresa, donde ten¨ªa empleados sin cualificar para fingir una actividad laboral. Dijo que hab¨ªa trabajadores que le ayudaban en sus asesor¨ªas empresariales. ¡°?En qu¨¦?¡± No contest¨®, como tampoco dijo como consigui¨® entrar en los consejos de Administraci¨®n de Altadis, Motor Press, Pernod y Aceros Bergara, entre otros.
Afirm¨® que no ten¨ªa cuentas en Suiza ni estaba autorizado para operar en peque?os para¨ªsos fiscales. Neg¨® haber montado, como sostienen el fiscal y su socio, una red fiduciaria (con v¨ªnculos en Londres, B¨¦lice y Panam¨¢) para evadir capitales. Rechaz¨® directamente la relaci¨®n econ¨®mica con amigos (como ?lex S¨¢nchez Bollinger) que han sido se?alados como testaferros o colaboradores en cobros de asesor¨ªas con Aguas de Valencia y que han sido interrogados en la causa. Nunca supo nada de facturas falsas, dijo, pagos sospechosos o empleados ficticios. Defendi¨® su gesti¨®n de lobby en la promoci¨®n de la candidatura de Madrid 16, afirm¨® que no cobr¨® fondos de los 144.000 euros en donaciones que percibi¨® su tercera fundaci¨®n FDCIS (Fundaci¨®n Cultura Deporte e Integraci¨®n Social). Y se desvincul¨® de las autoridades de Madrid de entonces, con Alberto Ruiz Gallard¨®n a la cabeza, sobre supuestas irregularidades en un trabajo para la ¡°Marca Espa?a¡±.
Otro de los cortafuegos que levant¨® fue negar que se hubiera reunido en La Zarzuela con la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, y el expresidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, como hab¨ªa afirmado su socio Diego Torres, quien asegur¨® que trataron all¨ª negocios privados, como la operaci¨®n ¡ªrealizada en tres ediciones¡ª de los Valencia Summit. Camps tambi¨¦n hab¨ªa manifestado que esta cita no se realiz¨® mientras que Barber¨¢ hab¨ªa descartado entrar a valorar los testimonios de imputados o defensas. El juez indag¨® sobre el libro de visitas del palacio del Rey y pondera reclamar los registros.
El yerno del Rey asumi¨® ante el juez, en su anterior declaraci¨®n del a?o pasado, la celebraci¨®n de un encuentro de p¨¢del y de una cita posterior para tratar de eventos en el palacio real de Marivent con el expresidente de Baleares, Jaume Matas, que neg¨® p¨²blicamente el encuentro. Se deslig¨® del proyecto de los Juegos Europeos y solo asumi¨® haber acompa?ado a Diego Torres a Valencia a presentar ese proyecto personal del socio. ¡°Fue lac¨®nico, vac¨ªo y contradictorio en bastantes ocasiones. En su primera cita de 2012 estuvo m¨¢s seguro¡± analizaron de manera coincidente un letrado defensor y un miembro de la acusaci¨®n. Desde los inicios de la causa, que entra en su recta final, se acumulan indicios de los delitos de malversaci¨®n de caudales p¨²blicos, fraude, falsedad documental y mercantil, prevaricaci¨®n, tr¨¢fico de influencias y posible blanqueo de capitales, adem¨¢s de los tres citados delitos fiscales.
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