Esgrima jur¨ªdica en Prim, 12
G¨®mez Berm¨²dez, por un lado, y la fiscal¨ªa y Ruz, por otro, mantienen una pugna extenuante por la competencia para investigar los papeles de B¨¢rcenas
La Audiencia Nacional, un organismo acostumbrado a las convulsiones y a las tensiones ¡ªcasi siempre jur¨ªdicas¡ª entre sus jueces y secciones, vivi¨® ayer una jornada fren¨¦tica a cuenta del caso B¨¢rcenas. Una jornada que no hace sino poner un punto y aparte a tres semanas de pugna entre dos de sus magistrados ¡ªJavier G¨®mez Berm¨²dez y Pablo Ruz¡ª por dirimir qui¨¦n se encarga de investigar la contabilidad secreta del extesorero del PP. G¨®mez Berm¨²dez, por un lado, y la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n y Pablo Ruz, por otro, se est¨¢n sometiendo a un extenuante ejercicio de esgrima legal. Los escritos ¡ªautos, providencias, recursos...¡ª, en ocasiones empapados en vitriolo jurisprudencial, se suceden a un ritmo endemoniado. Exagerando solo un poco, quedan obsoletos casi antes de que puedan tener vigencia.
Ayer, el enfrentamiento fue especialmente duro. Mientras en la segunda planta de la Audiencia, en el despacho de Ruz, sobre las 10.10, Luis B¨¢rcenas se negaba a declarar sobre su contabilidad manuscrita y rechazaba repetir la prueba caligr¨¢fica, G¨®mez Berm¨²dez, el magistrado a quien el jueves sus superiores impidieron interrogar al extesorero popular, emit¨ªa una resoluci¨®n de apariencia inocua, pero de una acidez legal considerable.
En apenas un folio, el magistrado que presidi¨® el tribunal del 11-M, respond¨ªa a un ¡°recurso de apelaci¨®n¡± de la fiscal¨ªa ¡°contra la providencia¡± del pasado mi¨¦rcoles en la que G¨®mez Berm¨²dez citaba a declarar a B¨¢rcenas. En ese escrito, el ministerio p¨²blico acusaba al titular del Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 3 de actuar con ¡°picaresca¡± para poder dirigir las pesquisas sobre los papeles de B¨¢rcenas.
La estocada sin espada de Berm¨²dez consist¨ªa en ¡°inadmitir de plano¡± ¡ªequivalente jur¨ªdico a no darse ni por enterado¡ª el escrito de la fiscal¨ªa. Y, de paso, recordar al ministerio p¨²blico un principio b¨¢sico de derecho procesal: la Ley de Enjuiciamiento Criminal solo contempla los recursos de apelaci¨®n contra los autos, y no contra las providencias de jueces y tribunales. La lecci¨®n, sin citarla, era extensible a la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que el jueves suspendi¨® cautelarmente la declaraci¨®n de B¨¢rcenas atendiendo un ¡°recurso de apelaci¨®n¡± de la fiscal¨ªa ¡°contra la providencia¡± de Berm¨²dez en la que citaba al extesorero para ayer, dos horas despu¨¦s de que declarara ante Ruz.
Ese escueto auto de Berm¨²dez tiene una lectura adyacente: el magistrado no est¨¢ dispuesto a rendirse y mantiene el resto de las diligencias previstas sobre los papeles de B¨¢rcenas en tanto no se resuelva cu¨¢l de los dos jueces es legalmente competente para asumir la causa. Entre estas pesquisas, la m¨¢s destacada es la declaraci¨®n de los diez empresarios que supuestamente aportaron, entre 1990 y 2008, los 7,5 millones de euros que figuran en la contabilidad manuscrita de B¨¢rcenas. Estos interrogatorios est¨¢n previstos, salvo que la Sala de lo Penal tambi¨¦n los vete, para los pr¨®ximos 4 y 5 de abril.
Justo cuando G¨®mez Berm¨²dez ya hab¨ªa abandonado ayer sobre las 13.00 la sede de la Audiencia en la calle de Prim, 12, la fiscal¨ªa le lanz¨® otra andanada. En un escrito, el ministerio solicitaba al juez Ruz que rehusara el requerimiento de inhibici¨®n que le hab¨ªa hecho G¨®mez Berm¨²dez y mantuviera la competencia sobre los papeles de B¨¢rcenas. El ministerio p¨²blico acusaba a Berm¨²dez de incurrir en ¡°palmarios errores¡± y ¡°contradicciones¡± al reclamar la causa para s¨ª.
Dos horas m¨¢s tarde, Ruz, que durante todo este proceso ha evitado prudentemente enfrentarse con Berm¨²dez a trav¨¦s de autos y ha seguido los pasos de la fiscal¨ªa, comunicaba el rechazo a las pretensiones de su colega. En su ¨²ltima resoluci¨®n Ruz le daba la opci¨®n de que plantee un conflicto de competencia ante ¡°el superior jer¨¢rquico com¨²n¡±, es decir, la Sala de lo Penal de la Audiencia. Un cap¨ªtulo final de la pugna que est¨¢ a¨²n por escribir.
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