Anatom¨ªa de un decreto limitado
Menos de un 2% de los que solicitaron parar el desahucio con la nueva normativa lo lograron
El decreto de alivio a los deudores hipotecarios puesto en marcha por el Gobierno en noviembre de 2012 ha tenido un impacto muy limitado y ha resultado ineficaz. Esta es la principal conclusi¨®n a la que llega una investigaci¨®n pionera del instituto Metroscopia encabezada por la exjuez Manuela Carmena, y que cont¨® con la colaboraci¨®n de EL PA?S. Menos de un 2% de los que solicitaron que se suspendiera su desahucio acogi¨¦ndose al decreto lo lograron.
Los estrictos requisitos para optar a paralizar el lanzamiento, los plazos establecidos, totalmente desconectados de la realidad de los procesos hipotecarios, y los complicados papeleos exigidos son algunas de las claves que ayudan a explicar el escaso impacto del decreto, se?ala el informe.
¡°El estudio muestra que el decreto resulta in¨²til, que es papel mojado¡±, se?ala Violeta Assiego, una de las investigadoras de Metroscopia. ¡°Adem¨¢s, tambi¨¦n desmonta la proposici¨®n de ley que hay en curso en el Parlamento¡±.
El Senado ya ha recibido el texto enviado por el Congreso, que recoge, con variaciones, los mismos requisitos que el decreto de noviembre, para poder paralizar un desahucio cuando la situaci¨®n econ¨®mica del deudor es grave (m¨¢s all¨¢ de la existencia de cl¨¢usulas abusivas en el contrato).
Las disfunciones del Real Decreto 27/2012 quedan patentes en una investigaci¨®n realizada a partir del minucioso an¨¢lisis de 92 expedientes del juzgado hipotecario n.? 32 de Madrid, realizada entre el 25 de marzo y el 12 de abril. Un equipo de tres investigadores analizaron los expedientes, seleccionados de entre las 244 peticiones de suspensi¨®n de lanzamiento de un total de 3.446 ejecuciones hipotecarias.
Los investigadores se encontraron con que tan solo un 7,08% de todos los expedientes, correspondientes a los a?os 2010 y 2011, solicitaron la suspensi¨®n del lanzamiento acogi¨¦ndose al decreto. De todos estos, tan solo un 16,39% fueron aceptados por el juez. La cifra que viene a reflejar la eficacia del decreto queda por tanto reducida a un 1,16% (eso s¨ª, hay que matizar que el n¨²mero total de expedientes incluye casos de locales y garajes que podr¨ªan hacer subir ligeramente este dato al entorno del 2%).
Jos¨¦ Mar¨ªa Fern¨¢ndez Seijo, juez de lo Mercantil del juzgado n¨²mero 3 de Barcelona, atribuye fiabilidad a las cifras del informe. En Barcelona, se?ala, la cifra de las suspensiones paralizadas con el decreto rondar¨ªa m¨¢s bien el 5%. Jaime Anta, titular del Juzgado de Primera Instancia n¨²mero 2 de Santander, tambi¨¦n estima que los datos son razonables. Asegura que en Santander, tan solo una persona se pudo acoger al decreto de alivio a los deudores hipotecarios.
Los bancos agotan 10 meses de media para intentar negociar
Esta investigaci¨®n responde a la necesidad, expresada por Manuela Carmena, de contar con datos reales sobre las consecuencias de las decisiones pol¨ªticas. ¡°El Consejo General del Poder Judicial no ha sido capaz de reunir datos¡±, se?ala la exjuez, ¡°pero los datos son necesarios para conocer la realidad, y para que el legislador pueda legislar¡±.
El 15 de noviembre de 2012, el gobierno de Mariano Rajoy aprobaba el decreto de medidas urgentes. Abr¨ªa la puerta a la paralizaci¨®n de desahucios si se cumpl¨ªan cuatro requisitos econ¨®micos (cuota hipotecaria superior al 50% de los ingresos netos; alteraci¨®n significativa de las circunstancias econ¨®micas en los ¨²ltimos cuatro a?os; que el pr¨¦stamo sea para la ¨²nica vivienda en propiedad; y no superar el triple del Indicador P¨²blico de Renta de Efectos M¨²ltiples) as¨ª como un supuesto de especial vulnerabilidad (que inclu¨ªa a familias numerosas, con hijos menores de tres a?os, con miembros con una discapacidad superior al 33% o con una v¨ªctima de violencia de g¨¦nero, entre otros).
¡°En la pr¨¢ctica se observa que se le suspende el lanzamiento a aquel que encaja en el sudoku de los requisitos¡±, dice Ram¨®n Palomino, uno de los investigadores, que fue asesor t¨¦cnico del departamento de Justicia del gobierno vasco. ¡°Es mucho lo que tiene que hacer una persona para acreditar lo mal que est¨¢¡±, dice la investigadora Assiego en alusi¨®n a los papeleos.
El estudio pone de manifiesto que los plazos establecidos en el decreto se adaptaban poco a la realidad. Se propone que los desahucios se paralicen durante dos a?os. Pero la duraci¨®n media de los procesos es de 2 a?os y 5 meses, por lo que ning¨²n procedimiento iniciado despu¨¦s de su entrada en vigor tiene visos de poder acogerse a ¨¦l. El plazo de dos a?os se arrastra a la nueva proposici¨®n de ley.
La norma pendiente de aprobaci¨®n en el Senado recoge tambi¨¦n que los bancos tendr¨¢n que esperar a que pasen tres meses, y no uno, desde el primer impago, para iniciar la demanda. El estudio refleja que rara vez se ejecuta un pr¨¦stamo hipotecario ante el primer impago: los bancos agotan diez meses (de media) para intentar renegociar.
Los autores de la investigaci¨®n se?alan que, tanto en el decreto, como en la proposici¨®n de ley, solo se interviene cuando el deudor ya ha perdido su casa. ¡°El momento de intervenci¨®n tendr¨ªa que ser cuando empieza el proceso de ejecuci¨®n¡±, se?ala Assiego.
El estudio se realiz¨® en el juzgado n.? 32 pero se hizo a condici¨®n de no revelar datos personales. Con todo, el an¨¢lisis de los expedientes permite reflejar casos, sin revelar identidades, de personas que no pudieron suspender el lanzamiento por no cumplir los requisitos.
Como el de una mujer que conviv¨ªa con su hija y su nieto de tres a?os. Qued¨® fuera porque se estim¨® que se trataba de dos unidades familiares.
Es mucho lo que debe hacer una persona para acreditar lo mal que est¨¢ Violeta Assiego, investigadora de Demoscopia
Como el de una pareja de hecho, ambos en paro y con la prestaci¨®n agotada, con hijos menores, pero que no estaban inscritos en el registro de parejas de hecho.
Como el de un hogar en que tres adultos estaban en paro pero, al no haber percibido nunca prestaci¨®n, no pod¨ªan acreditar haberla agotado.
¡°Los requisitos exigidos hacen que una familia que gane 1.500 euros al mes y tenga un hijo menor de tres a?os s¨ª pueda; mientras otra con los mismos ingresos y dos hijos de m¨¢s de 4 a?os, no¡±, declara Marisa Mu?oz, de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Getafe. ¡°La desesperaci¨®n les puede llevar a tener un hijo indeseado o a optar por acusaciones de malos tratos para cumplirlos. Cualquier cosa antes que acabar en la calle y que les quiten los hijos¡±.
A poco que uno salga a la calle, se encuentran casos reales que reflejan los perfiles de que habla el estudio. Mar¨ªa (nombre ficticio), mujer dominicana de 47 a?os, est¨¢ en pleno tr¨¢mite para intentar paralizar su desahucio. Todo son papeleos. Tiene un hijo de 15 a?os con par¨¢lisis cerebral. La casa en la que a¨²n vive es un tercer piso. Cuando lleg¨® a ella, hace siete a?os, pod¨ªa bajar a su hijo a la calle, cargando con ¨¦l. Pero el ni?o ya ha cumplido 15 a?os y ya es complicado hacerlo; vive medio recluido.
Esta mujer dominicana cobra 426 euros, pero la prestaci¨®n se le agota el pr¨®ximo 10 de mayo. El jueves pasado, un juzgado de Madrid le daba diez d¨ªas para presentar m¨¢s papeles. ¡°Estoy mal. Soy soltera, no tengo dinero¡±, dice. ¡°No tengo d¨®nde ir. Y lo que m¨¢s me preocupa es mi ni?o¡±.
El 70% de los ejecutados son extranjeros, se?ala el informe. De estos, el 87%, latinoamericanos.
Carlos Napole¨®n Amancha Silva cuenta que el decreto del mes de noviembre de 2012 le hizo albergar esperanzas. Prepar¨® los papeleos, pero le denegaron la suspensi¨®n por superar en unos 200 euros el l¨ªmite de tres veces el IPREM, explica. Este ecuatoriano de 36 a?os que lleva 13 en Espa?a se qued¨® sin trabajo en la construcci¨®n y lleva a?o y medio cobrando el subsidio de 426 euros. Su casa de Getafe ya fue subastada. Debe 220.000 euros. ¡°La moratoria de dos a?os no sirve para nada¡±, dice, ¡°porque la deuda no desaparece. Yo lo que necesito es que me condonen la deuda¡±. Carlos, que tiene dos hijos y vive con Miriam Ver¨®nica (que s¨ª trabaja), se siente estafado por los bancos. La semana que viene tiene que presentar nuevos documentos para ver si consigue paralizar de alg¨²n modo su desalojo, programado para julio.
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