Rajoy mantiene la mano dura con Gibraltar pese a la presi¨®n de Cameron
El Gobierno est¨¢ dispuesto a ¡°modular¡± las medidas si se reanuda el di¨¢logo en una mesa en la que est¨¦n Londres, Madrid, el Pe?¨®n y la Junta de Andaluc¨ªa
Los controles fronterizos en Gibraltar continuar¨¢n, pero en los pr¨®ximos d¨ªas podr¨ªan ¡°modularse¡± y bajar de intensidad. El Gobierno quiso este mi¨¦rcoles dejar claro p¨²blicamente ante Reino Unido que ¡°se reserva la potestad de hacer controles para evitar los tr¨¢ficos il¨ªcitos¡± y que mantendr¨¢ esta medida para velar por ¡°los intereses nacionales¡±. En estos t¨¦rminos se pronunciaron? tanto La Moncloa como el Ministerio de Asuntos Exteriores, despu¨¦s de que el conflicto por la pol¨ªtica aduanera y la actividad pesquera en el Pe?¨®n irrumpiera en la agenda del propio Mariano Rajoy.
No obstante, a pesar de la versi¨®n oficial, el Ejecutivo espa?ol est¨¢ dispuesto a ¡°modular¡± esta medida si se reanuda el di¨¢logo en una mesa en la que est¨¦n representados Londres, Madrid, el Pe?¨®n y la Junta de Andaluc¨ªa. Y, con vistas a la negociaci¨®n, es posible que en los pr¨®ximos d¨ªas se relaje la intensidad, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas.
La crisis en Gibraltar adquiri¨® este mi¨¦rcoles una nueva dimensi¨®n pasadas las diez de la ma?ana. El jefe del Ejecutivo recibi¨® una llamada telef¨®nica del primer ministro brit¨¢nico, David Cameron, quien hab¨ªa solicitado esa comunicaci¨®n a primera hora del martes. Ese mismo d¨ªa, Gibraltar empezaba a plantearse acciones legales contra Espa?a por esta medida, por lo que el Gobierno del Pe?¨®n empez¨® a recopilar ¡°pruebas estad¨ªsticas¡± y quejas de los afectados.
Cameron traslad¨® a Rajoy en una conversaci¨®n de alrededor de 10 minutos sus quejas y su ¡°seria preocupaci¨®n¡± por la crisis y su intenci¨®n de mantener la misma posici¨®n sobre la soberan¨ªa del Pe?¨®n. El presidente del Gobierno defendi¨® ¡°el cumplimiento de su obligaci¨®n de control para evitar tr¨¢ficos il¨ªcitos¡± y le transmiti¨® su malestar al calificar de ¡°inaceptable¡± que Gibraltar haya lanzado de forma ¡°unilateral¡± bloques de cemento en aguas de la bah¨ªa de Algeciras para crear un arrecife que sirva para regenerar la vida marina en la zona. Ambos acordaron, no obstante, iniciar negociaciones para tratar de resolver el conflicto a trav¨¦s de los ministros de Exteriores de ambos pa¨ªses, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo y William Hague, que se comunicaron m¨¢s tarde.
El Ejecutivo defiende¡°su obligaci¨®n de control para evitar tr¨¢ficos il¨ªcitos¡±
Entre las dos llamadas, no obstante, el Gobierno brit¨¢nico asegur¨® a trav¨¦s de un comunicado que Rajoy se hab¨ªa comprometido ante Cameron a relajar los controles que han provocado largas colas a la entrada y salida del Pe?¨®n. Tanto La Moncloa como el ministerio niegan p¨²blicamente esa promesa, en contra de lo que aseguraron Downing Street y el Foreign Office.
Fuentes diplom¨¢ticas admiten, no obstante, que dichos controles podr¨ªan ¡°modularse¡± si se cumple el principal objetivo de la diplomacia espa?ola en esta crisis: la reanudaci¨®n del di¨¢logo. Pero no cualquier di¨¢logo, sino un di¨¢logo ¡°a cuatro bandas¡±, dando por finiquitado el llamado Foro Tripartito que el Gobierno de Zapatero acept¨® y el PP rechaza de plano, ya que sentaba a Gibraltar en igualdad de condiciones con Londres y Madrid, como si fuese un Estado soberano.
La clave de la soluci¨®n pasa por un p¨¢rrafo incluido en el comunicado que hizo p¨²blico la Oficina de Informaci¨®n Diplom¨¢tica (OID) tras la conversaci¨®n que mantuvieron Margallo y Hague por indicaci¨®n de Rajoy y Cameron: ¡°Ambos ministros se han comprometido a trabajar para resolver la situaci¨®n, creando grupos de trabajo ad hoc en los que, adem¨¢s de Reino Unido y Espa?a est¨¦n presentes aquellas otras autoridades que puedan tener competencias en estas materias¡±. Los grupos de trabajo a los que se refiere la nota versar¨ªan sobre protecci¨®n del medio ambiente y pesca, y las autoridades competentes ser¨ªan, adem¨¢s de los respectivos gobiernos, el Ejecutivo de Gibraltar y la Junta de Andaluc¨ªa. Eso s¨ª, Exteriores subraya que Madrid y Londres son ¡°en ¨²ltima instancia los responsables de hacer cumplir la legislaci¨®n comunitaria¡±, al margen de qui¨¦n tenga delegadas las competencias.
La creaci¨®n de estas comisiones ya fue propuesta por Hague en una carta a Margallo en abril pasado, pero nunca se puso en pr¨¢ctica, debido a las presiones del ministro principal del Pe?¨®n, Fabian Picardo, que no renuncia a resucitar el Foro Tripartito. Si la diplomacia espa?ola consigue ahora sustituirlo por mesas cuatripartitas ser¨ªa un triunfo en toda regla, pero Margallo no se atreve todav¨ªa a cantar victoria consciente de que el Foreign Office podr¨ªa dar de nuevo marcha atr¨¢s.
Fabian Picardo no renuncia a resucitar el Foro Tripartito
Por eso el Gobierno de Madrid no renuncia a su principal baza de presi¨®n: los controles aduaneros en la verja. Oficialmente, el Ejecutivo niega cualquier relaci¨®n de estos controles con el contencioso e insiste en su legalidad, asegurando que son ¡°proporcionados, aleatorios y no discriminatorios¡± y que su ¨²nico objetivo es luchar contra el contrabando, teniendo en cuenta que el Pe?¨®n est¨¢ fuera del acuerdo de Shengen y que se rige por otra pol¨ªtica fronteriza.
Estos controles se han endurecido despu¨¦s de que, a finales del pasado julio, Gibraltar arrojase hasta 70 bloques de hormig¨®n en las aguas contiguas al aeropuerto, imposibilitando la actividad pesquera de la flota gaditana. Una medida que provoc¨® la indignaci¨®n de Madrid, por considerar que Picardo aplicaba una pol¨ªtica de ¡°hechos consumados¡± y que romp¨ªa el di¨¢logo al que se hab¨ªan comprometido Madrid y Londres en el tema de la protecci¨®n del medio marino.
El propio secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Gonzalo de Benito, manifest¨® que las esperas son ¡°un peque?o precio que hay que pagar para conseguir que las autoridades gibraltare?as vuelvan al di¨¢logo que hemos tenido hasta hace un a?o en los temas de inter¨¦s para las dos poblaciones, la de Gibraltar y la del Campo de Gibraltar¡±.
?Qu¨¦ suceder¨¢ con los controles en la verja? ¡°En los pr¨®ximos d¨ªas se podr¨¢ comprobar¡±, responden fuentes diplom¨¢ticas. Lo m¨¢s probable es que se abra un poco la mano, como gesto de distensi¨®n, a la espera de que en septiembre se constituyan las mesas ad hoc. ¡°Si todo esto ha servido para desbloquear el di¨¢logo, habr¨¢ valido la pena¡±, concluyen las mismas fuentes.
Rubalcaba ofrece colaboraci¨®n al Gobierno en un ¡°tema de Estado¡±
Esa intenci¨®n es la que manifestaron, al menos sobre papel, tanto el Gobierno espa?ol como el brit¨¢nico. Un portavoz de Downing Street manifest¨® que tras la conversaci¨®n entre Rajoy y Cameron ambas partes estuvieron de acuerdo en que habr¨¢ que encontrar una soluci¨®n al conflicto pesquero y que, en cualquier caso, la crisis en Gibraltar no debe da?ar las relaciones bilaterales. A pesar de la presi¨®n de Cameron y las quejas por los controles, adem¨¢s, La Moncloa asegur¨® que ambos pa¨ªses mantienen relaciones bilaterales propias de pa¨ªses ¡°socios, amigos y aliados¡±, que resuelven sus conflictos con ¡°honestidad y transparencia, en un di¨¢logo bilateral enmarcado dentro del respeto de la legalidad internacional, europea y nacional¡±.
A partir de esta premisa, el tono fue firme. Rajoy, seg¨²n La Moncloa, record¨® que ¡°la situaci¨®n generada por las autoridades de Gibraltar ha producido en Espa?a un profundo malestar y una gran preocupaci¨®n al perjudicar el medio ambiente y la actividad pesquera¡±, en referencia a la reciente instalaci¨®n de bloques de cemento. Reino Unido dej¨® claro que ¡°la posici¨®n sobre la soberan¨ªa de Gibraltar y las aguas que lo rodean no va a cambiar¡±. Y, pesa a las buenas intenciones, seg¨²n un portavoz de Cameron, ¡°existe un riesgo real \[de da?ar las relaciones bilaterales\]¡° si no mejora la situaci¨®n en la frontera.
El conflicto de Gibraltar centr¨® ayer la actualidad pol¨ªtica con la fuerza de una cuesti¨®n de Estado. As¨ª la calific¨® el secretario general del PSOE, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, quien apart¨® las cr¨ªticas a Rajoy y ofreci¨® al Ejecutivo la colaboraci¨®n del principal partido de la oposici¨®n. El l¨ªder de los socialistas reconoci¨® que Gibraltar ha cometido ¡°un error detr¨¢s de otro¡±. Aun as¨ª, consider¨® oportuno, en referencia a algunas manifestaciones del Gobierno, que ¡°se olvide de los excesos verbales¡±, porque ¡°estas cosas se arreglan dialogando¡± y ¡°algunas de las cosas que el ministro de Exteriores dice no son la mejor forma de arreglarlas¡±. Rubalcaba insisti¨® en que en este conflicto el Gobierno tendr¨¢ ¡°a su lado al PSOE¡±. ¡°Pero que haga las cosas bien¡±, reclam¨®, con ¡°diplomacia y di¨¢logo¡±.
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