El PSOE pide a Defensa que aclare la expulsi¨®n de una soldado con c¨¢ncer

El PSOE pedir¨¢ explicaciones al ministro de Defensa, Pedro Moren¨¦s, para que aclare el trato recibido por dos mujeres militares en el Ej¨¦rcito durante los ¨²ltimos meses. Son Zaida Cantero, una oficial que ha sido expedientada despu¨¦s de denunciar a su superior por acoso sexual, y Silvia Ruiz, que fue expulsada de las Fuerzas Armadas pese a padecer un c¨¢ncer de pecho. "Nos est¨¢n llegando noticias alarmantes a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n sobre la situaci¨®n de las mujeres en las Fuerzas Armadas. Hoy mismo hemos registrado una petici¨®n de comparecencia del ministro de Defensa porque queremos saber qu¨¦ les est¨¢ pasando a las mujeres", ha declarado este lunes la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, en rueda de prensa.

El caso de Silvia Ruiz fue adelantado por este peri¨®dico el pasado agosto. Soldado especialista en administraci¨®n del Ej¨¦rcito de Tierra, fue expulsada de las Fuerzas Armadas el 2 de julio. Nadie la llam¨® para dec¨ªrselo: se enter¨® a trav¨¦s del insulso Bolet¨ªn Oficial de Defensa. Ruiz no solo se qued¨® sin trabajo en plena crisis; tambi¨¦n perdi¨® la cobertura m¨¦dica que proporciona el Ej¨¦rcito y a la que ella estaba dando buen uso para superar un c¨¢ncer de pecho que le diagnosticaron en marzo de 2012 y del que a¨²n no est¨¢ curada.

Esta soldado de 33 a?os y natural de Valdepe?as (Ciudad Real) fue dada de baja al no concederle la tercera renovaci¨®n de su compromiso con el ej¨¦rcito, es decir, el equivalente a pasar de un contrato temporal a uno de larga duraci¨®n ¡ªhasta los 45 a?os¡ª, pero en el ¨¢mbito militar. Las causas que las Fuerzas Armadas aducen son tres: la acumulaci¨®n de tres faltas leves, el informe negativo que redact¨® su capit¨¢n en 2012 sin tener en cuenta su especialidad (era de Administraci¨®n y le pasaron a infanter¨ªa) y su actual condici¨®n f¨ªsica, que debido a su enfermedad no es la misma que cuando jur¨® bandera en 2007.

La joven supo que algo iba mal durante unas maniobras el 22 de marzo de 2012. "El sargento nos orden¨® hacer un cuerpo a tierra y, cuando toqu¨¦ el suelo con el pecho, sent¨ª un dolor muy fuerte", recuerda. Esa tarde acudi¨® al m¨¦dico, y quince d¨ªas despu¨¦s le extirparon un tumor maligno en su pecho izquierdo con met¨¢stasis en el brazo. Despu¨¦s, recibi¨® quimioterapia y radioterapia hasta febrero de 2013.

Pese a la gravedad de su dolencia, Ruiz no tuvo las cosas f¨¢ciles en el trabajo. El capit¨¢n al mando en su compa?¨ªa de entonces orden¨® su arresto hasta tres veces, la ¨²ltima de ellas fue de 14 d¨ªas por haberse negado a realizar los ejercicios aduciendo que fingi¨® una lesi¨®n el d¨ªa que sinti¨® el dolor en el pecho. Posteriormente, este capit¨¢n elabor¨® el informe negativo del que se ha valido el Ej¨¦rcito para justificar su expulsi¨®n.

Ruiz dispone de varios informes previos y posteriores con calificaciones positivas, pero ella sostiene que no se han tenido en cuenta para su renovaci¨®n. La soldado, que a¨²n lleva un cat¨¦ter introducido en el pecho para recibir la medicaci¨®n, ten¨ªa que pasar la primera revisi¨®n para saber si ha superado el c¨¢ncer el pasado 5 de julio, cuatro d¨ªas despu¨¦s de saber que no estaba cubierta por el Ej¨¦rcito. Un mes despu¨¦s, deb¨ªa someterse a una nueva intervenci¨®n para que le reconstruyeran su pecho amputado. Al pasar a la sanidad p¨²blica, ahora tendr¨¢ que esperar un a?o para someterse a esa cirug¨ªa.

Durante el ¨²ltimo a?o y medio, y mientras intentaba ganar la batalla al c¨¢ncer, Ruiz interpuso varios recursos contra el expediente negativo de su antiguo superior y, a pesar de su enfermedad, present¨® su solicitud de renovaci¨®n. Ahora est¨¢ esperando la contestaci¨®n definitiva del Ej¨¦rcito antes de dar el paso siguiente. Mientras, su caso ha sido recogido en algunos medios de comunicaci¨®n, su madre ha iniciado una recogida de firmas en Internet para sumar personas a su causa y ha recibido con sorpresa el inter¨¦s del PSOE por su caso. "Algo hab¨ªa o¨ªdo, pero pensaba que solo hablaban de la otra chica, la que fue acosada", explica.

Silvia no cree posible que la readmitan en el Ej¨¦rcito pero, al menos, quiere hacer hincapi¨¦ en la injusticia que se cometi¨® con ella, sobre todo en lo relacionado con su arresto. "Una persona no puede estar arrestada por fingir una supuesta lesi¨®n cuando es una enfermedad", denuncia.