Un joven discapacitado consigue la daci¨®n en pago de un piso que hered¨®

A las seis y media de la tarde, Alejandro Tapia Salgado se encuentra recibiendo sus clases de Educaci¨®n Secundaria para Adultos. En un d¨ªa cualquiera, ser¨ªa lo habitual, pero este le est¨¢ costando no salir a celebrarlo: es lunes 14 de octubre y el joven de 20 a?os ha conseguido que el banco al que adeudaba 120.000 euros por un piso que hered¨® lo acepte como daci¨®n en pago d¨ªas antes de ser desahuciado. Seg¨²n datos del Colegio de Registradores de Espa?a publicados en abril, durante 2012 se ejecut¨® un desahucio cada 15 minutos en Espa?a. Madrid, Catalu?a, Valencia y Andaluc¨ªa aglutinaron el 65% del total.

Tapia, de 20 a?os, sevillano y con una discapacidad del 80% por una variante de par¨¢lisis cerebral infantil que le ata a una silla de ruedas, inici¨® una andadura por los juzgados de su ciudad demasiado pronto, cuando solo ten¨ªa 15 a?os. Qued¨® hu¨¦rfano en 2008, al morir su madre de una angina de pecho, y hered¨® un piso de protecci¨®n oficial en el barrio de San Jer¨®nimo que ella disfrutaba desde el a?o anterior. El primer problema con el que tuvo que lidiar es que se le col¨® un okupa. "Era el novio de mi madre, que decidi¨® quedarse all¨ª a vivir pese a que mi hermano y yo ¨¦ramos los ¨²nicos herederos y quer¨ªamos que se marchase", explica. Tapia inici¨® un procedimiento judicial desde el centro de menores donde viv¨ªa. "Estaba bajo la supervisi¨®n de mis tutores de la Junta, pero yo lo gestion¨¦ todo, yo fui a todas las reuniones", relata.

Pasaron los a?os y su pesadilla, lejos de acabar, se duplic¨®. Porque consigui¨® echar al okupa, pero entonces la entidad le reclam¨® la totalidad de la deuda a cuenta de no haber pagado las mensualidades de la hipoteca: en total, 120.000 que deb¨ªa pagar un chico con 18 a?os reci¨¦n cumplidos y una pensi¨®n de 547 euros al mes. "Me encontr¨¦ indefenso ante la Justicia y ante todo; y mi abogado de oficio no hac¨ªa nada, as¨ª que acud¨ª a la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH)". Eduardo Mart¨ªn Gonz¨¢lez, otro afectado como ¨¦l, respondi¨® a su llamada, y moviliz¨® a los casi dos centenares de personas que colaboran en la PAH sevillana para prestar apoyo a Alejandro. "Estamos atendiendo a unas 15 o 20 familias cada semana en este tel¨¦fono", detalla.

La suerte de Alejandro Tapia y de su hermano Antonio cambi¨® desde que dieron con la PAH y desde que un abogado experto en desahucios, Jos¨¦ Luis Alcaraz, se ofreci¨® a llevar el caso de manera voluntaria. El punto clave fue el encierro que protagonizaron 50 miembros de la plataforma el pasado verano en una sucursal de BBVA de la capital hispalense. "Salimos en varios programas de televisi¨®n y al banco ya no le qued¨® m¨¢s remedio que ceder. Mi abogado redact¨® el documento de la daci¨®n y, hoy, por fin, hemos firmado", comenta.

?Satisfecho? El joven asiente, pero en seguida insiste en que le queda un sabor agridulce. "?Por qu¨¦ yo he tenido esta suerte y hay tantas familias que no la tienen?", se pregunta. "La daci¨®n en pago no deber¨ªa ser una excepci¨®n, sino la norma". Tapia ahora vivir¨¢ tranquilo; comparte piso con amigos, tiene pareja y se dedica a estudiar, pero asegura que su labor en la PAH no ha hecho m¨¢s que empezar. "Voy a seguir luchando por otras familias, tiene que cambiar el sistema, la ley actual es abusiva y el Gobierno no la cambia porque no quiere", sentencia.

En verano nos encerramos en una sucursal, salimos en la televisi¨®n y al banco no le qued¨® m¨¢s remedio que ceder

Su compa?ero y portavoz de la PAH sevillana, Eduardo Mart¨ªn, denuncia la situaci¨®n de "absoluta indefensi¨®n" en la que se encuentran. "Han aumentado los desahucios desde que termin¨® el verano, estamos trabajando ma?ana y tarde en atender a nuevas familias amenazadas, yo mismo estoy a punto de ser desahuciado", insiste. "A Alejandro le han ayudado personas con el mismo problema que ¨¦l, no tenemos ning¨²n apoyo m¨¢s all¨¢ del que nosotros mismos nos damos", se queja.