Barcina: ¡°No los reconozco porque ten¨ªa los ojos llenos de merengue¡±
La Audiencia Nacional juzga a cuatro acusados de lanzar tartas a la presidenta navarra en 2011 La fiscal¨ªa pide cinco a?os de c¨¢rcel para cada uno de los imputados
Los cuatro miembros del colectivo ecologista Mugitu que presuntamente lanzaron tres tartas al rostro y la cabeza de la presidenta de Navarra, Yolanda Barcina, han negado ser los autores del? ataque, que tuvo lugar en octubre de 2011 en Toulouse (Francia), cuando Barcina participaba en el XXIX Consejo Plenario de la Comunidad de Trabajo de los Pirineos (CTP), donde fue nombrada presidenta. Si el juez? Fernando Grande-Marlaska les considera culpables, podr¨ªan cumplir cinco a?os de prisi¨®n y tendr¨¢n que pagar una multa de 2.700 euros por un delito de atentado contra la autoridad.
Durante el juicio, celebrado este lunes en la Audiencia Nacional, Barcina ha reconocido que no pudo reconocer a los autores del ataque porque "ten¨ªa los ojos llenos de merengue". "Fue un tartazo fuerte y me hizo mucho da?o. Me sent¨ª sorprendida y desorientada", ha descrito. La presidenta popular ha aclarado que no reclama da?os por la ropa estropeada pero s¨ª "justicia ante esa agresi¨®n", la primera que ha sufrido en su vida, ha asegurado.
Uno de sus escoltas, sin embargo, ha indicado que identific¨® a tres de los cuatro imputados en un reconocimiento fotogr¨¢fico posterior y en los v¨ªdeos que en los d¨ªas sucesivos se publicaron en varios medios de comunicaci¨®n y en el propio blog de Mugitu, la plataforma de protesta contra la construcci¨®n del Tren de Alta Velocidad (TAV) a la que pertenecen los acusados y que reivindic¨® la acci¨®n. Estos son Gorka Ovejero Bengoa, teniente de alcalde de Arruazu, Ibon Garc¨ªa Garrido, Julio Mart¨ªn Villanueva y Mikel ?lvarez Forcada. Todos ellos han negado ser los autores del ataque e incluso haber estado en Toulouse aquel d¨ªa. A su juicio, su imputaci¨®n responde a un intento de criminalizar su lucha contra el TAV. Solo han respondido a las preguntas de su abogado, y no a las de la fiscal¨ªa y la acusaci¨®n particular.
Los escoltas que atendieron a Barcina han declarado que ¨¦sta se encontraba aturdida y desorientada. "Estaba cegada, indefensa, no sab¨ªa d¨®nde se dirig¨ªa y no pod¨ªa reconocer a nadie", ha indicado uno de ellos. Por estos hechos, la acusaci¨®n particular ha rebajado la pena de seis a cinco a?os para tres de los acusados y de nueve a seis a?os y tres meses para Gorka Ovejero, por haber hecho uso de su condici¨®n de autoridad municipal para sabotear el acto.
El abogado de la defensa, Gonzalo Boy¨¦, ha pedido la absoluci¨®n de sus clientes porque los hechos por los que se les acusa ya fueron investigados y archivados en Francia. "Si esta legislaci¨®n vale para los cr¨ªmenes de guerra, tambi¨¦n vale para tres tartazos de merengue", ha aseverado. En este sentido, ha recordado el esc¨¢ndalo "mundial" que supuso caso de un periodista condenado a tres a?os de c¨¢rcel en Irak tras haber lanzado dos zapatos al expresidente del Gobierno de EE UU, George Bush. "Sea un tribunal europeo y no un tribunal iraqu¨ª", ha sugerido a Grande-Marlaska.?
Adem¨¢s, ha reprochado a la acusaci¨®n no haber pedido en dos a?os pruebas como una rueda de reconocimiento, el v¨ªdeo original de los hechos o haber cotejado el ADN de los acusados con el de las cajas de las tartas, en posesi¨®n de las autoridades francesas. "Estos se?ores no son testigos de nada, han investigado de o¨ªdas lo que Barcina le dijo al consejero de Interior", ha recriminado el letrado en referencia a la declaraci¨®n de los dos escoltas y a la polic¨ªa foral de Navarra que se hizo cargo de la investigaci¨®n.
Seg¨²n las conclusiones provisionales de la fiscal Blanca Rodr¨ªguez, los cuatro acusados estaban presentes en ese acto cuando en un determinado momento se levantaron y se dirigieron hacia el estrado de las autoridades y en ese momento Ovejero, sac¨® de una carpeta "una tarta que portaba oculta, abalanz¨¢ndose de forma sorpresiva y de manera en¨¦rgica" contra Barcina, "golpe¨¢ndola de forma contundente en el rostro con dicha tarta".
Mientras "permanec¨ªa aturdida", los acusados Julio Mart¨ªn Villanueva e Ib¨®n Garc¨ªa Garrido se acercaron por detr¨¢s a la presidenta, "que estaba privada de toda visi¨®n como consecuencia del impacto de la tarta en los ojos", y le "estamparon" en la cabeza las tartas que llevaban ocultas. El cuarto acusado, Mikel ?lvarez Forcada, irrumpi¨® en la mesa de la ponencia, "apoyando a los procesados atacantes", indica la fiscal en su escrito de acusaci¨®n.
El abogado de los cuatro acusados trat¨® en su d¨ªa que la Audiencia Nacional se inhibiera de juzgar estos hechos alegando que la competencia correspond¨ªa a los tribunales franceses por haber sucedido los hechos en Toulouse. El abogado tambi¨¦n aleg¨® cosa juzgada, ya que en Francia se les abri¨® a los acusados una investigaci¨®n por dos faltas: una de violencia voluntaria y otra de da?os, castigadas ambas con multa, aunque finalmente fue archivada.
A este respecto, la secci¨®n primera de la Sala de lo Penal, a la que corresponde enjuiciar esta agresi¨®n, acord¨® finalmente que la Audiencia Nacional era competente para juzgar a los acusados porque "no existe ning¨²n riesgo de que se est¨¦n sancionando doblemente los mismos hechos", ya que cuando Francia archiv¨® el caso no se pronunci¨® sobre si eran delictivos sino que argument¨® que ya se segu¨ªa un procedimiento en Espa?a.
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