B¨¢rcenas empa?a el balance de ecuador de legislatura

La misma semana en que el PP se enfrenta al extesorero Luis B¨¢rcenas en los tribunales, Mariano Rajoy re¨²ne a la plana mayor del partido que lleva casi un a?o sumido en un laberinto por el esc¨¢ndalo del extesorero. Lo hace hoy, d¨ªas despu¨¦s de que el juez Pablo Ruz corroborara que la formaci¨®n tuvo una contabilidad b ¡°continua en el tiempo¡± y ¡°una cierta corriente financiera de cobros y pagos¡± reflejada en los papeles del antiguo responsable de finanzas.

Esta circunstancia, al margen del discurso que el presidente del Gobierno dirija hoy a los suyos, despierta todos los fantasmas de los populares y, sobre todo, un temor. Esto es, que el caso vuelva a ocupar los titulares de la prensa, empa?ar el balance de ecuador de la legislatura que deber¨ªa ser el eje central de esta reuni¨®n y hundir de nuevo al partido en las encuestas precisamente ahora que mejoran las previsiones macroecon¨®micas.

Mientras, la direcci¨®n nacional se escuda en su mantra oficial: ¡°Hay una sola contabilidad, que es la enviada al juez Ruz y est¨¢ fiscalizada por el Tribunal de Cuentas¡±. Una afirmaci¨®n que choca con lo que opinan otros dirigentes, que consideran evidente que en el pasado existi¨® una caja b, aunque la vinculan exclusivamente a los manejos y a los intereses del extesorero. Y el error que muchos reconocen ahora es que en su momento no se hizo nada para frenar a B¨¢rcenas.

El PP retir¨® la semana pasada la demanda contra EL PA?S por la publicaci¨®n de los apuntes manuscritos del extesorero, despu¨¦s de que este reconociera la autor¨ªa de sus notas contables. La formaci¨®n tramit¨® esta decisi¨®n de forma conjunta con el exvicepresidente econ¨®mico Rodrigo Rato, el exministro ?ngel Acebes, el actual vicesecretario de Pol¨ªtica Local y Auton¨®mica del PP, Javier Arenas, y el portavoz popular en el Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja.

¡°Los recientes hechos tienen, a juicio de los demandantes, una trascendente influencia jur¨ªdica¡± que motiva la renuncia, mantiene el escrito, en referencia al reconocimiento de la autor¨ªa de B¨¢rcenas. Los cuatro dirigentes populares ya anunciaron su intenci¨®n de retirar la demanda el 18 de octubre, ¡°en coherencia¡± con la decisi¨®n tomada por la secretaria general, Dolores de Cospedal, antes del cara a cara con el antiguo responsable de finanzas celebrado en Toledo.

Entonces, varios cargos del partido mayoritario criticaron esa estrategia judicial por dar un altavoz al antiguo responsable de finanzas. En ese contexto, el PP tambi¨¦n solicita, en este ¨²ltimo escrito, que en el juicio previsto para el 28 de noviembre no se interrogue a B¨¢rcenas, as¨ª como a varios testigos y peritos. Se trata de una decisi¨®n ins¨®lita, puesto que el partido s¨ª mantiene su acci¨®n judicial contra el dirigente que manej¨® las cuentas de la formaci¨®n durante dos d¨¦cadas.

Tras celebrarse el juicio de Cospedal, muy pocos entend¨ªan por qu¨¦ las secretaria general no evit¨® el ¡°espect¨¢culo¡±, en definici¨®n muy extendida, de ver en todas las televisiones la imagen de su choque en directo con Luis B¨¢rcenas desde la c¨¢rcel, que con su memoria, su aplomo y sus grav¨ªsimas acusaciones domin¨® enseguida la escena. Los m¨¢s cercanos a Cospedal explicaban que no se trataba de una cuesti¨®n de estrategia pol¨ªtica, sino de honor. Ella estaba decidida a llegar hasta el final en la defensa de su honor, costara lo que costara, se?alan, y por eso no quiso retirar la demanda, a pesar del riesgo enorme que eso supon¨ªa para el partido.

La decisi¨®n de Cospedal rompi¨® totalmente la estrategia del PP y del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que consist¨ªa en no decir una palabra sobre el caso B¨¢rcenas para intentar que desapareciera del primer plano. Ante la posibilidad de que se vuelva a producir, el PP formaliza esa petici¨®n al juez.