La Infanta se escuda en la ignorancia y la desmemoria para responder al juez

La infanta Cristina se escud¨® en la ignorancia y la desmemoria ¡ªus¨® evasivas m¨¢s de 533 veces al responder a 400 preguntas¡ª en su declaraci¨®n ante el juez Jos¨¦ Castro para declararse ajena a los negocios y actividades bajo sospecha de su marido, I?aki Urdangarin, seg¨²n la transcripci¨®n escrita de su testimonio que este jueves conocieron las partes. ¡°Yo no he intervenido en nada¡±, asegur¨® la infanta. Durante el interrogatorio, la hija del Rey neg¨® que asistiese a reuniones de su sociedad Aizoon ¡ª¡°No me enteraba de nada. No s¨¦ los detalles¡±¡ª y rechaz¨® haber pagado en negro a sus sirvientes, como declar¨® uno de ellos.

El esposo de la Infanta se enfrenta a una posible petici¨®n de la fiscal¨ªa de hasta 19 a?os de c¨¢rcel por malversar seis millones de euros p¨²blicos, junto a su exsocio Diego Torres, a trav¨¦s del Instituto N¨®os. La sociedad de los Urdangarin-Borb¨®n, Aizoon, una pantalla seg¨²n la Audiencia de Palma, ingres¨® hasta 1,4 millones de esos fondos sucios.

La Infanta arguy¨® ante el juez: ¡°Desconozco los detalles de las sociedades y de las organizaciones, si son mercantiles o no lo son, c¨®mo son las organizaciones, pero en este caso concreto me lo pide mi marido [crear al 50% Aizoon], a m¨ª me parece bien, conf¨ªo en el proyecto y nada m¨¢s all¨¢¡±.

La imputada recalc¨® que sus d¨ªas estaban ocupados en su agenda profesional, oficial y familiar, que no era experta en derecho tributario y que todos los detalles de los mecanismos de la rendici¨®n de cuentas ante Hacienda estaban en manos de sus asesores de la Casa del Rey.

Para el juez Jos¨¦ Castro, la Infanta es sospechosa de presuntos delitos de blanqueo de dinero y fraude fiscal. El fiscal Pedro Horrach, que no ve argumentos para la imputaci¨®n, exigir¨¢ a Cristina de Borb¨®n que retorne 600.000 euros, la mitad del caudal del que se lucr¨® su compa?¨ªa Aizoon, aun sin ser responsable penal del caso.

La esposa de Urdangarin se retrat¨® durante el interrogatorio como una mujer ajena a la actividad de la empresa familiar, que dejaba todo en manos de su marido: ¡°Yo conf¨ªo en mi marido. Mi marido es el que lleva los temas econ¨®micos y [lo que me propuso] a m¨ª me pareci¨® bien. Yo nunca se lo he preguntado, ni he controlado ni he gestionado (¡­) Aizoon, ni s¨¦ c¨®mo han ido las cosas. Desconozco lo que hac¨ªa Aizoon¡±.

El instructor interrog¨® y exhibi¨® documentos, pregunt¨® sobre todas las pistas, personajes, facturas y correos electr¨®nicos de relevancia que constan en los m¨¢s de 27.000 folios de la causa. Requiri¨® a la hija del Rey qu¨¦ papel tuvo don Juan Carlos, su padre, en distintos proyectos y contactos de patrocinio deportivo de las entidades de Urdangarin; tambi¨¦n indag¨® sobre hipot¨¦ticas gestiones del Pr¨ªncipe a favor de su cu?ado ante un empresario. ¡°Yo con el Rey he hablado de temas de vela, (...) pero nada que ver con ninguna organizaci¨®n de ning¨²n tipo de nada¡±, recalc¨® Cristina.

El instructor se dirigi¨® a la infanta como ¡°se?ora¡±, ¡°usted¡± o ¡°se?ora de Borb¨®n¡±. En sus respuestas, ella blind¨® al Monarca de todo conocimiento de los asuntos pol¨¦micos: ¡°No hemos hablado nunca de las actividades de N¨®os¡±. Jos¨¦ Castro quiso saber c¨®mo la Zarzuela apart¨®, te¨®ricamente, en 2006 a Urdangarin de sus negocios desde el Instituto N¨®os. La Infanta contest¨® que el duque deb¨ªa irse de los negocios con instituciones ¡°por razones est¨¦ticas y de imagen, para evitar malas interpretaciones, pero no m¨¢s¡±.

El juez insisti¨® sobre el papel del secretario de las infantas, Carlos Garc¨ªa Revenga, imputado en el caso, y del asesor jur¨ªdico Jos¨¦ Manuel Romero, que es testigo.

Castro tambi¨¦n profundiz¨® sobre las circunstancias del pr¨¦stamo de 1,2 millones de euros que el Rey hizo a su hija para ayudarla a comprar su palacete familiar de Pedralbes, en Barcelona, por seis millones, y en el que se gast¨® cerca de tres millones m¨¢s en obras de reforma. ¡°Es un pr¨¦stamo y tengo toda la intenci¨®n de devolv¨¦rselo¡±, respondi¨®. ¡°Al final es mi padre y se f¨ªa de m¨ª¡±. Pero solo ha podido pagar 150.000 euros al Rey en casi diez a?os, porque ¡°las circunstancias que tenemos ahora no son las mismas que ten¨ªamos entonces, y ahora no estamos en condiciones de devolver nada¡±, se?al¨® sobre sus finanzas.

El matrimonio Urdangarin ¡°nunca¡± habl¨® de sus ¡°temas de trabajo en la intimidad¡±, contest¨® repetidamente la Infanta. Do?a Cristina rechaz¨® que fuera utilizada como figura de protecci¨®n ante Hacienda, seg¨²n declar¨® el notario Carlos Masi¨¢. ¡°Nunca hubiese aceptado que se me hubiera utilizado como escudo fiscal, nunca, no me consta y casi me ofende, Se?or¨ªa¡±. Y a?adi¨®: ¡°Por ser hija del Rey quiz¨¢ se me ha sometido a un escrutinio mayor y se me ha mirado con m¨¢s detalle en todos los temas¡±.