Demasiadas expectativas

Levantar demasiadas expectativas sobre un acontecimiento tiene serios riesgos. Es lo que ha sucedido con el anuncio del Comit¨¦ Internacional de Verificaci¨®n (CIV) sobre el desarme de ETA. El inventario que ha presentado el CIV sobre el sellado de zulos de ETA es decepcionante y queda muy por debajo de las expectativas levantadas sobre el inicio del desarme de la banda terrorista.

Otra vez ETA se da un plazo para materializar su desarme total, un compromiso que ayer adelant¨® el coordinador del CIV, Ram Malikaningam. Aunque rehus¨® dar fechas entre el inicio del desarme, en enero, y su culminaci¨®n, en los medios abertzales se especula con un a?o. Es mucho el tiempo que ETA se da para culminar su proceso de desaparici¨®n definitiva de la escena porque la sociedad ya la da por amortizada desde que hace dos a?os anunci¨® el cese definitivo de su actividad armada. Por ello, los principales partidos vascos coincidieron ayer en exigir a la izquierda abertzale, que se ha hecho con el control del llamado movimiento vasco de liberaci¨®n, que presione a ETA para acelerar su final definitivo

Pese a la clara insuficiencia del inicio del desarme de ETA, hay que valorar el car¨¢cter unilateral de ese paso de la banda terrorista, que no est¨¢ condicionado a ning¨²n proceso de negociaci¨®n como se tem¨ªa en algunos ¨¢mbitos pol¨ªticos, sobre todo fuera del Pa¨ªs Vasco. Ayer, los verificadores internacionales lo destacaron como una singularidad, dentro de su experiencia como participantes en resoluciones de conflictos.

No resulta tan singular para los verificadores internacionales la f¨®rmula que se va a seguir en este proceso: el sellado o eliminaci¨®n de zulos en vez de proceder a la entrega de armas. Su coordinador, Ram Manikalingam, destac¨® que exist¨ªan precedentes en Irlanda del Norte, la antigua Yugoslavia y Nepal.

Tambi¨¦n resulta muy relevante el compromiso de la banda terrorista de culminar el desarme en su totalidad, seg¨²n aval¨® ayer el CIV, que ha mantenido contactos regulares con sus dirigentes, en la medida que supone la consolidaci¨®n de su final irreversible.

Los verificadores internacionales atribuyen la lentitud de sus movimientos al temor de los dirigentes de ETA a ser detenidos al salir de sus escondites para ratificar el desarme. E incluso pidieron ayer al Gobierno vasco y a los dirigentes de los partidos con los que se reunieron que reclamaran al Ejecutivo de Rajoy que facilitaran esos movimientos.

Pero tambi¨¦n cuenta en la lentitud del proceso de finalizaci¨®n de ETA, seg¨²n los verificadores internacionales, el inter¨¦s no s¨®lo de los jefes de la banda sino tambi¨¦n de la izquierda abertzale en evitar escisiones que podr¨ªan producirse si las decisiones de la direcci¨®n fueran r¨¢pidas e insuficientemente asumidas.

Seg¨²n esta misma tesis, ha tardado por ello m¨¢s de dos a?os desde el cese definitivo del terrorismo de ETA, el colectivo de presos de la banda en asumir la legalidad penitenciaria y casi dos a?os y medio el inicio del desarme.

La izquierda abertzale tambi¨¦n est¨¢ aprovechando el alargamiento del proceso para tratar de mostrar ante la opini¨®n p¨²blica vasca que el esfuerzo principal en el proceso final de ETA lo est¨¢ haciendo ella frente al ¡°inmovilismo¡± de los dem¨¢s. Pero lo que la izquierda abertzale tiene que medir, tambi¨¦n, es que hace ya m¨¢s de dos a?os que ETA ces¨® definitivamente el terrorismo, que la sociedad ya la da por amortizada y que, por tanto, cuanto antes desaparezca ser¨¢ mejor no s¨®lo para la sociedad sino para la reinserci¨®n de los presos de la banda y para la propia izquierda abertzale.

Resulta, a su vez, urgente que ambos gobiernos y los principales partidos unifiquen sus criterios y mensajes para abordar el complejo final de ETA.