Puedo prometer y prometo...
El hist¨®rico mensaje pronunciado por Su¨¢rez el 13 de junio de 1977 para solicitar el voto a UCD en las elecciones generales
Buenas noches, se?oras y se?ores:
Vengo a hablarles de un nuevo horizonte para Espa?a. Vengo a solicitar su voto para hacerlo posible. Vengo, como candidato, a pedir su voto para la Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico.
No vengo con f¨¢ciles palabras a la conquista de votos f¨¢ciles. S¨¦ muy bien ¡ªy lo demuestra la experiencia¡ª que quienes alcanzan el Poder con demagogia terminan haci¨¦ndole pagar al pa¨ªs un precio muy caro.
Lo primero que quiero advertir es que las elecciones no resuelven por s¨ª mismas los problemas, aunque es el paso previo y necesario para su soluci¨®n. Durante esta campa?a electoral ustedes han o¨ªdo y oir¨¢n muchos programas pol¨ªticos. Pienso que todos se parecen demasiado; que todos los partidos predican aparentemente lo mismo.
Quiz¨¢ esto ha provocado la incredulidad y desconfianza de los ciudadanos, porque sabemos que todo no se puede hacer de la noche a la ma?ana. Tiene, sin embargo, una ventaja, que es la de saber con certeza cu¨¢les son nuestros problemas.
Efectivamente, ya nadie duda de que hay que eliminar muchas deficiencias y muchas injusticias. Desde la absurda discriminaci¨®n de la mujer hasta la superaci¨®n de todos los desequilibrios sociales, culturales y econ¨®micos.
Creo, sin embargo, que todos estos problemas no se resuelven con palabras ni prometiendo a los ciudadanos que al d¨ªa siguiente de las elecciones va a despertarse en el pa¨ªs de las delicias.
Quienes han asistido a la penosa construcci¨®n de la Espa?a de hoy saben con cu¨¢nto esfuerzo se ha alcanzado las cotas de desarrollo en que estamos situados.
Saben de la amargura de las familias rotas por la emigraci¨®n. Saben de las horas de pluriempleo para alcanzar una mejor calidad de vida. Y saben tambi¨¦n de la dureza de una libertad insuficiente y de los graves y dif¨ªciles momentos que hemos vivido en estos ¨²ltimos once meses. Demasiado duro todo. Demasiado costoso todo para que ahora nos hagamos la ilusi¨®n de que existe una vara m¨¢gica para encontrar todas las soluciones inmediatamente.
Por eso Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico no se presenta a ofrecer utop¨ªas. Formamos un equipo de hombres con experiencia pol¨ªtica y de Gobierno capaces de dirigir los intereses de la Naci¨®n y de ser una v¨ªa segura a la democracia.
A nuestra derecha existen partidos y coaliciones que propugnan reformas que nosotros consideramos absolutamente insuficientes y que tienen un talante pol¨ªtico que juzgamos poco propicio al di¨¢logo.
A nuestra izquierda, los partidos m¨¢s importantes ofrecen a corto plazo unos objetivos moderados, pero ellos mismos no ocultan que su meta es lograr una sociedad inspirada y dominada por la ideolog¨ªa marxista.
Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico constituye la v¨ªa media, sin riesgos de improvisaci¨®n o inexperiencias. Pretendemos hacer m¨¢s cierta y eficaz la participaci¨®n de todos los espa?oles, seg¨²n se?al¨® el Mensaje de la Corona.
Creemos que Espa?a se debe construir con la colaboraci¨®n de derecha y la izquierda, aunque defendemos un modelo de sociedad diferente. Y todo ello queremos lograrlo a trav¨¦s de la moderaci¨®n, el di¨¢logo y el pacto, porque nadie puede pretender que su verdad sea la ¨²nica.
No voy, por supuesto, a repetirles el programa de Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico. Pero s¨ª quiero decirles que, si el pa¨ªs necesita reformas econ¨®micas y sociales y reformas profundas, pero con moderaci¨®n y sin marxismo, en Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico est¨¢ la ideolog¨ªa social democr¨¢tica que las propugna.
Que si a Espa?a le urge un talante liberal y no radical, en Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico est¨¢n los partidos liberales de mayores credenciales.
Que si en el pa¨ªs existe una concepci¨®n cristalina de las relaciones familiares y sociales, en Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico hay democracia cristalina.
Que si el programa regional es una de las grandes cuestiones pendientes de soluci¨®n, en Uni¨®n de Centro est¨¢n partidos regionales que llevar¨¢n a las Cortes las ansias de que los pueblos de Espa?a tengan personalidad propia.
Que, en fin, si este pa¨ªs necesita que se superen los enfrentamientos, que haya una s¨ªntesis de esas dos Espa?as de ingrato recuerdo, en Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico se unen los ideales de hombres que durante a?os lucharon en la oposici¨®n por la democracia y hombres que consideraron un deber participar dentro de la legalidad.
Estos son los hombres para los que solicito su voto.
En cuanto a m¨ª, deseo expresar mi gratitud por el apoyo popular prestado al Gobierno durante estos once meses. Creo que he servido con honestidad y, desde luego, dedicando todo mi tiempo, segundo a segundo, a la tarea de gobernar y de sortear los riesgos y peligros que amenazaban el logro de estas elecciones y que todav¨ªa hoy pueden perturbarlas.
No procedo ni estoy ligado a ning¨²n sector privilegiado. Y mis cuentas est¨¢n claras, como pueden ustedes comprobar en la declaraci¨®n de bienes que en 1975, al ser nombrado ministro del primer Gobierno de la Monarqu¨ªa, hice ante el notario de Madrid don Jos¨¦ Luis Crespo Rom¨¦u.
El candidato que les habla procede del medio rural y sabe de las penalidades del hombre del campo, que sigue esperando una mano redentora. Soy una persona normal y he procurado gobernar desde la normalidad.
Escuch¨¦ a todos e intent¨¦ hacer posible que todos los grupos, cualquiera que fuese su ideolog¨ªa, pudieran trabajar por Espa?a desde la legalidad.
Acert¨¦ algunas veces, me habr¨¦ equivocado en otras ocasiones.
Pero pueden estar seguros de que nunca hubo improvisaci¨®n en la tarea de gobierno. Como espa?oles creo que podemos tener el orgullo de que en estos once meses Espa?a ha empezado a contar positivamente en el mundo actual y este mundo haya comenzado a contar con Espa?a.
Si ustedes desean mi sinceridad, les dir¨¦ que aspiro a proseguir la tarea, porque tengo vocaci¨®n pol¨ªtica y para un pol¨ªtico las dificultades de dirigir un pa¨ªs est¨¢n compensadas por la satisfacci¨®n de trabajar por y para todos sus conciudadanos
Creo modestamente que en esta nueva hora de Espa?a y al pedirles su voto, no traigo mis papales en blanco ni soy una inc¨®gnita.
Prometimos normalizar nuestra vida pol¨ªtica, gestionar la transici¨®n en paz, construir la democracia desde la legalidad, y creemos que, con las l¨®gicas deficiencias, lo hemos conseguido.
Prometimos que todas las familias pol¨ªticas pudieran tener un lugar en las Cortes, y el mi¨¦rcoles pueden lograrlo.
Pienso que ya est¨¢ ordenado el mapa pol¨ªtico espa?ol y se puede comenzar a construir sobre ¨¦l. Esta Espa?a, que ya es pol¨ªticamente de todos, debe comenzar a serlo tambi¨¦n en lo social, en lo econ¨®mico y en lo cultural.
Pero quiero insistir, se?oras y se?ores, en que nada va a ser f¨¢cil. No puedo asegurarles soluciones inmediatas y milagrosas ni que de la noche a la ma?ana se satisfagan todas las reivindicaciones, incluso las de estricta justicia.
No puede asegurar que se arreglen r¨¢pidamente problemas que se vienen arrastrando desde hace muchos a?os, aunque la actual libertad de expresi¨®n los haga aparecer como nuevos.
No puedo asegurarles nada de esto, porque somos un pa¨ªs con recursos limitados, con deficientes estructuras, con desigualdades irritantes y con una legislaci¨®n que no se acomoda a la realidad de mil novecientos setenta y siete.
Pero si ustedes nos dan su voto,
Puedo prometer, y prometo, que nuestros actos de gobierno constituir¨¢n un conjunto escalonado de medidas racionales y objetivas para la progresiva soluci¨®n de nuestros problemas.
Puedo prometer, y prometo, intentar elaborar una Constituci¨®n en colaboraci¨®n con todos los grupos representados en las Cortes, cualquiera que sea su n¨²mero de esca?os.
Puedo prometer, y prometo, porque despu¨¦s de las elecciones ya existir¨¢n los instrumentos necesarios, dedicar todos los esfuerzos a lograr un entendimiento social que permita fijar las nuevas l¨ªneas b¨¢sicas que ha de seguir la econom¨ªa espa?ola en los pr¨®ximos a?os.
Puedo prometer, y prometo, que los hombres de Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico promover¨¢n una reforma fiscal que garantice, de una vez para todas, que pague m¨¢s quien m¨¢s tiene.
Puedo prometer, y prometo, un marco legal para institucionalizar cada regi¨®n seg¨²n sus propias caracter¨ªsticas.
Puedo prometer, y prometo, que trabajaremos con honestidad, con limpieza y de tal forma, que todos ustedes puedan controlar las acciones de gobierno.
Puedo, en fin, prometer y prometo, que el logro de una Espa?a para todos no se pondr¨¢ en peligro por las ambiciones de algunos de los privilegios de unos cuantos.
Se?oras y se?ores:
Hoy como candidato solicito su voto. Lo solicito para las candidaturas al Congreso que Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico presenta en toda Espa?a y para los hombres y mujeres de Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico que aspiran al Senado.
Al hacerlo los convoco a un nuevo horizonte. Hemos sacado adelante la Reforma Pol¨ªtica. Ahora debemos llevar adelante las dem¨¢s reformas que este gran pa¨ªs y este gran pueblo necesitan.
A ello les convoco. No los llamo a la comodidad, sino al esfuerzo y al trabajo para hacer una Espa?a mejor. Vamos a soportar sacrificios, ¨¦sta es la verdad. Pero lo soportaremos todos, sin una sola excepci¨®n.
Con la asistencia de ustedes, desde la normalidad que estamos alcanzando, desde la moderaci¨®n que nos inspira, desde el di¨¢logo con todos los grupos y partidos, creo que seremos capaces de consolidar definitiva y firmemente una Monarqu¨ªa democr¨¢tica, capaz de dar respuesta realista a los problemas que nos acucian. Ese es, se?oras y se?ores, nuestro horizonte.
Y para ello les pido su voto.
Muchas gracias.
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