G¨¹rtel se quej¨® de que el PP no le pagaba para destinar todo el dinero al ¡®Prestige¡¯

Los problemas de la trama de Francisco Correa para cobrar los trabajos que realizaba para el PP no eran infrecuentes. Sucedi¨® en Valencia tras el estallido de la crisis y en Galicia a principios de la pasada d¨¦cada. En 2003 la direcci¨®n regional gallega deb¨ªa 150.000 euros a las empresas del l¨ªder de la red G¨¹rtel por actos de las campa?as de 1999 (municipales) y 2001 (auton¨®micas) y los intereses devengados. Los cabecillas de la trama escribieron a varios l¨ªderes populares pidi¨¦ndoles su mediaci¨®n para cobrar, que han sido recogidas en un informe policial.

?lvaro P¨¦rez, El Bigotes, quien m¨¢s tarde se convertir¨ªa en el ¡°amiguito¡± del expresidente valenciano Francisco Camps, se quej¨® en una de las misivas dirigida a Javier Arenas de que el gerente del PP gallego, Modesto Fern¨¢ndez, se resist¨ªa a pagar la deuda argumentando que deb¨ªa destinar todos los fondos a la cat¨¢strofe ecol¨®gica del Prestige.

El Bigotes manifestaba a Arenas su extra?eza por tal respuesta: ¡°Modesto Fern¨¢ndez nos indica que no tiene dinero para pagarnos porque, en la pr¨¢ctica, tiene que destinar todo su presupuesto al asunto del Prestige. No entendemos muy bien esto ¨²ltimo, pues se supone que son las instituciones p¨²blicas las que destinan presupuesto para esto, pero lo aceptamos con la misma paciencia y buena voluntad de siempre¡±.

P¨¦rez, que en la carta alterna la queja con el halago hacia el entonces secretario general del partido, parece lanzar un aviso con el comentario: en la peor de las hip¨®tesis no se trataba de que el PP dedicara dinero al Prestige, sino de que el partido se financiaba con recursos de la Xunta. En esa clase de desv¨ªo consisten algunos de los delitos que se atribuyen a otros dirigentes imputados en el?caso G¨¹rtel en Valencia.

La conexi¨®n de la red con Galicia ven¨ªa de mucho antes. El lugarteniente de Correa, Pablo Crespo, hab¨ªa sido secretario general del PP regional. En otra carta de octubre de ese mismo a?o 2003, escrita por el abogado de Correa, Luis de Miguel, a Manuel Fraga Iribarne, que era presidente de la Xunta de Galicia y del PP regional, el letrado recuerda que llevan ¡°m¨¢s de 10 a?os realizando este trabajo para su organizaci¨®n pol¨ªtica, habiendo sido tambi¨¦n desde 1993 organizador de las campa?as del Partido Popular de Galicia¡±.

El abogado de referencia de la trama desliza una advertencia a Fraga, aunque envuelta en f¨®rmulas de respeto: ¡°Como representante jur¨ªdico de la compa?¨ªa y dadas las caracter¨ªsticas y tipolog¨ªa de esta deuda, recurro a su persona en calidad de presidente del partido en Galicia y a los valores que usted representa como ¨²ltima alternativa amistosa de solucionar este grave asunto¡±.

Tanto El Bigotes como De Miguel se?alan en las cartas que la deuda del PP gallego se hab¨ªa reducido hasta quedar en 150.000 gracias a gestiones previas con Arenas. En el proceso, los miembros de G¨¹rtel apelaron tambi¨¦n al extesorero nacional Luis B¨¢rcenas. E incluso enviaron otra misiva al actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Los miembros de G¨¹rtel recalcan en las cartas que las empresas de su grupo trabajan montando actos del PP a escala nacional. Pero por aquella ¨¦poca las firmas de la red estaba qued¨¢ndose sin trabajo en Madrid, sus relaciones con los populares gallegos se hab¨ªan agriado y empezaban el traslado a Valencia. Fue en esta comunidad donde m¨¢s negocio hicieron en los a?os siguientes. Y donde su relaci¨®n simult¨¢nea con la formaci¨®n pol¨ªtica y con la Generalitat acabar¨ªa con una generaci¨®n de l¨ªderes populares imputados y fuera de la primera l¨ªnea pol¨ªtica.