El letrado de todos los VIP
El abogado Martell, que defiende a Pujol Ferrusola, es experto en pactos para evitar la c¨¢rcel a sus clientes
El bufete de Crist¨®bal Martell no se publicita ni tiene p¨¢gina web. Sin embargo, su cartera de clientes abarca desde el futbolista Leo Messi ¡ªen el caso de su supuesto fraude fiscal¡ª hasta Marco Antonio Tejeiro, el cu?ado de Diego Torres, en el caso N¨®os. Ahora ha asumido tambi¨¦n la defensa de Jordi Pujol Ferrusola, el hijo mayor del expresidente de la Generalitat, que est¨¢ imputado por delitos fiscales y de blanqueo por la Audiencia Nacional, y acaba de renunciar al letrado Javier Melero.
Quienes segu¨ªan el 4 de julio el telediario pudieron hacerse una idea de su actividad en casos con resonancia p¨²blica. Martell apareci¨® tres veces, en tres noticias distintas. Una, en la Audiencia Nacional, en Madrid, con el extesorero del PP ?lvaro Lapuerta, que lo fich¨® para defenderle en el caso G¨¹rtel. Otra, en un v¨ªdeo tomado en Palma de Mallorca, detr¨¢s de los hermanos Miguel y Marco Antonio Tejeiro implicados en el caso N¨®os (en la informaci¨®n se explic¨® el pacto de confesi¨®n del contable, pero no se desvel¨® que el letrado Martell cocin¨® directamente el asunto con el fiscal anticorrupci¨®n Pedro Horrach). Y en la tercera, en segundo plano, en otro asunto de corrupci¨®n, el caso Mercurio en el que asiste en los juzgados de Sabadell al exalcalde Manuel Bustos, del PSC.
Martell es enjuto, barbudo y miope, viste siempre de negro y va armado con una gruesa maleta de cuero de profesor, llena de apuntes y c¨®digos. Sus tres apariciones televisivas de aquel d¨ªa chocan con su hermetismo frente a los medios y un estudiado estilo de discreci¨®n a la antigua usanza. Martell es el penalista de moda, por el peso de sus casos en la actualidad, por su agudeza en los procesos y, en especial, por su trayectoria de ¨¦xito al lograr, en general, rebajas de penas y de las sanciones econ¨®micas a sus reos VIP y a los an¨®nimos que atiende.
Es un especialista en temas complejos. Busca siempre cerrar pactos de conformidad negociando acuerdos con la fiscal¨ªa y con Hacienda. Con Jordi Pujol Ferrusola, su estrategia se conocer¨¢ en el primer interrogatorio del juez Pablo Ruz, previsto para el 15 de septiembre.
El abogado acaba de sellar un pacto de calado, al dirigir la confesi¨®n del contable de la trama de N¨®os, Marco Antonio Tejeiro, en el caso N¨®os, con su colega Daniel P¨¦rez Esqu¨¦, uno de los m¨¢s de 15 letrados de su despacho, situado en un rascacielos de la Diagonal de Barcelona. El juez Jos¨¦ Castro rechaz¨® incluir en el sumario el pacto del arrepentido, que este expresar¨¢ en el juicio.
¡°Martell debe ser hoy el primer penalista de Espa?a por los muchos e importantes asuntos en los que participa y por los acuerdos que alcanza¡±, apunta uno de sus interlocutores habituales en las arduas conversaciones de tira y afloja. ¡°Es duro, fr¨ªo y seductor al mover las piezas¡±, agrega otro. ¡°Estudia un sumario, busca la grieta y abre su estrategia¡±, concreta un seguidor de su trabajo.
La altura jur¨ªdica y la deriva noticiosa de los sumarios en los que est¨¢ personado Martell son las palancas de su actual estrellato como abogado. Canario, de 52 a?os, con tres hijos de dos matrimonios, est¨¢ respaldado t¨¦cnicamente por su mujer, Debora Quintero, coautora de sus an¨¢lisis acad¨¦micos, aunque generalmente en la sombra. Debora es hija del catedr¨¢tico Gonzalo Quintero, redactor de algunas reformas del C¨®digo Penal.
La trayectoria del defensor de los Tejeiro, Messi, Pujol y compa?¨ªa se aquilat¨® hace m¨¢s de dos d¨¦cadas, cuando form¨® t¨¢ndem con su antiguo amigo Francesc Jufresa, cl¨¢sica toga de oro de Barcelona y exjoven compa?ero de viaje de los comunistas de PSUC como ¨¦l.
El d¨²o Jufresa-Martell, hoy separado, defendi¨® al tibur¨®n Javier de la Rosa al estallar sus muy variados esc¨¢ndalos econ¨®micos, que le llevaron a la c¨¢rcel. A?os atr¨¢s Martell defendi¨® en un largo juicio al expresidente del Bar?a y empresario Josep Llu¨ªs N¨²?ez. En nombre de N¨²?ez elabor¨® una querella contra la exl¨ªder de Uni¨® Mallorquina, Maria Antonia Munar, que acab¨® en la c¨¢rcel por la concesi¨®n corrupta de un solar p¨²blico con un soborno de cuatro millones. Martell gui¨® en parte la instrucci¨®n y su acusaci¨®n pes¨® en el juicio.
En su abanico de clientes hay jueces y abogados, como el exjuez penitenciario de Barcelona Jos¨¦ Ram¨®n Manzanares, y tambi¨¦n el exdecano del colegio de Abogados de Barcelona Jaume Alonso Cuevillas. Martell ha estado y est¨¢ en varios de los sonados casos catalanes de corrupci¨®n: Palau, Turismo, Mercurio, Pretoria, y su despacho asiste al exalcalde preso de Torredembarra, Daniel Messegu¨¦ (CIU). Adem¨¢s, defendi¨® al entorno del expresidente de la Generalitat Jos¨¦ Montilla, del PSC.
Bastantes fortunas y potencias financieras personales, implicadas en reclamaciones econ¨®micas y penales por supuestos fraudes a Hacienda, han buscado la ayuda del h¨¢bil y rocoso Martell. Adem¨¢s de Messi, Samuel Etoo y el Barcelona FC (por el caso Neymar) han confiado en ¨¦l. Su norma es anticipar un pago millonario a cuenta, confesar y negociar no ir a la c¨¢rcel.
As¨ª, mediante largas negociaciones con fiscales, abogados del Estado e inspectores tributarios, el penalista busc¨® la raz¨®n y la suerte para los abogados del Bufete Feliu de Palma de Mallorca, especialista en operar a trav¨¦s de para¨ªsos fiscales, seg¨²n las sentencias. Martell dirigi¨® el operativo, en mesas de caf¨¦ y en despachos, para salvar de la c¨¢rcel a cuatro miembros de la familia Feliu, condenados y multados por fraude fiscal, a los que ped¨ªan decenas de a?os de prisi¨®n.
Crist¨®bal Martell es un escudo jur¨ªdico y pactista que busca avenirse con el ministerio p¨²blico. Cooper¨® en solucionar la demanda a una heredera de Chupa Chups, Marta Bernat, o al exdue?o en Espa?a de Burberry?s, Eugenio Mora. Acaba de ser designado defensor de la artista Isabel Mu?oz, una de las hijas del controvertido potentado, ya fallecido, Julio Mu?oz Ramonet, que leg¨® su colecci¨®n de arte a Barcelona pero de la que desaparecieron las mejores obras, decenas de grandes telas. El Ayuntamiento barcelon¨¦s present¨® una denuncia penal, y all¨ª aparece Martell, circunspecto, con su andar en balanceo, su sorna y rictus. Su ret¨®rica es acerada, ir¨®nica y barroca ante los tribunales. Esquem¨¢tica, de formaci¨®n alemana. Las minutas, dep¨®sitos a cuenta y el volumen final de ingresos de esa maquinaria de defensa son la envidia de la competencia.
Con informaci¨®n de Pere R¨ªos y Jes¨²s Garc¨ªa.
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