La `contrarreforma Catal¨¢?

 En el acto de toma de posesi¨®n celebrado en el Palacio de Parcent, en la madrile?a calle de San Bernardo, el nuevo ministro de Justicia, Rafael Catal¨¢, ha aportado retrospectivamente, mira por d¨®nde, los motivos de la ca¨ªda de Alberto Ruiz-Gallard¨®n, que superan con holgura el desencadenante de la crisis que le situ¨® fuera del Gobierno. Es decir: la retirada del proyecto de reforma de la ley del aborto.

Primero, he aqu¨ª los dos asuntos sobre los cuales los labios de Catal¨¢ no pronunciaron palabra: la reforma de la ley del aborto y el proyecto de nueva ley Org¨¢nica del Poder Judicial. Estas eran las dos columnas sobre las que Ruiz-Gallard¨®n hab¨ªa edificado su acci¨®n ministerial.

El flamante ministro destac¨® al enumerar sus objetivos que es necesario que la Justicia funcione para lo que hay que, se entiende, dar un protagonismo a la justicia penal a trav¨¦s de la reforma del ley de Enjuiciamiento Criminal.

Ruiz-Gallard¨®n hered¨® del Gobierno socialista un proyecto de reforma de la ley de Enjuiciamiento Criminal; pero decidi¨® revisar la situaci¨®n.

As¨ª, el consejo de ministros del 2 de marzo de 2012 cre¨® la Comisi¨®n de la Ley de Enjuiciamiento Criminal para elaborar una nueva reforma, y se confi¨® la presidencia de dicha comisi¨®n al magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo Manuel Marchena -que el Pleno del Consejo General del Poder Judicial nombrar¨¢ hoy, con especial recomendaci¨®n del Gobierno de Rajoy, presidente de la Sala Segunda, tras la jubilaci¨®n del magistrado Juan Saavedra -; Marchena entreg¨® su llamado proyecto de C¨®digo Procesal Penal, que deb¨ªa sustituir a la vetusta LECrim del 14 de septiembre de 1882, a primeros de 2013. El Ministerio de Justicia difundi¨® el borrador el 25 de febrero de 2013.

  Pero no conoci¨® otro destino que un caj¨®n.

Catal¨¢ enfatiz¨®, tambi¨¦n, que es menester volver a estudiar para su mejora la ley de tasas judiciales, aprobada contra viento y marea exclusivamente con los votos del Partido Popular en el Congreso de los Diputados y recurrida ante el Tribunal Constitucional. Una ley que unific¨® pr¨¢cticamente a todos los estamentos del mundo judicial contra el Gobierno.

Otros temas que abord¨® Catal¨¢: la mejora de la justicia gratuita, la implantaci¨®n de un sistema ¨¢gil y eficaz en el Registro Civil, una ley de servicios profesionales que respete los derechos profesionales de procuradores y abogados, la dotaci¨®n de plazas de jueces y fiscales para dos generaciones de jueces y fiscales que carecen actualmente de trabajo.

La ¨²ltima iniciativa vendida por Ruiz-Gallard¨®n, a saber, la pretendida reducci¨®n del n¨²mero de jueces y magistrados aforados que deb¨ªa incorporarse al proyecto de ley Org¨¢nica del Poder Judicial tambi¨¦n ha brillado por su ausencia en el discurso del nuevo ministro. Como la apuntada nueva reforma/ajuste de la ley del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) a menos de un a?o de su vigencia.

Este esbozo de contrarreforma sugiere que Catal¨¢ har¨¢ cambios en varios niveles del Ministerio de Justicia, empezando por la secretar¨ªa de Estado de Justicia, cuyo papel en la reforma Gallard¨®n ha sido muy relevante. No parece que Catal¨¢, que ha sido secretario de Estado de Justicia entre 2002 y 2004, bajo el ministro Jos¨¦ Mar¨ªa Michavila, vaya a confirmar a Fernando Rom¨¢n, actual secretario de Estado. 

Precisamente, una de las pistas sobre los inminentes cambios la aport¨® Catal¨¢ al prometer que retomar¨¢ e impulsar¨¢ las reformas pendientes del Ministerio de Justicia "desde el di¨¢logo y el consenso" para buscar un gran acuerdo en materia de Justicia. Catal¨¢ ha reconocido en entrevistas que cuando ¨¦l lleg¨® a la secretar¨ªa de Estado de Justicia en 2002, se encontr¨® hecho el pacto PP-PSOE, lo que le facilit¨® mucho el trabajo.

Sobre Catalu?a, silencio oportuno.

Ni falta que hace. Porque sus palabras de junio de 2014 sobre Catalu?a han sido subrayadas por no pocos dirigentes del PP.

Catal¨¢ hab¨ªa participado el mes de junio pasado, en su calidad de secretario de Estado de Planificaci¨®n e Infraestructuras del Ministerio de Fomento en un acto en el cual el Puerto de Tarragona se presentaba como el cl¨²ster qu¨ªmico del Mediterr¨¢neo en el Sal¨®n Internacional de la Log¨ªstica y la Manutenci¨®n, que en el recinto Montju?c de Fira de Barcelona. Al acto, como se ve en la foto que abre esta p¨¢gina, acudi¨® el president Artur Mas.  

En una entrevista con la revista Asociaci¨®n del Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado, con la cual ha colaborado, se produjo el siguiente di¨¢logo:

 -Se?or Catal¨¢, ?hacia d¨®nde va Catalunya?

 -Bueno, mi apellido, aunque puede ser de origen catal¨¢n, proviene familiarmente de Valencia. No obstante, por mi trabajo, por mis viajes o mis colaboraciones con ESADE [Escuela Superior de Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresas] he tenido contacto con el sentimiento catal¨¢n, de percepci¨®n de una identidad singular propia, con un gran dinamismo cultural y un avanzado grado de autogobierno. Cosa distinta es lo que est¨¢ sucediendo en la pol¨ªtica catalana, de fortalecimiento del independentismo, con posicionamientos individualistas, insolidarios y parciales, que, otorg¨¢ndose unilateralmente una legitimidad ysoberan¨ªa que no les corresponden, pretende imponer a muchos la voluntad de pocos, en una deriva que, obviamente, est¨¢ abocada al fracaso. Yo soy partidario de realizar ajustes de la Constituci¨®n para reconocer la singularidad catalana. Nuestra Constituci¨®n nos ha servido muy bien durante 30 a?os d¨¢ndonos elperiodo de mayor prosperidad de nuestra historia reciente, pero no es inamovible; puede ser reformada para mejorar el encaje de Catalu?a, eso s¨ª, buscando el mayor consenso posible.

?Un Catal¨¢, eso s¨ª valenciano, escogido por su flexibilidad personal en esta y otras materias? ?Es una personalidad a la que Rajoy puede estar tentado de confiar una labor de encauzamiento en la etapa post refer¨¦ndum catal¨¢n del 9/11?

Es un propio de Rajoy, no solo porque ha colaborado directamente en diversos ministerios con el actual presidente del Gobierno. Ha formado parte del llamado por los iniciados grupo de Pontevedra. Catal¨¢ comenz¨® su actividad p¨²blica en el Gobierno Civil, donde conoci¨® a Rajoy como presidente de la Diputaci¨®n. Suele pasar sus vacaciones de verano en Sanxenxo.

No es menos cierto que ha trabajado siete a?os (2005-2012) fuera del ¨¢mbito pol¨ªtico, en la empresa Codere, multinacional espa?ola en el sector del juego privado.

Pero da la impresi¨®n de que Rajoy contaba con Catal¨¢, y solo con Catal¨¢, su candidato exclusivo, por razones de confianza, para sustituir a Ruiz-Gallard¨®n.

NB: Merc¨¨ Pigem i Palm¨¦s, abogada y pol¨ªtica catalana, militante y miembro del Comit¨¦ Nacional de Convergencia Democr¨¢tica de Catalunya (CDC) ex diputada y miembro de la comisi¨®n permanente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) aportar¨¢, seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, su voto al grupo conservador que va a elegir en el Pleno del CGPJ previsto para este martes 30 la elecci¨®n de Manuel Marchena como presidente de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, la sala de lo penal. Al menos esta era la posici¨®n de Mas antes de la decisi¨®n fulminante, ultrarr¨¢pida, del Tribunal Constitucional de suspender el refer¨¦ndum.

En el tema de la presidencia de la Sala Segunda, la CDC de Artur Mas no quiere "l¨ªos" y apoya al PP.

Es interesante matizar que la percepci¨®n de Merc¨¨ Pigem y de CDC y de CiU es muy "sensible". Ella y su partido saben que el Gobierno de Rajoy quiere, por encima de todo, una persona de confianza a la cabeza de la sala m¨¢s importante de la justicia penal espa?ola.

 Y que en ning¨²n momento se ha pretendido siquiera cubrir la apariencia de un debate sobre experiencia, capacidad profesional y curriculum, en la selecci¨®n de las tres candidatos que por orden de antig¨¹edad son C¨¢ndido Conde-Pumpido, actual presidente en funciones de la Sala; Miguel Colmenero y Manuel Marchena.

La elecci¨®n viene sugerida desde arriba.

Mas ha captado el mensaje. Y Merc¨¨ Pigem as¨ª lo demostrar¨¢ en la votaci¨®n del Pleno del CGPJ.