El Supremo indaga una demanda de paternidad contra el rey Juan Carlos
El alto tribunal ha rechazado admitir a tr¨¢mite otra solicitud de supuesta paternidad
El Tribunal Supremo admiti¨® este mi¨¦rcoles a tr¨¢mite la demanda de paternidad presentada contra el rey Juan Carlos por Ingrid Sartiau, una ciudadana belga de 48 a?os que reclama ser reconocida como hija del anterior jefe de Estado. El pleno de la Sala de lo Civil ha decidido admitir la demanda de Sartiau en contra del criterio del fiscal, que consideraba que no hab¨ªa elementos de prueba suficientes. En el mismo pleno, la sala rechaz¨® la otra demanda de paternidad presentada contra Juan Carlos de Borb¨®n, registrada por el espa?ol Albert Sol¨¢ Jim¨¦nez, nacido en Barcelona en 1956.
Para que una demanda de paternidad sea admitida a tr¨¢mite es necesario, seg¨²n el art¨ªculo 767.1 de la Ley de Enjuiciamiento Civil, que exista ¡°un principio de prueba¡± de los hechos en los que se basa. Seg¨²n la fiscal¨ªa, ninguna de las dos demandas de paternidad presentadas contra el Rey cumple estos requisitos. Pero tras analizar la documentaci¨®n adjuntada por Sartiau y Sol¨¢ Jim¨¦nez, los magistrados de la Sala de lo Civil concluyeron que la petici¨®n de la mujer belga s¨ª contiene una prueba que sustenta la admisi¨®n a tr¨¢mite de la demanda.
Esa prueba es, seg¨²n fuentes del caso, un acta notarial firmada por la madre de Sartiau, Liliane Ghrislaine Sartiau, que actualmente tiene 80 a?os, en la que cuenta que mantuvo una breve relaci¨®n con Juan Carlos de Borb¨®n a finales de 1965. Fruto de esa relaci¨®n, seg¨²n el relato de la mujer, naci¨® Ingrid Sartiau en agosto de 1966, un a?o despu¨¦s que la infanta Cristina y tres antes que el rey Felipe VI. Tras conocerse la decisi¨®n, la Casa del Rey ha expresado, este mi¨¦rcoles, su respeto a la ¡°independencia¡± del Poder Judicial. Un portavoz del Palacio de la Zarzuela ha declinado hacer m¨¢s comentarios sobre esta decisi¨®n.
Seg¨²n el abogado de Sartiau, Jaume Pararols, el acta notarial, y sobre todo la posibilidad de que Sartiau y su madre declaren ante el Supremo, ha resultado clave en la resoluci¨®n del tribunal. ¡°Creo que para la admisi¨®n a tr¨¢mite ha sido fundamental el ofrecimiento que hemos hecho de que declaren Ingrid y su madre, que podr¨¢ explicar con detalle todo lo que los magistrados deseen saber sobre c¨®mo fue su relaci¨®n con el Rey¡±, se?ala Pararols. ¡°Junto al acta notarial con un relato de los hechos pormenorizado presentamos como petici¨®n de prueba anticipada estas dos declaraciones. Lo ¨²nico que quiere mi clienta es ver a su padre¡±, sostiene el letrado.
Las dos demandas de paternidad fueron presentadas en 2012 en juzgados ordinarios cuando Juan Carlos I todav¨ªa era jefe de Estado, pero los jueces las rechazaron por la inviolabilidad que reg¨ªa sobre ¨¦l. Tras su abdicaci¨®n en junio pasado, los demandantes las volvieron a presentar y ambas recayeron en el Tribunal Supremo despu¨¦s de que el Parlamento, mediante dos enmiendas en la ley de racionalizaci¨®n del sector p¨²blico y solo con los con los votos del PP, aprobara el aforamiento de don Juan Carlos, las reinas Letizia y Sof¨ªa y la Princesa de Asturias.
Mientras que los diputados o los ministros solo est¨¢n aforados para asuntos penales cuando ocupan el cargo y casos civiles que tengan que ver con su actividad p¨²blica, la norma aprobada para la familia real les otorga aforamiento para asuntos privados. Cuando la ley se aprob¨®, en junio pasado, ya se conoc¨ªan las demandas de paternidad contra el padre de Felipe VI y, por tanto, que ser¨ªa el Supremo el que tendr¨ªa que decidir sobre su admisi¨®n.
Despu¨¦s de que Sartiau llevara su caso a los tribunales, la Casa del Rey le rest¨® importancia al considerar que ten¨ªa escasas posibilidades de prosperar. Sin embargo, los jueces del alto tribunal sostienen que s¨ª re¨²ne los requisitos necesarios para ser admitida. Seg¨²n fuentes del Supremo, el tribunal emplazar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas al rey Juan Carlos para que se persone en la causa. El padre de Felipe VI tendr¨¢ 20 d¨ªas de plazo para contestar. Despu¨¦s, se celebrar¨¢ una vista p¨²blica, que solo se evitar¨ªa si las partes llegan a un acuerdo. La vista puede ser a puerta abierta o cerrada, pero lo habitual en los casos de paternidad es que sea sin p¨²blico.
Si no hay acuerdo entre las partes, el juicio se celebrar¨¢ previsiblemente antes del verano, seg¨²n fuentes del tribunal. Los jueces decidir¨¢n si el rey Juan Carlos debe estar presente y si es necesario que se someta al interrogatorio de la Sala de lo Civil.
Cuando present¨® la demanda, Sartiau ya solicit¨® como prueba anticipada la recogida de una muestra de ADN de don Juan Carlos. La demandante puede reiterar ahora la realizaci¨®n de esta prueba y los jueces tendr¨¢n que decidir si la piden. El Rey podr¨ªa negarse a someterse a ella, pero si la sala tiene otros elementos de prueba, la demanda podr¨ªa prosperar. Don Juan Carlos podr¨ªa tambi¨¦n prestarse voluntariamente a hacer este test para aclarar, sin que se celebre la vista, si es el padre de Sartiau.
Ingrid Sartiau trat¨® ya hace unos a?os de demostrar que el rey Juan Carlos era su padre y tambi¨¦n el de Albert Sol¨¢. Para ello se puso en contacto con un reputado genetista belga, Jean-Jacques Cassiman, y le proporcion¨® an¨¢lisis suyos y de Sol¨¢ que pudieran determinar el parentesco, informa Luc¨ªa Abell¨¢n. "Las primeras muestras arrojaban una probabilidad del 91%, pero m¨¢s tarde recib¨ª una nueva muestra del se?or Sol¨¢ que demostraba que no son hermanos. Ella recibi¨® esa informaci¨®n a finales de 2012, pero no la ha querido comunicar p¨²blicamente", asegura en conversaci¨®n con este diario Cassiman, profesor de la Universidad de Lovaina (KU Leuven).
Este experto argumenta que la primera muestra era "limitada" y ofrec¨ªa un perfil gen¨¦tico con caracter¨ªsticas comunes en Espa?a y "por casualidad" tambi¨¦n Sartiau compart¨ªa esa informaci¨®n. Pero el examen m¨¢s detallado demostr¨®, seg¨²n su criterio, que no hay posibilidad de que sean hermanos.
Tras recibir los resultados, Sartiau envi¨® una carta a la Casa Real en abril de 2013 en la que aseguraba tener "serias pruebas" de que el rey Juan Carlos es su padre. En la misiva, la mujer informa a la Casa del Rey de su desvinculaci¨®n "completa" con Sol¨¢ y niega cualquier relaci¨®n de parentesco con ¨¦l. "Sartiau lamenta haber acudido a la v¨ªa judicial para solventar su filiaci¨®n paterna y se vio presionada por Sol¨¢ y por los medios", expone la mujer en su carta, recogida en el informe del fiscal sobre su demanda.
Dos peticiones paralelas con distinto final
Primera demanda. Albert Sol¨¢ Jim¨¦nez e Ingrid Sartiau presentaron una demanda de paternidad contra el rey en octubre de 2012. Ambos se hab¨ªan conocido unos meses antes, cuando Sartiau, de nacionalidad belga, contact¨® con Sol¨¢ tras leer en Internet que, al igual que ella, reclamaba ser hijos de don Juan Carlos. Sol¨¢ defiende que don Juan Carlos mantuvo una relaci¨®n con su madre biol¨®gica, Anna Mar¨ªa Bach Ramon, antes de ser proclamado jefe del Estado. Sol¨¢, nacido en Barcelona en 1956, fue criado en una familia adoptiva. Ingrid Sartiau, sostiene que es fruto de una relaci¨®n entre su madre y el padre de Felipe VI en 1965. Un juzgado de Madrid archiv¨® ambos casos por la inviolabilidad que la Constituci¨®n otorgaba al jefe de Estado.
P¨¦rdida de inviolabilidad de don Juan Carlos. Los demandantes recurrieron el archivo ante la Audiencia Provincial de Madrid. Cuando el rey perdi¨® su inviolabilidad tras abdicar, los demandantes ampliaron sus demandas y la aprobaci¨®n de la ley que regula el aforamiento de don Juan Carlos hizo que la causa se elevara al Supremo.
Decisi¨®n del Supremo. La Fiscal¨ªa del alto tribunal solicit¨® que no se admitieran a tr¨¢mite las demandas de paternidad al entender que no existe "principio de prueba suficiente". Pero la Sala de lo Civil consider¨® ayer que la petici¨®n de Sartiau s¨ª cumple los requisitos que exige la ley para admitir las demandas de paternidad.
Acta notarial. La prueba que ha admitido el Supremo es un acta notarial en el que la madre de la demandante, Liliane Ghrislaine Sartiau, que hoy tiene 80 a?os, declara que en 1965 mantuvo una relaci¨®n de tres d¨ªas con "un hombre de 31 a?os gentil, guapo, dulce y con los ojos azules". Seg¨²n su versi¨®n, ella no supo que era el Pr¨ªncipe de Espa?a hasta que se lo dijo el conserje del hotel en el que se alojaban. La mujer revel¨® a su hija la identidad del padre despu¨¦s de que Ingrid Sartiau criticara el viaje de don Juan Carlos a Botsuana.
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