¡°Hay que crear centros dignos para inmigrantes en pa¨ªses como Libia¡±

A punto de iniciar un viaje a India, el ministro de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo y Marfil (Madrid, 1944), advierte a Venezuela contra la tentaci¨®n de hacer pagar a las empresas espa?olas la crisis entre los dos gobiernos y aboga por construir centros de acogida ¡°dignos¡± en pa¨ªses como Libia para los inmigrantes que intentan cruzar el Mediterr¨¢neo.

Pregunta. Usted ha aguantado muchos exabruptos de las autoridades venezolanas sin contestar ?Por qu¨¦ ha llamado ahora a consultas al embajador?

Respuesta. Esta vez han sido objeto de los exabruptos el Congreso, dos expresidentes (Aznar y Gonz¨¢lez) y el Gobierno en su conjunto. Todo en la vida tiene un l¨ªmite y cuando ha sido sobrepasado he decidido actuar.

P. Espa?a tiene una vulnerabilidad en Venezuela, que son sus empresas. Maduro ha amenazado con tomar represalias. ?Teme alguna expropiaci¨®n?

Ser¨ªa il¨®gico que se expropiaran empresas por diferencias pol¨ªticas

R. Conf¨ªo en que Venezuela respete la legalidad internacional porque no ser¨ªa l¨®gico que por unas diferencias pol¨ªticas se expropie a una empresa privada. Las empresas espa?olas est¨¢n haciendo un magn¨ªfico trabajo all¨ª y una expropiaci¨®n perjudicar¨ªa al pueblo venezolano.

P. ?Qu¨¦ har¨¢ si se niega la entrada en el pa¨ªs a Felipe Gonz¨¢lez, que ir¨¢ en mayo para defender a los presos pol¨ªticos?

R. El Gobierno de Caracas sabe que Felipe Gonz¨¢lez tiene un enorme prestigio, sobre todo en Sudam¨¦rica. Ser¨ªa un tiro en el pie a la imagen de Venezuela. Espero que no se produzca.

P. En los ¨²ltimos d¨ªas se ha reunido con los cancilleres de Brasil y de Ecuador. ?Les ha pedido que medien ante Venezuela?

Si Venezuela no deja entrar a Felipe Gonz¨¢lez se dar¨ªa un tiro en el pie

R. Siendo pa¨ªses amigos, les he explicado lo que ha sucedido. Les he subrayado que si hemos pecado de algo es de excesiva prudencia. Dif¨ªcilmente se nos puede achacar este empeoramiento de las relaciones, que de momento es puramente verbal y espero que no pase de ah¨ª.

P. ?Fue oportuno que el Congreso pidiera la liberaci¨®n de los presos pol¨ªticos en Venezuela?

R. Espa?a ha sido siempre muy beligerante en la defensa de los derechos humanos. El Congreso, que es independiente del Gobierno, aprob¨® esa resoluci¨®n y no tengo nada que decir.

P. Pero el Congreso no ha condenado el genocidio armenio.

No soy quien para juzgar al embajador Trillo. Dejemos que trabaje el fiscal

R. Para bien y para mal nuestras relaciones con la Comunidad Iberoamericana no son comparables a otras. Lo que pasa all¨ª importa a los espa?oles mucho m¨¢s que en cualquier otro lugar del mundo, y a la inversa.

P. ?Tendr¨¢ el apoyo de la UE ante las represalias de Caracas?

R. No tengo la menor duda. Sobre todo, si son como usted sugiere. Nadie entender¨ªa que una empresa pagase el pato de unas malas relaciones pol¨ªticas. En un arbitraje internacional ser¨ªa muy dif¨ªcil explicarlo.

P. La UE ha acelerado las negociaciones con Cuba tras el deshielo entre Obama y Castro. ?No se ha quedado Espa?a atr¨¢s?

R. Niego la mayor. La UE no ha ido a remolque de la Administraci¨®n Obama. Al contrario. En noviembre de 2012 ya le dimos un mandato a la Alta Representante para explorar un acuerdo con Cuba. Y Espa?a fue determinante para que fuera as¨ª.

P. El presidente Hollande ha anunciado una visita oficial a Cuba, lo que Rajoy no ha hecho y el rey Juan Carlos no pudo hacer.

R. No es igual la visita de un presidente franc¨¦s a Cuba que la del jefe del Gobierno espa?ol o el Rey.

P. Espa?a es uno de los pocos pa¨ªses que no ha concretado su contribuci¨®n a la misi¨®n de Frontex (agencia europea de fronteras) en el Mediterr¨¢neo.

R. Los acontecimientos se han precipitado. Vamos a esperar a que la Comisi¨®n ponga encima de la mesa los mimbres de lo que quiere hacer. Espa?a ha planteado desde el principio que la inmigraci¨®n es un tema capital para la UE y no un asunto nacional. Es un fen¨®meno muy complejo que requiere actuar en m¨²ltiples frentes: Frontex, acuerdos de readmisi¨®n, programas de cooperaci¨®n...

P. ?Ayudar¨ªa hundir los barcos de las mafias de inmigrantes?

R. Sin duda, si usted destruye los barcos de las mafias dificulta su funcionamiento. Pero eso requiere una base jur¨ªdica. Para actuar en aguas libias hace falta una resoluci¨®n del Consejo de Seguridad de la ONU, en la que estamos trabajando, la petici¨®n de un Gobierno de unidad nacional, que no existe, o la aquiescencia del Gobierno de Tobruk, reconocido internacionalmente. Lo que no podemos es no hacer nada y ver c¨®mo cada semana se ahogan 900 personas en el Mediterr¨¢neo.

P. Frontex no es una operaci¨®n de salvamento, sino de vigilancia. No ser¨ªa dif¨ªcil rescatarles si Europa se pusiera de acuerdo en d¨®nde desembarcarlos. Cameron ofrece barcos, pero rechaza acoger inmigrantes...

R. Lo urgente es impedir que se repitan tragedias como las que hemos visto. Pero adem¨¢s de rescatarlos, para no crear problemas a?adidos, hay que crear centros de acogida dignos en los pa¨ªses de origen y tr¨¢nsito, como Libia. Eso cuesta dinero y Europa tendr¨¢ que poner los medios.

P. Un campo para inmigrantes en Libia ?no ser¨ªa contrario a los derechos humanos?

R. Depende de las condiciones. A nadie se le ocurre decir que el campo de refugiados sirios en Jordania atenta contra los derechos humanos... Lo que s¨ª atenta es dejarlos que se ahoguen.

P. No parece que Libia sea un lugar seguro. ?Hay que dar un ultim¨¢tum a las facciones para que lleguen a un acuerdo?

R. Bernardino Le¨®n [enviado especial de la ONU] sabe que tiene un tiempo limitado. En este momento parece que ese acuerdo est¨¢ tomando forma. Espero que salga bien. Si no, la comunidad internacional no puede seguir actuando como si fuera San Marino... No podemos permitir que Libia se convierta en otra Siria.

P. Espa?a ha sido cicatera a la hora de acoger asilados.

R. En cuatro o cinco a?os acogimos a cuatro millones de inmigrantes. Cuando lleg¨® la crisis, nos encontramos en condiciones muy dif¨ªciles y eso limit¨® nuestra capacidad de absorci¨®n.

P. ?Ha hablado con el embajador Trillo de sus cobros de una empresa cuando era diputado?

R. Varias veces. Me ha explicado que no hay ninguna irregularidad, que esos ingresos han sido declarados a Hacienda, y estaban en el marco de la ley de incompatibilidades. No tengo ninguna raz¨®n para no creerle.

P. La Agencia Tributaria y la fiscal¨ªa parece que no le creen...

R. Dejemos que hagan su trabajo y cuando lleguen a una conclusi¨®n ya veremos. No me corresponde a m¨ª juzgarle.

P. ?Cu¨¢nto da?o ha hecho a la Marca Espa?a la foto del exvicepresidente Rato detenido?

R. Es obvio que eso no favorece a la Marca Espa?a, pero demuestra que las instituciones funcionan. Dicho eso, probablemente hubo un exceso de publicidad. La ley de Enjuiciamiento Criminal dice que la detenci¨®n debe realizarse en las condiciones m¨¢s favorables para el detenido.