La izquierda quiere recuperar la ecotasa en Baleares

Los pactos entre distintas fuerzas de izquierdas para desbancar al PP del Gobierno de Baleares podr¨ªan traer de vuelta la ecotasa (un gravamen a los turistas sobre las estancias hoteleras) a las islas. Los posibles socios del PSOE, el partido econacionalista M?S y Podemos, quieren volver a aplicar esa medida ambientalista que los socialistas crearon entre 2002 y 2003 ¡ªcobrando una media de un euro por noche y persona¡ª pero que ahora son renuentes a recuperar. El sector hotelero se opone frontalmente a la reinstauraci¨®n de la ecotasa.

Entre mayo de 2002 y octubre de 2003, por iniciativa del Gobierno auton¨®mico multipartito que presid¨ªa entonces el socialista Francesc Antich, en Baleares se cobr¨® un euro de media, por persona y noche de estancia, a los viajeros hospedados en alojamientos tur¨ªsticos. El Gobierno del PP de Jaume Matas derog¨® esa pionera ley balear de la ecotasa tras ganar con mayor¨ªa absoluta en 2003. Actu¨® un frente com¨²n entre los hoteleros, los operadores internacionales y el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, que hab¨ªa recurrido la norma de 2001. El Tribunal Constitucional suspendi¨® la ley, pero posteriormente aval¨® la ecotasa.

Baleares (que tiene 1,1 millones de habitantes y recibe unos 13 millones de visitantes al a?o) tiene parajes naturales en propiedad y edificios monumentales que adquiri¨® con los fondos recaudados y los cr¨¦ditos generados por la ef¨ªmera ecotasa. Se aplic¨® a unos diez millones de turistas hoteleros. El dinero total recaudado en aquellos dos a?os super¨® los 80 millones de euros, aunque la Administraci¨®n tuvo que lidiar con los recursos planteados por muchos establecimientos que ten¨ªan que hacer de recaudadores.

Un tributo semejante podr¨ªa ser aplicado ahora, de nuevo, a los turistas de las islas ¡ªaunque con una f¨®rmula legal y financiera distinta¡ª si se consuma el pacto gubernamental de la izquierda tras el fiasco electoral del PP balear (que gan¨® las elecciones pero perdi¨® la mayor¨ªa absoluta). Podemos y M?S por Mallorca y Menorca reclaman que esa medida est¨¦ en el programa de gobierno que negocian con el PSOE. Pero los socialistas ¡ªv¨ªctimas de las diatribas empresariales y pol¨ªticas por la primera ecotasa¡ª son cautos sobre la prioridad de esta innovaci¨®n tributaria para turistas.

Entre 2007 y 2011, cuando volvi¨® a gobernar en Baleares, el PSOE ya no reimplant¨® la medida. En 2014 no la incluy¨® en su programa, aunque subray¨® que, si no se mejoraba la financiaci¨®n auton¨®mica, deber¨ªa recuperar la ecotasa. Ahora son M?S y Podemos quienes se la reclaman, y con urgencia: defienden que en enero de 2016 la nueva ley est¨¦ en vigor para poder aplicar el cobro en la temporada alta, entre mayo y octubre. Quieren que se grave tambi¨¦n el alquiler tur¨ªstico, no solo a los turistas hoteleros; a cambio, proponen rebajar la carga de la tasa en temporada baja y que no se cobre a los menores de edad (como en Barcelona), seg¨²n el diputado de M?S David Abril.

Las dudas del PSOE

M?S (que ha conseguido nueve diputados) habla de una ¡°tasa tur¨ªstica de reinversi¨®n¡±, mientras Podemos (10 esca?os) defiende una ¡°tasa ambiental de innovaci¨®n¡±. A esos planteamientos tendr¨¢ que responder la socialista Francina Armengol, que aspira con 14 diputados a presidir el Gobierno balear. El PP obtuvo 20 diputados, pero no tiene mayor¨ªa suficiente para gobernar, ni siquiera con el apoyo de Ciudadanos.

Armengol no se opone frontalmente al rescate de la f¨®rmula de la ecotasa, y recuerda que ya existe en muchos pa¨ªses europeos y en ciudades como Barcelona. Pero los socialistas quieren que, si se consuma el nuevo Gobierno de izquierdas, las primeras decisiones sean medidas de calado social, a favor de la creaci¨®n de empleo y contra la pobreza. Armengol apuesta por hallar una f¨®rmula -no vetada por la UE- para poder recaudar la tasa a todos los usuarios veraneantes externos. No ve factible, sin embargo, abrir taquillas en los puertos y aeropuertos, como plantea Podemos. Las pol¨¦micas de 2002 hicieron que la ecotasa solo se cobrara a los hu¨¦spedes de hoteles; se convirti¨® as¨ª a los empresarios en recaudadores, mientras que el pago era eludido por una masa de veraneantes no hosteleros, como los que se alojaban en casas de alquiler de lujo en la costa o los navegantes en barcos privados amarrados en los puertos.

La ecotasa intranquiliza a los hoteleros, un lobby fiel al PP y beligerante pol¨ªticamente. Durante la campa?a electoral, la federaci¨®n de hosteler¨ªa public¨® en los peri¨®dicos locales encartes a favor de la pol¨ªtica del PP y reivindicando el papel del turismo. En sesiones p¨²blicas y privadas las patronales han sido recelosas. No obstante, la l¨ªder patronal CAEB, Carmen Planas, asegur¨® que un pacto de izquierdas tambi¨¦n pod¨ªa dar la estabilidad como el PP."No es la pluma de los grandes hoteleros la que ha dictar las leyes, sino los bol¨ªgrafos de los ciudadanos", dijo en campa?a Alberto Jarabo, candidato de Podemos.