¡°La gesti¨®n privada ha sido una sangr¨ªa para la sanidad valenciana¡±

La Comunidad Valenciana ha sido durante a?os el laboratorio de la privatizaci¨®n sanitaria del Partido Popular. All¨ª naci¨®, en 1999, el conocido modelo Alzira, una f¨®rmula que consiste en ceder la gesti¨®n integral de un hospital p¨²blico, o de un departamento de salud entero, a una empresa privada. All¨ª creci¨® poco a poco la entrega progresiva de la gesti¨®n a terceros, que se reprodujo en Madrid con Esperanza Aguirre. Un modelo que ahora, con la llegada de la izquierda a la Comunidad Valenciana, puede tener los d¨ªas contados. Con ese objetivo llega al cargo de consejera de Sanidad Carmen Mont¨®n (Burjassot, 1976). ¡°Vamos a retornar la sanidad a lo p¨²blico¡±, repite varias veces durante la entrevista.

Su primera medida al frente del departamento que maneja un tercio del presupuesto valenciano ha sido devolver la sanidad p¨²blica a los inmigrantes en situaci¨®n irregular. Desaf¨ªa as¨ª un real decreto del Gobierno de Mariano Rajoy, que en 2012 rompi¨® la universalidad de la asistencia. ¡°Esta es la consejer¨ªa de sanidad universal y salud p¨²blica, que es m¨¢s que un nombre: es una declaraci¨®n de intenciones. El decreto de Rajoy dej¨® en la exclusi¨®n social al colectivo de inmigrantes sin regularizar, y eso a nosotros nos parece una indecencia¡±, afirma Mont¨®n. Desde ayer, unas 30.000 personas que la hab¨ªan perdido pueden empezar a tramitar su tarjeta sanitaria. ¡°Tendr¨¢n los mismos derechos, sin distinci¨®n¡±. ?Sin requisitos? ¡°Que lleven empadronados tres meses¡±.

Tras 20 a?os de gobierno del PP, la gesti¨®n de la sanidad del 20% de la poblaci¨®n valenciana est¨¢ actualmente en manos privadas, concesiones que est¨¢n en el punto de mira del equipo de Mont¨®n. ¡°No se las controlaba en absoluto y se han dado casos de puerta giratoria de libro¡±, dice en referencia a un comisionado, el encargado por el Gobierno de supervisar las concesiones, que pas¨® a estar en n¨®mina de la empresa a la que vigilaba. ¡°La gesti¨®n privada ha sido una sangr¨ªa econ¨®mica para la sanidad valenciana¡±, a?ade. A¨²n no hay cifras --"llevo dos semanas en el cargo", se excusa--, pero Mont¨®n cita el esc¨¢ndalo de la privatizaci¨®n de las resonancias magn¨¦ticas que destap¨® el tribunal de cuentas auton¨®mico en 2013. ¡°Ese informe asegura que la gesti¨®n privada de las resonancias supone un sobrecoste de 17 millones cada a?o. Es insostenible y no lo vamos a tolerar¡±, subraya.

Su equipo est¨¢ empezando a abrir cajones: ¡°Hemos encontrado facturas de hasta 2.000 euros por atender a ni?os¡±, se?ala. ¡°A personas exentas de pago se les ha estado facturando. Tenemos que encontrar una soluci¨®n legal, porque no compartimos la idea del PP de que la salud es un negocio¡±. ¡°Haremos una auditor¨ªa de c¨®mo est¨¢n las concesiones, del nivel de cumplimiento de los contratos¡±, anuncia. ¡°Y hemos creado una direcci¨®n general de alta inspecci¨®n que las va a controlar¡±, precisa. ¡°La presunci¨®n de que lo privado es m¨¢s eficiente es, al menos cuestionable¡±, dice la consejera. A la pregunta de si se podr¨ªan revertir las concesiones antes de que acabe el contrato, responde: ¡°Lo primero es exigirles mayor control, despu¨¦s veremos. Si no cumplen, quiz¨¢ haya una manera de que ellos mismos renuncien¡±.

Frente com¨²n

Unos d¨ªas despu¨¦s de que Valencia anunciara que devuelve la asistencia a los inmigrantes, Baleares acaba de dar el mismo paso. Los consejeros socialistas han pasado de ser minor¨ªa absoluta en el consejo interterritorial ¡ªdonde comunidades y ministerio acuerdan las decisiones clave para la sanidad¡ª a ser ocho. Y lo van a aprovechar, asegura Mont¨®n. ¡°Vamos a hacer frente com¨²n para exigir a Alfonso Alonso [ministro de Sanidad] que derogue el decreto de exclusi¨®n sanitaria y volvamos a la situaci¨®n anterior a 2012. Nunca debi¨® ponerse en funcionamiento¡±.

Con las fuerzas en Sanidad m¨¢s igualadas, Mont¨®n anuncia otro reto al Gobierno: ¡°Nuestro compromiso era devolver derechos arrebatados, y eso incluye eliminar el copago farmac¨¦utico, especialmente injusto, a los pensionistas con rentas inferiores a 1.000 euros¡±. Y todo ello, ?c¨®mo se va a pagar? Mont¨®n critica la ¡°financiaci¨®n injusta e insuficiente¡±, y asegura: ¡°Podemos priorizar, frenar la p¨¦rdida de dinero y hacer una gesti¨®n m¨¢s eficiente¡±.