Una de cada cinco j¨®venes espa?olas no utiliza ning¨²n anticonceptivo

Ni siquiera preservativos. A pesar del riesgo de contraer una enfermedad de transmisi¨®n sexual o tener un embarazo no deseado, una de cada cinco millennials espa?olas ¡ªj¨®venes de entre 18 y 30 a?os que nacieron entre los ochenta y noventa¡ª no usa ning¨²n m¨¦todo anticonceptivo, seg¨²n un estudio de Bayer. La multinacional farmac¨¦utica ha encuestado a un millar de mujeres de todas las comunidades aut¨®nomas. Los resultados muestran que, a pesar de tener acceso a m¨¢s informaci¨®n que nunca, algunos mitos a¨²n perviven entre las j¨®venes, por ejemplo, que durante la menstruaci¨®n es imposible embarazarse, que solo las mujeres con hijos pueden usar un dispositivo intrauterino o que la "marcha atr¨¢s" es eficaz.

Tres de cada cuatro participantes de la encuesta, titulada Mitos y Realidades de sexualidad y anticoncepci¨®n en las millennials espa?olas, eran solteras. De ellas, la mitad ten¨ªan estudios superiores y el 29,9% eran tituladas en formaci¨®n profesional o ten¨ªan el bachillerato. "Son mujeres modernas que, sin embargo, siguen arrastrando viejos mitos de sus madres y abuelas", ha explicado la responsable de Comunicaci¨®n de Bayer, Carlota G¨®mez, a la agencia Europa Press.

Aunque las j¨®venes se consideran bien informadas, el estudio se?ala que cuatro de cada 10 encuestadas no recuerdan cu¨¢l fue su fuente de informaci¨®n y que el 20% reconoce que acude a Internet o las redes sociales antes que a su m¨¦dico para ampliar su conocimiento sobre temas de salud sexual. Una de cada 10 acude a los amigos, una cifra similar a la de las millennials del resto de Europa.

Parte de la explicaci¨®n est¨¢ en que tres de cada 10 mujeres (31,4%) reconoce alg¨²n tipo de incomodidad para hablar del tema de la anticoncepci¨®n con su m¨¦dico. La media en Europa est¨¢ en el 22%. En consecuencia, muchas j¨®venes espa?olas no recurren a una fuente profesional de informaci¨®n sobre las m¨¢s de 15 opciones anticonceptivas disponibles en la actualidad, lo que les resta posibilidades de tomar una decisi¨®n informada en este ¨¢mbito.

El 20% de las encuestadas afirma no utilizar ning¨²n anticonceptivo, un resultado que est¨¢ en la l¨ªnea de otros estudios de la farmac¨¦utica. Uno de 2009, por ejemplo, se?alaba que los j¨®venes espa?oles de entre 15 y 24 a?os eran los que m¨¢s usaban el preservativo de toda Europa, pero, al mismo tiempo, el 30% reconoc¨ªa que no lo usaba siempre por lo imprevisto de las relaciones (de juerga por la noche, con alcohol de por medio) o por la euforia del momento.

Mitos que perviven

En relaci¨®n con el conocimiento de los m¨¦todos anticonceptivos, cada encuestada en el reciente estudio de Bayer reconoce un promedio de 11. Los m¨¢s populares son la p¨ªldora y el preservativo masculino, conocidos por nueve de cada 10 encuestadas, seguidos del anillo vaginal (84%). El grado de conocimiento de cada uno de estos m¨¦todos se corresponde con aquellos de los que el m¨¦dico m¨¢s les ha hablado, seg¨²n reconocen las encuestadas. El 71% conoce los anticonceptivos a largo plazo, como el dispositivo intrauterino o DIU hormonal.

Como ejemplo de las creencias erradas que a¨²n existen, los autores del estudio se?alan el hecho de que una de cada 10 millennials considere que no puede quedarse embarazada mientras est¨¢ menstruando, una cifra similar a la encontrada en otros 11 pa¨ªses europeos y Canad¨¢, en los que se ha centrado la investigaci¨®n. Pero un riesgo a¨²n mayor de embarazos no deseados entra?a la falsa percepci¨®n de que "la marcha atr¨¢s" es un m¨¦todo anticonceptivo eficaz, creencia que da por buena un 3,3% de las j¨®venes.

Los mitos rodean tambi¨¦n a los anticonceptivos a largo plazo (DIU hormonal, DIU de cobre e implante). A pesar de la informaci¨®n que pueden recibir de sus m¨¦dicos, las millennials muestran desconocimiento en cuanto al procedimiento r¨¢pido y sencillo de colocaci¨®n de un peque?o dispositivo, que puede utilizarse en mujeres que a¨²n no han tenido hijos (algunas creen que esto no es posible) y que no modifica su anatom¨ªa. Las mujeres j¨®venes del resto de Europa tienen percepciones similares en este sentido.