Las universidades, motor para el crecimiento

Ahora que se debaten programas pol¨ªticos para conseguir mejores condiciones de vida en nuestro pa¨ªs, las universidades espa?olas queremos trasladar a la opini¨®n p¨²blica algunas ideas que permitan aumentar su calidad al servicio de la ciudadan¨ªa. Pensamos, como premisa b¨¢sica, en la necesidad de una mayor autonom¨ªa para nuestras instituciones que permita aplicar las pol¨ªticas estatales y auton¨®micas con la flexibilidad suficiente para conseguir avanzar con mayor rapidez hacia la excelencia. Pero estamos tambi¨¦n convencidos de que una mayor autonom¨ªa universitaria, debe ir acompa?ada igualmente por una mejor financiaci¨®n que alcance los niveles de los pa¨ªses europeos m¨¢s avanzados y por asegurar unas plantillas de profesorado adecuadas.

Debemos garantizar la igualdad de oportunidades en el acceso y la permanencia en la universidad de todos los ciudadanos que deseen cursar estudios superiores. Ello significa m¨¢s dotaci¨®n en becas y ayudas al estudio para todos los estudiantes que lo precisen o merezcan, ayudas que en estos momentos son una tercera parte de la media de los pa¨ªses de la OCDE.

La investigaci¨®n que se hace en el sistema universitario espa?ol representa m¨¢s del 60% de la producci¨®n cient¨ªfica de nuestro pa¨ªs. A pesar de los escasos recursos que se destinan a estos fines, los universitarios hemos demostrado nuestro compromiso con la generaci¨®n del conocimiento. Espa?a ocupa hoy la d¨¦cima posici¨®n mundial en producci¨®n cient¨ªfica. Todas las autoridades piensan que la investigaci¨®n y su transferencia a la sociedad es el mejor camino para salir de la crisis y generar puestos de trabajo y riqueza. Parad¨®jicamente, en nuestro pa¨ªs, la primera partida en la que se recorta es en este cap¨ªtulo. As¨ª, la espiral de menos investigaci¨®n, menos transferencia, menos crecimiento basado en el conocimiento, est¨¢ servida.

Avanzar por la v¨ªa de la transferencia es fundamental para el cambio del tejido productivo y la generaci¨®n de empleo que tanto precisamos en Espa?a. Las universidades y las empresas debemos aumentar nuestra colaboraci¨®n en la formaci¨®n de emprendedores. Datos recientes demuestran que en Espa?a los universitarios son buenos emprendedores y que las empresas que generan son m¨¢s internacionales y facturan m¨¢s.

Debemos seguir incrementando la internacionalizaci¨®n de nuestras universidades. Es necesario continuar la negociaci¨®n con las Administraciones para simplificar los procesos que permitan venir a Espa?a a m¨¢s universitarios de todo el mundo. En este sentido, debemos promover, entre otras acciones, m¨¢s alianzas estrat¨¦gicas con otros sistemas universitarios, dise?ar m¨¢s m¨¢steres, doctorados y programas internacionales y establecer una estrategia con las embajadas espa?olas.

Hasta ahora, en Espa?a no ha habido una pol¨ªtica de Estado consensuada para apostar por un sistema educativo universitario y por una investigaci¨®n que fuera referencia internacional. Es necesario concienciar a la sociedad y a las fuerzas pol¨ªticas de la importancia de aumentar la calidad de nuestras universidades y de la trascendencia que este hecho tiene para el progreso de nuestro pa¨ªs. Por todo lo anterior, necesitamos que la Universidad se vea por parte de los Gobiernos como una inversi¨®n imprescindible y no como un gasto.

Segundo P¨ªriz Dur¨¢n es presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Espa?olas.