Rajoy plantear¨¢ hoy al PSOE reformar la Constituci¨®n y presidir el Congreso
Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa desmiente ¡°tajantemente¡± esta informaci¨®n
Mariano Rajoy quiere volver a ser presidente del Gobierno. Sabe que no le basta con la abstenci¨®n o el apoyo de Ciudadanos y est¨¢ dispuesto a ofrecer a Pedro S¨¢nchez en la reuni¨®n que ambos mantendr¨¢n este mi¨¦rcoles en La Moncloa cesiones incluso para reformar la Constituci¨®n a cambio de una abstenci¨®n del PSOE en su investidura. Entre estos gestos, ausentes del programa del PP, figurar¨ªan la presidencia del Congreso o modificar el art¨ªculo 135 de la Ley Fundamental para blindar el Estado de bienestar. La vicepresidenta, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, desminti¨®? ¡°tajantemente¡± esta informaci¨®n.
El presidente del Gobierno en funciones no ha esperado a que pase la Navidad para mantener su primer contacto personal con el l¨ªder socialista, Pedro S¨¢nchez, tras las elecciones y ¡°sondear su disposici¨®n¡± a permitir su investidura. Este mi¨¦rcoles no habr¨¢ Consejo de Ministros y el Ejecutivo tiene vacaciones hasta el fin de semana. La semana entrante, posiblemente el martes, se reunir¨¢ el Consejo y antes Rajoy ya habr¨¢ conversado tambi¨¦n con el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, para conocer sus intenciones.
El l¨ªder del PP ha asumido que el 20-D ha cambiado de ra¨ªz la situaci¨®n pol¨ªtica en Espa?a, la manera de funcionar que ha impuesto hasta ahora el bipartidismo y se encuentra ¡°muy preocupado¡± con la imagen de inestabilidad que se pueda proyectar en el mundo, en los mercados y en Europa de una Espa?a sin Gobierno y sin expectativas de formarlo en los pr¨®ximos dos o tres meses. Ese es el calendario que inquieta a Rajoy y al PP.
Las cuatro grandes ofertas que plantea Rajoy a Pedro S¨¢nchez
Presidencia de Congreso y Senado
Aceptar que se abra la ponencia constitucional
Volver a discutir el art¨ªculo 135
Negociar los impuestos sin arriesgar el d¨¦ficit
Estas son las ofertas que pretende plantear Mariano Rajoy a Pedro S¨¢nchez para intentar conseguir que los socialistas se abstengan y faciliten la investidura del l¨ªder del PP como nuevo presidente del Gobierno.
El primer acuerdo de la legislatura ser¨¢ la elecci¨®n de los cargos institucionales del Congreso y el Senado, es decir, la Presidencia de las c¨¢maras y las Mesas. Se eligen en la primera sesi¨®n, la del 13 de enero, con votaci¨®n secreta por llamamiento. La Presidencia siempre ha sido del partido m¨¢s votado y, en ocasiones, con el voto de todos los partidos. En teor¨ªa, si todos los dem¨¢s se pusieran de acuerdo podr¨ªan imponer al PP un presidente. Los otros nueve miembros de la Mesa suelen ser elegidos con proporcionalidad. Su misi¨®n es fundamental primero durante la legislatura para la creaci¨®n de grupos y despu¨¦s para controlar el funcionamiento de las C¨¢maras y califica o tramitar las iniciativas.
En el PP tambi¨¦n manejan, desde hace tiempo, sus ideas para una futura reforma de la Constituci¨®n de 1978 y si no las han incluido ahora era porque defienden que no existe el consenso suficiente y similar al que se fragu¨® en la transici¨®n. Al margen de la eliminaci¨®n de la prevalencia del var¨®n en la sucesi¨®n de la corona, el PP ha propuesto en el tiempo otras modificaciones de la Carta Magna como la reforma del Senado, poner un l¨ªmite de competencias uniforme a las autonom¨ªas, incluir alguna menci¨®n a la Uni¨®n Europea en el texto que no se meti¨® en origen, integrar los nombres tambi¨¦n de las comunidades aut¨®nomas y hasta derogar la disposici¨®n adicional sobre una futurible anexi¨®n de Navarra al Pa¨ªs Vasco.
Una de las l¨ªneas rojas que Mariano Rajoy jam¨¢s se habr¨ªa imaginado traspasar es su mantra del d¨¦ficit cero y el objetivo de estabilidad que marca la Uni¨®n Europea. A todos los l¨ªderes europeos les ha prometido que Espa?a cumplir¨¢ sus acuerdos y sostiene que es importante ser fiables. Pero Pedro S¨¢nchez ha aclarado que si llegaba a ser presidente no eliminar¨ªa ese art¨ªculo pero lo ¡°complementar¨ªa¡± tras debatir el asunto en la ponencia econ¨®mica que coordinaba Jordi Sevilla. Su idea ser¨ªa retocarlo para respetar la prioridad del pago de la deuda ¡°siempre y cuando quedaran atendidos los servicios p¨²blicos b¨¢sicos¡± sobre todo en sanidad, educaci¨®n y servicios sociales con la atenci¨®n a la dependencia.
El equipo que rodea a Mariano Rajoy defiende que est¨¢ dispuesto a hablar con Pedro S¨¢nchez sobre impuestos y a relacionarlos con los servicios sociales. ¡°Ahora se puede, hay margen y debe haber m¨¢s cintura¡±, aventuran diversos miembros de la Junta Directiva y diputados del PP. El l¨ªmite es no poner en riesgo el cumplimiento del objetivo de d¨¦ficit que marca la Uni¨®n Europea y que estaba fijado en el 4,2 para 2015 y el 2,8 en 2016. Bruselas ya advirti¨® a Espa?a recientemente de que estaba por el mal camino. Rajoy prometi¨® en campa?a una bajada de dos puntos del IRPF que S¨¢nchez no respalda y este quiere poner un m¨ªnimo al impuesto de Patrimonio que algunas autonom¨ªas del PP eliminaron y subir Sociedades.
Fuentes del Gobierno y del partido pr¨®ximas a Rajoy apuestan por que, en el mejor de los casos y si consiguen la abstenci¨®n del PSOE en una tercera o cuarta votaci¨®n, no se formar¨¢ un nuevo Ejecutivo hasta primavera. Si la posici¨®n de S¨¢nchez se mantiene como hasta el momento, de total oposici¨®n a la investidura del jefe del Ejecutivo, en el equipo de Rajoy se prev¨¦ que no habr¨¢ m¨¢s salida que volver a convocar elecciones en primavera, aboc¨¢ndose a una larga, confusa y conflictiva campa?a electoral.
El PP, siempre reacio a las innovaciones y los grandes cambios, sabe que ahora tiene que ofrecer algo para poder entablar alg¨²n tipo de negociaci¨®n con el PSOE y con Ciudadanos. El ¨²nico escenario que el PP contempla para que Rajoy permanezca en La Moncloa pasa por que los socialistas lo permitan con su abstenci¨®n, ¡°muy al final, en el ¨²ltimo minuto, despu¨¦s de hac¨¦rnoslo pasar mal durante dos o tres meses¡±, sostiene uno de los vicesecretarios del partido. ¡°Vamos a sufrir, y lo sabemos; vamos a vivir una situaci¨®n muy parecida a la que vivi¨® [la socialista] Susana D¨ªaz en Andaluc¨ªa o a la que ha hecho pasar la CUP a Artur Mas, pero todo eso es mejor y lo preferimos si al final evitamos un Gobierno del PSOE con Podemos y once m¨¢s, que ser¨ªa muy negativo para Espa?a¡±, repiten casi palabra por palabra dos de los altos cargos populares m¨¢s relevantes.
Rajoy, a cambio, tiene para ofrecer hoy a S¨¢nchez un paquete de medidas y reformas que forman parte de las exigencias recurrentes durante estos ¨²ltimos meses del l¨ªder del PSOE y que el PP, en ¨²ltima instancia, se ver¨ªa obligado a discutir en el nuevo Parlamento que se constituir¨¢ a partir del 13 de enero porque figura en el guion de la mayor¨ªa de las formaciones.
El PP ha hecho n¨²meros y acepta que tendr¨ªa muy dif¨ªcil imponer a su candidato para presidir el Congreso, aunque Rajoy guardaba en mente ya a un aspirante entre sus filas. Cuenta con 123 esca?os, 63 menos que ahora, y se halla a 53 de la mayor¨ªa absoluta de la C¨¢mara. Ese gui?o de ceder dicho cargo a un dirigente del PSOE podr¨ªa ir acompa?ado de otros ofrecimientos de puestos institucionales, del Congreso y el Senado, y otros organismos, tanto para responsables socialistas como de Ciudadanos.
Pero la oferta m¨¢s relevante para el futuro del pa¨ªs tiene que ver con la aceptaci¨®n de la demanda del PSOE de crear una ponencia parlamentaria que discuta una serie de cambios en la Constituci¨®n. Es una reivindicaci¨®n en la que tambi¨¦n coinciden de partida la mayor¨ªa de los partidos presentes en las nuevas Cortes.
El PP se reservar¨ªa en ese caso la salvaguarda de disponer tras el 20-D de mayor¨ªa absoluta en el Senado y fijar¨ªa como una l¨ªnea roja infranqueable que no se pusiera sobre esa mesa la asunci¨®n de ning¨²n tipo de consulta sobre el ¡°derecho a decidir¡± de Catalu?a.
Cambios en el texto
Rajoy ya ha dejado caer desde el verano, cuando emprendi¨® su cambio de imagen y se volvi¨® m¨¢s cercano, que, aunque su partido no pensaba llevar en su programa ninguna reforma de la Constituci¨®n, tampoco se iba a negar a participar en una ponencia si alg¨²n otro partido impulsaba esa idea en la nueva legislatura. Es m¨¢s, el PP tiene sus planteamientos y no solo sobre el previsible y l¨®gico retoque para eliminar la prevalencia del var¨®n en la sucesi¨®n de la Corona. El PP ya ha avanzado, por ejemplo, que tambi¨¦n querr¨ªa discutir sobre el cierre definitivo de las competencias de las comunidades aut¨®nomas.
El punto m¨¢s sorprendente de ese lote de propuestas que el PP estar¨ªa dispuesto a debatir ahora tiene que ver con la reforma expr¨¦s del art¨ªculo 135 de la Constituci¨®n, que introdujo el principio de estabilidad financiera para limitar el d¨¦ficit.
El entonces presidente socialista Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero llam¨® a finales de agosto de 2011 a Rajoy y pact¨® ese cambio en apenas 24 horas. A los dos d¨ªas, tal modificaci¨®n de gran calado fue aprobada en un pleno urgente en el Congreso por 316 votos a favor, y cinco en contra (entre ellos, dos parlamentarios socialistas). S¨¢nchez y otros dirigentes del PSOE cuestionaron m¨¢s tarde ese cambio, y el actual l¨ªder socialista prometi¨® derogarlo si llegaba a ser presidente para incluir un blindaje m¨ªnimo de las pol¨ªticas sociales.
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