Una licencia a cambio de 45 millones de pesetas
El sumario del ¡®caso Arona¡¯ incluye la grabaci¨®n de una conversaci¨®n en la que se extorsiona a un empresario
En el municipio de Arona, desde 2003 a 2007, se realizaron extorsiones a empresarios para que abonaran importes millonarios a cambio de la tramitaci¨®n de las licencias urban¨ªsticas. Estas son las conclusiones de la fiscal¨ªa y el juez en relaci¨®n con solo una parte del inmenso procedimiento del caso Arona, que se juzga en la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife.
EL PA?S ha tenido acceso a una de las grabaciones de esas supuestas extorsiones. Se trata de la conversaci¨®n en el mes¨®n Las Rejas de Arona, el 10 de julio de 2002. En ese restaurante se encuentran el empresario Arsenio Zamora Toledo y Jos¨¦ Ram¨®n Ansorena, un constructor a quien le solicitan el pago de 45 millones de pesetas para poder construir un edificio de 206 apartamentos en la zona de Costa del Silencio. En la cinta, grabada en un magnetof¨®n y que supone una de las principales pruebas de la causa, Arsenio Zamora Toledo explica cu¨¢l es el procedimiento a seguir para conseguir una licencia de obra mayor, cuya tramitaci¨®n se encontraba estancada. El solicitante, Jos¨¦ Ram¨®n Ansorena, ya hab¨ªa abonado dos millones de pesetas por informes t¨¦cnicos y jur¨ªdicos que supo a posteriori eran de car¨¢cter gratuito.
En su declaraci¨®n ante la fiscal, Ansorena explic¨® que tanto ¨¦l como su padre fueron extorsionados, pero se negaron a pagar. "Nuestra licencia estaba paralizada y ve¨ªamos que alrededor de nuestra parcela se constru¨ªan cientos de viviendas en suelo hotelero sin que nadie las paralizara. Despu¨¦s, en 2002, Arsenio Zamora nos pidi¨® 2,5 millones de pesetas para que el Cabildo nos autorizara la licencia y despu¨¦s otros 9.000 euros por un informe jur¨ªdico", explic¨® Ansorena a la fiscal, Francisca S¨¢nchez.
La familia Ansorena pag¨® los informes, pero la vuelta de tuerca que, presuntamente, ten¨ªa preparada Arsenio Zamora como intermediario del exarquitecto Eliseo de la Rosa y el exconcejal de Urbanismo F¨¦lix Sierra Melo fue demasiado. Seg¨²n explic¨® Jos¨¦ Ram¨®n Ansorena, el presunto intermediario, Arsenio Zamora Toledo, pidi¨® el pago de 45 millones de pesetas para poder desbloquear la licencia. Esa fue la gota que colm¨® el vaso. La familia Ansorena, oriunda de Euskadi, ya hab¨ªa pasado por esta situaci¨®n, seg¨²n asegura Jos¨¦ Ram¨®n Ansorena (padre), quien cuando le exigieron 45 millones espet¨® a Zamora: "Si ETA no me ha sacado el impuesto revolucionario, tampoco lo har¨¢s t¨²". Ante la negativa de pagar, los empresarios nunca pudieron fabricar el edificio de apartamentos y recurrieron a la justicia presentando la grabaci¨®n en la que se prueba la extorsi¨®n como prueba principal.
El juicio contin¨²a
Las extorsiones a empresarios solo son la punta del iceberg de un caso en el que est¨¢ implicada la Junta de Gobierno en el Ayuntamiento de Arona, desde el alcalde de la localidad, Jos¨¦ Alberto Gonz¨¢lez Rever¨®n, exconcejal del PP, al responsable durante el periodo comprendido entre 2003 y 2007 del ¨¢rea de Urbanismo, F¨¦lix Sierra Melo.
En el primer caso, Rever¨®n reconoci¨® en su declaraci¨®n ante el juez que se concedieron licencias de forma irregular debido al desconocimiento jur¨ªdico de la propia Junta de Gobierno; a que no se le¨ªan las actas en donde figuraban las advertencias t¨¦cnicas en relaci¨®n con la ilegalidad de las licencias y, finalmente, aludiendo a que, en cualquier caso, dichas irregularidades iban a ser subsanadas con planeamientos urban¨ªsticos nuevos, ya que el Plan General de Ordenaci¨®n Urban¨ªstica en aquel tiempo databa de 1987.
En total fueron 205 licencias ilegales y, aun as¨ª, ninguno de los acusados que desempe?aron su cargo como concejales en la Junta de Gobierno local entre 2003 y 2007 afirman haber le¨ªdo las actas en donde se consignaba que las licencias eran ilegales, una cuesti¨®n que fue atribuida por parte de los acusados al secretario de la corporaci¨®n, ya fallecido.
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