Juanga, el adi¨®s forzoso a Espa?a de un mexicano en 72 horas

Hasta la noche del martes, Juan Gabriel de la Rosa era un mexicano que llevaba ocho a?os afincado en Espa?a y aspiraba a trabajar como bicimensajero. "Ten¨ªa un contrato apalabrado con una empresa del sector", asegura Irene Ruano, miembro de la Campa?a Estatal para el Cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE).?

Este viernes, en torno a la medianoche hora espa?ola ¡ªlas cinco de la tarde en M¨¦xico¡ª, Juanga, como le conocen sus amigos, bajar¨¢ las escalerillas de un vuelo comercial de Iberia en la terminal 1 del aeropuerto Benito Ju¨¢rez de la Ciudad de M¨¦xico. En ese momento habr¨¢n pasado justo tres d¨ªas desde que la Polic¨ªa le pidiera en Madrid la documentaci¨®n tras saltarse un sem¨¢foro en rojo cuando circulaba en bicicleta.

Tras la imprudencia, los agentes comprobaron que De la Rosa carec¨ªa de papeles y ten¨ªa una orden de expulsi¨®n desde hace dos a?os y fue detenido y llevado a comisar¨ªa, donde permaneci¨® hasta que se efectu¨® la deportaci¨®n expr¨¦s. Antes, el proceso llevaba a los inmigrantes a un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), donde pasaban semanas mientras se tramitaba su expediente, lo que daba un cierto margen para pedir medidas cautelares. "Se est¨¢n dando expulsiones expr¨¦s de personas con arraigo en Espa?a con estancia irregular. El plazo que queda para presentar recurso es bastante corto y no se valora que tu situaci¨®n haya cambiado en ese tiempo, que tengas hijos o en tu pa¨ªs haya un conflicto", lamenta Ruano, cuya organizaci¨®n ha denunciado m¨²ltiples casos de expulsiones expr¨¦s.

Unos 15 extranjeros fueron repatriados cada d¨ªa entre 2010 y 2014 en Espa?a seg¨²n datos del Gobierno. Durante la marcha de algunos de ellos se han vivido incidentes como la detenci¨®n de una decena de pasajeros que trataron de ayudar a un sin papeles que iba a ser deportado en un vuelo que cubr¨ªa la ruta Madrid-Dakar o la apertura de una investigaci¨®n interna en la Polic¨ªa por la supuesta agresi¨®n a un inmigrante en un vuelo de expulsi¨®n.

Diversas organizaciones han tratado de evitar hasta el ¨²ltimo momento que se consumara la expulsi¨®n de De la Rosa y han mostrado su apoyo al mexicano a trav¨¦s de redes sociales pidiendo, en algunos casos, que la protesta se llevara al interior del vuelo para evitar que despegara. No han logrado su objetivo y el avi¨®n ha salido de la terminal 4S del aeropuerto Adolfo Su¨¢rez Madrid-Barajas pasadas las dos de la tarde.

Jorge, amigo de De la Rosa desde hace un a?o y que prefiere no dar su nombre completo, espera su llamada una vez pise suelo mexicano para saber c¨®mo ha sido su traslado. "Se mov¨ªa en el mundo de los bicimensajeros y ten¨ªa un c¨ªrculo de amigos s¨®lido", afirma. "Socializaba con mucha gente, no se perd¨ªa las ferias que organiz¨¢bamos", corroboran desde Tr¨¦bol ecomensajeros, una empresa de reparto de paquetes en bicicleta.

Algunos de esos amigos le llevaron la maleta con sus pertenencias despu¨¦s de que les llamara desde comisar¨ªa. Junto a los pantalones, camisas y zapatos de su armario le entregaron una bolsa con su objeto m¨¢s preciado: la bicicleta que aspiraba a convertirse en su herramienta de trabajo.