El socio de Urdangarin se dispone a dar la batalla legal en el ¡®caso N¨®os¡¯
Diego Torres, pieza clave de la trama de desv¨ªo de fondos p¨²blicos, ha defendido siempre su inocencia y rechaza un acuerdo con el fiscal
El juicio del caso N¨®os entra, si no hay sobresaltos de ¨²ltima hora, en su zona de mayor tensi¨®n. A partir de este martes a las 9,15 comenzar¨¢n a prestar declaraci¨®n en la Audiencia Provincial de Baleares los acusados de m¨¢s relieve penal en la trama de desv¨ªo de fondos p¨²blicos: I?aki Urdangarin, esposo de la infanta Cristina, y su socio en el instituto N¨®os, Diego Torres. La semana culminar¨¢, si se cumplen las no siempre fiables previsiones del tribunal, el viernes, con la declaraci¨®n ante el tribunal de la hermana de Felipe VI. Pese a que su horizonte judicial es m¨¢s despejado que el de su marido ¨Cni la Fiscal¨ªa ni la Abogac¨ªa del Estado presentan acusaci¨®n contra ella- el mero hecho de que responda ante las magistradas como presunta cooperadora en los delitos fiscales de Urdangarin, cargo que le imputa el sindicato Manos Limpias, resulta hist¨®rico.
Diego Torres ser¨¢ el encargado de abrir la semana. El socio del exduque de Palma, de 50 a?os, est¨¢ considerado como el cerebro de la trama corrupta del Instituto N¨®os, del que era vicepresidente, y que percibi¨® 6,2 millones de euros de los gobiernos valenciano y balear y del Ayuntamiento de Madrid por organizar eventos con presupuestos inflados, factura falsas y salt¨¢ndose las leyes de contratos de la Administraci¨®n. Este consultor empresarial y antiguo profesor asociado de la elitista Escuela Superior de Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresas (Esade), de Barcelona, donde conoci¨® a Urdangarin se enfrenta a una petici¨®n del fiscal de 16 a?os y medio de c¨¢rcel. Torres est¨¢ acusado de prevaricaci¨®n, malversaci¨®n, fraude a la Administraci¨®n, delito contra la Hacienda P¨²blica, blanqueo de capitales y falsedad documental. Manos Limpias eleva la petici¨®n de prisi¨®n contra ¨¦l a 22 a?os y medio.
De los 17 acusados que componen el banquillo del caso N¨®os, Torres es, sin duda, el m¨¢s beligerante con las tesis del fiscal Pedro Horrach: ha defendido su inocencia sin concesiones, primero ante el juez instructor Jos¨¦ Castro, y en los ¨²ltimos tiempos en los medios de comunicaci¨®n e incluso en un libro, La verdad sobre el caso N¨®os (Ed. Foca, 2016). El exsocio de Urdangarin, defendido por el abogado barcelon¨¦s Manuel Gonz¨¢lez Peeters, ha rechazado en todo momento cualquier acuerdo con la acusaci¨®n p¨²blica.
Diego Torres ha tratado desde el principio de la causa, en el a?o 2010, de imponer la tesis de que las actividades supuestamente ilegales del Instituto N¨®os contaban con la supervisi¨®n y el benepl¨¢cito de la Casa del Rey. Para ello, ha publicado correos electr¨®nicos comprometedores para La Zarzuela y, en algunos casos, abochornantes para su antiguo compa?ero de aventura empresarial.
A partir de este martes, Torres tratara de convencer al tribunal presidido por la magistrada Samantha Romero de que N¨®os, una entidad oficialmente sin ¨¢nimo de lucro, pag¨® sus impuestos, cobr¨® cantidades moderadas por los congresos y cumbres (Valencia Summit, Illes Balears Forum¡) que organiz¨®, que los eventos eran ciertos y necesarios, que no hab¨ªa facturas falsas y, sobre todo, que la Casa del Rey estaba informada de todo y no puso pegas a sus actividades.
En su contra, Torres ¨Cy Urdangarin- cuentan con ya con las declaraciones prestadas por otros de sus compa?eros de banquillo, entre ellos los acusados del Gobierno balear, con el expresidente Jaume Matas a la cabeza, que reconoci¨® las irregularidades administrativas en la contrataci¨®n de N¨®os y calific¨® al yerno de Juan Carlos I de ¡°conseguidor¡± y ¡°facilitador¡± de contratos por su condici¨®n de miembro de la Familia Real. Y sobre todo, Torres deber¨¢ tratar de desvirtuar la declaraci¨®n del arrepentido contable del Instituto, su cu?ado Marco Antonio Tejeiro, que confirm¨® ambos socios crearon un entramado de empresas para repartirse al 50% los beneficios de su actividad en N¨®os mediante un sistema de facturaci¨®n cruzada.
La declaraci¨®n de Torres se espera prolongada, probablemente de m¨¢s de una jornada. Su letrado, Gonz¨¢lez Peeters, ha tenido ya alg¨²n encontronazo en este juicio con la magistrada Samantha Romero por los modos con que se dirige no solo a los acusados a los que ha interrogado sino tambi¨¦n al propio tribunal.
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