Carreras a la medida, s¨ª, pero ?a qu¨¦ precio?

El futuro estudiante universitario debe pensar primero qu¨¦ quiere aprender y plantearse despu¨¦s en qu¨¦ plazo. De momento, en Espa?a los grados (carreras) universitarios duran cuatro a?os, a los que se a?ade otro m¨¢s de m¨¢ster, que no es obligatorio, pero ayuda a mejorar las posibilidades de encontrar trabajo en un escenario laboral muy complicado y con una tasa de j¨®venes parados a la cabeza de Europa. Esto est¨¢ a punto de cambiar. Desde septiembre, una decena de universidades prev¨¦n ofertar unos 30 nuevos t¨ªtulos de solo tres a?os.

En la jerga, es el paso de un sistema 4+1 (cuatro de grado y uno de m¨¢ster) a otro conocido popularmente como 3+2 (tres de grado y dos de m¨¢ster). La normativa espa?ola lo permite desde 2015, aunque la Conferencia de Rectores de las Universidades Espa?olas (CRUE) ¡ªque suma 50 campus p¨²blicos y 26 privados¡ª acaba de aprobar por segunda vez una moratoria hasta el curso 2017-2018 que pide cumplir a todos sus socios bajo la amenaza de ser expulsados.

La CRUE argumenta que necesitan m¨¢s tiempo para reorganizar el nuevo mapa universitario con acuerdos que impidan, por ejemplo, que se ofrezca un mismo t¨ªtulo con dos duraciones diferentes en dos facultades vecinas. Y reclama que los m¨¢steres universitarios, que llegan a triplicar el coste de los grados en algunas universidades, bajen de precio para que no se ampl¨ªe la brecha entre quienes tienen dinero y aquellos que dif¨ªcilmente pueden costearse los estudios.

La duraci¨®n de las carreras espa?olas es casi una excepci¨®n en el panorama internacional. En Estados Unidos, la extensi¨®n habitual son cuatro a?os de grado m¨¢s otros dos de m¨¢ster, aunque existen programas especiales de 4+1 y 3+2. Cuando los pa¨ªses de la UE adaptaron sus t¨ªtulos al Espacio Europeo de Educaci¨®n Superior (el llamado plan Bolonia), la mayor¨ªa opt¨® por un sistema combinado de 3+2 y 4+1, seg¨²n reflejan los informes de la red europea de datos Eurydice.

Espa?a se qued¨® en el reducido grupo de aquellos con las carreras m¨¢s largas junto con Chipre, Georgia, Kazajist¨¢n y Turqu¨ªa. Entonces consider¨® que era el mejor camino para adaptar las antiguas licenciaturas de cinco a?os y que con ese tiempo el estudiante sal¨ªa mejor preparado para encontrar trabajo.

¡°Si empez¨¢semos de nuevo este cambio, optar¨ªa por carreras m¨¢s cortas y m¨¢steres m¨¢s largos, aunque peleando para que no exista diferencia de precio¡±, se?ala Francisco Michavila, director de la C¨¢tedra Unesco de Gesti¨®n y Pol¨ªtica Universitaria. ¡°As¨ª es m¨¢s f¨¢cil la comparaci¨®n internacional y la atracci¨®n de estudiantes extranjeros¡±, a?ade el autor de la monograf¨ªa Comparaci¨®n internacional del sistema universitario espa?ol, estudio presentado en enero que sit¨²a a Espa?a a la cola de Europa en captaci¨®n de alumnos de fuera.

Michavila defiende que una de las dificultades para que el sistema espa?ol tenga ¨¦xito en el extranjero es que sus m¨¢steres son demasiado cortos y no sirven a alumnos de otros pa¨ªses, como ya alert¨® Guy Haug, uno de los padres del plan Bolonia, que prefiere hablar m¨¢s de calidad que de tiempos. ¡°El debate deber¨ªa centrarse en qu¨¦ competencias han adquirido los estudiantes, porque lo importante no es lo que dura el t¨ªtulo, sino lo que han aprendido¡±, ha defendido p¨²blicamente Haug.

¡°En Inglaterra no hay debate sobre la duraci¨®n¡±, a?ade Manuel Fuertes, exalumno de Ciencias de Ingenier¨ªa en la Universidad de Oxford. Tanto Oxford como Cambridge ofertan t¨ªtulos de cuatros a?os que en el resto de Reino Unido suelen ser de tres. Fuertes asegura que Oxford revisa adem¨¢s los contenidos de los planes de estudio cada a?o para adaptarse a lo que demandan las empresas: ¡°En Espa?a el sistema no entiende a la industria, est¨¢ envejecido¡±.