Pedro S¨¢nchez dimite como secretario general del PSOE

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Pedro S¨¢nchez ha dimitido como secretario general del PSOE, dos a?os y tres meses despu¨¦s de que fuera elegido por los militantes. Tras una jornada dram¨¢tica, con gritos, llantos e insultos, se lleg¨® a las ocho y veinte de la noche, cuando S¨¢nchez acept¨® que los miembros del comit¨¦ federal votaran a mano alzada su propuesta de celebrar unas primarias para elegir al secretario general. Fue derrotado por 132 votos en contra y 107 a favor. Un minuto despu¨¦s anunci¨® su dimisi¨®n. Ahora, el PSOE quedar¨¢ bajo la tutela de una gestora hasta un pr¨®ximo congreso. Antes, otro comit¨¦ federal decidir¨¢ si se facilita o no la investidura de Rajoy, otro momento cr¨ªtico para el PSOE. Javier Fern¨¢ndez, presidente de Asturias, ser¨¢ propuesto para dirigir la gestora

Once horas despu¨¦s de que llegaran a la sede federal del PSOE los m¨¢s de 270 miembros que componen el comit¨¦ federal, el secretario general del PSOE, Pedro S¨¢nchez, anunciaba su dimisi¨®n tras perder la votaci¨®n sobre su propuesta de celebrar de inmediato unas primarias para elegir al nuevo l¨ªder socialista. Se sent¨ªa desautorizado y cuestionado por buena parte del partido y apost¨® por el todo o nada. O se convert¨ªa en el l¨ªder revalidado para llevar adelante su intento de conseguir una mayor¨ªa de gobierno para Espa?a o abandonaba. Y perdi¨®.

A este resultado se hubiera llegado casi quince minutos despu¨¦s de que empezara la reuni¨®n sin tener que esperar a las 20.21, momento de votaci¨®n, para constatar que no ten¨ªa la mayor¨ªa. 107 delegados estuvieron con ¨¦l, frente a los 132 que votaron en contra.

Lejos de llegar a este resultado de una manera natural, con el l¨®gico enfrentamiento entre sectores, todo fue bronco. Por sorpresa, S¨¢nchez y el resto de los miembros de la ejecutiva que segu¨ªan con ¨¦l, despu¨¦s de la dimisi¨®n de 17 ejecutivos el pasado mi¨¦rcoles, decidieron llamar a votar en una urna que estaba detr¨¢s de un panel. Para los cr¨ªticos se trataba de una maniobra poco clara y ajena al deseo de una mayor¨ªa de votar a mano alzada. Los gritos, los llantos, y las imprecaciones de decenas de miembros del comit¨¦ federal hicieron recapacitar a S¨¢nchez, que par¨® la votaci¨®n.

Antes, la presidenta de Andaluc¨ªa, Susana D¨ªaz, enormemente afectada, pidi¨® calma y que se permitiera votar a mano alzada. Para los ganadores, S¨¢nchez y su equipo hab¨ªan tratado todo el d¨ªa de impedir que se votara, incluso aunque ellos hicieron una concesi¨®n: aceptar que el equipo de S¨¢nchez votara a pesar de que desde la dimisi¨®n el mi¨¦rcoles de la mitad m¨¢s uno de los miembros de la ejecutiva, no les reconoc¨ªan ya su legitimidad.

Los n¨²meros arrojaron la realidad: que los cr¨ªticos ten¨ªan la mayor¨ªa, como siempre hab¨ªan sostenido. Un minuto despu¨¦s, S¨¢nchez anunciaba su dimisi¨®n, y mostraba su orgullo por militar en el PSOE.

Con la salida de S¨¢nchez de la sala los ganadores, capitaneados por los presidentes auton¨®micos de ese sector seis de siete, empezaron a poner en marcha la gestora que se har¨¢ cargo del partido de manera inmediata. Al tiempo, y ya por ¨²ltima vez, Pedro S¨¢nchez, se dirigi¨® a la sala de conferencias de prensa para despedirse de los medios de comunicaci¨®n y dar una breve pincelada pol¨ªtica, pero cargada de intenci¨®n. Como ya hiciera el d¨ªa anterior, vincul¨® el ¨¦xito del sector cr¨ªtico, si se produc¨ªa, a abrir una nueva etapa en el PSOE que conducir¨ªa a la abstenci¨®n del partido en una eventual votaci¨®n en la investidura de Mariano Rajoy para que alcance la presidencia del gobierno.

¡°Hoy se ha producido un debate muy intenso¡±, se?al¨® S¨¢nchez. Lo que tanto irrit¨® el d¨ªa anterior al sector ganador lo reiter¨®. ¡°Lo propuse para dirimir dos cuestiones: el liderazgo, y la investidura. Yo quer¨ªa votar no a Rajoy y formar un gobierno alternativo a Mariano Rajoy y como dije si no prosperaba mi propuesta no podr¨ªa administrar una decisi¨®n que no compart¨ªa. Desgraciadamente no ha salido vencedora mi propuesta y dimito¡±. Eso s¨ª, despu¨¦s de dejar en el ambiente que los ganadores quieren facilitar el gobierno al PP, hizo un llamamiento ¡°a los socialistas con carn¨¦ o sin carn¨¦ que est¨¦n orgullosos de ¡°militar en el PSOE¡±. La comisi¨®n gestora contar¨¢ con el apoyo ¡°leal¡± de Pedro S¨¢nchez.

A¨²n tiene muchas oportunidades el secretario general dimitido de demostrar esa lealtad, ya que tendr¨¢ que mostrar su apoyo o desacuerdo a las decisiones que vaya tomando la gestora que ostente el poder del PSOE hasta la pr¨®xima convocatoria de un congreso.

Los modelos que se enfrentaron, aunque apenas hubo ocasi¨®n de debatir sobre ellos, muestran un cisma rotundo en el PSOE. S¨¢nchez, a pesar de sus ¨²ltimas declaraciones respecto a que ha contado con la lealtad de sus compa?eros ¡°en muchos momentos¡±, se ha quejado de que no se ha sentido en absoluto apoyado por buena parte de los dirigentes territoriales. El enfrentamiento con la presidenta de Andaluc¨ªa, Susana D¨ªaz, ha sido intenso e incesante casi desde el principio del mandato de S¨¢nchez. La incomunicaci¨®n del exsecretario general con los representantes del poder institucional de su partido se ha intensificado d¨ªa a d¨ªa.

La preocupaci¨®n de los l¨ªderes territoriales estaba precisamente en este hondo enfrentamiento que ha quebrado la unidad de este partido centenario y, sobre todo, ha dividido a los militantes socialistas. El ambiente de tensi¨®n dentro y fuera del PSOE vivido el s¨¢bado fue la muestra de la honda fractura que vive este partido. Las ¨²ltimas acciones de S¨¢nchez y su equipo para ¡°impedir¡± que hubiera alguna votaci¨®n no ayudaron a empezar a resta?ar las heridas. En el equipo de S¨¢nchez tampoco olvida los sinsabores que le han hecho pasar desde que result¨® elegido. Ahora, le toca a la gestora empezar el camino de la reconciliaci¨®n, y todos miran a Javier Fern¨¢ndez, presidente de Asturias, aunque en un horizonte cercano vislumbran a Susana D¨ªaz.