?lvaro Nadal, el gemelo zurdo
Rajoy conf¨ªa en su asesor econ¨®mico las competencias de Energ¨ªa, que ten¨ªa su hermano como secretario de Estado, adem¨¢s del Turismo y la Agenda Digital
Para bien y para mal, la carrera de ?lvaro Nadal Belda, hasta la fecha director de la Oficina Econ¨®mica del presidente del Gobierno desde que Mariano Rajoy lleg¨® a La Moncloa y ahora ministro de Energ¨ªa, Turismo y Agenda Digital, discurre en paralelo a la de su hermano gemelo Alberto, que precisamente ha ocupado el cargo de secretario de Estado de Energ¨ªa en el anterior Gobierno y que queda bajo su responsabilidad, se supone que por poco tiempo. Y, como corresponde a esa condici¨®n de gemelos, no se entiende uno sin el otro durante una gran parte de su vida. Hasta la mili la hicieron juntos.?
Nacieron el 30 de enero de 1970 en el seno de una familia de clase media acomodada de Madrid. Crecieron en el Parque de las Avenidas, cercano a la plaza de toros de Las Ventas. Sus padres les inscribieron en el vecino Colegio Menesiano, donde en lugar de gastar suelas en el patio tras un bal¨®n, se apasionaban por las matem¨¢ticas y la historia y, al mismo tiempo, por la pol¨ªtica. Materias todas que siguen disfrutando con pasi¨®n cuando les dejan sus labores gubernamentales.
Su madre les meti¨® con siete a?os a estudiar ingl¨¦s y, luego, por el mismo m¨¦todo, franc¨¦s y alem¨¢n, idiomas que ahora hablan con fluidez. Los veranos aprovechaban para ir a universidades europeas y enriquecer su equipaje. Su padre quer¨ªa que fueran ingenieros, pero ellos optaron por estudiar ICADE (o sea dos carreras a la vez, Econ¨®micas y Derecho) y no se recataban en reconocer a sus compa?eros que quer¨ªan ser ministros.
Despu¨¦s, con 24 a?os, sacaron, cum laude, la oposici¨®n a t¨¦cnicos comerciales y economistas del Estado, ?lvaro con el n¨²mero uno y Alberto, con el dos, aunque casi exaqueo. En el tribunal que les examin¨® estaban Miguel Sebasti¨¢n, Jos¨¦ Manuel Gonz¨¢lez-P¨¢ramo, Carlos Oca?a y Gerardo Novales, y de secretario, Jaime Garc¨ªa-Legaz. Despu¨¦s, ?lvaro ampli¨® conocimientos en la Universidad de Harvard, donde se traslad¨® con una beca Fulbright y se doctor¨® en Econom¨ªa, y Alberto imparti¨® clases de Econom¨ªa en la de Washington.
Eran los a?os de Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez. Pero ellos ya ten¨ªan muy claro que lo suyo era la derecha. Para entonces ya se hab¨ªan hecho liberales y afiliados, con 18 a?os, a las Nuevas Generaciones del PP. Pronto deslumbraron a sus mayores, que les abrieron la puerta de la causa y se les rifaban cuando llegaron al Gobierno en 1996. Antes ya hab¨ªan comenzado a separar sus vidas profesionales pasando por distintos puestos de Econom¨ªa, Hacienda y Comercio de la Administraci¨®n socialista.
Ahora siguen en la carrera y ambos han hecho m¨¦ritos, como viceministros en sus ¨²ltimos cargos, para subir el escal¨®n que les faltaba hasta ser ministros; pero al parecer los dos no caben en el mismo Gabinete. Los dos gozan de fama de no casarse con nadie, lo que les aleja de corruptelas y posiciones sospechosas, algo que en estos tiempos es muy valorado. Precisamente, Alberto rechaz¨® ser consejero de Red El¨¦ctrica antes de llegar a la Secretar¨ªa de Estado por el cargo que ocupaba su hermano en Presidencia.
Uno es zurdo y mel¨®mano experto en m¨²sica de cine (?lvaro) y otro diestro y aficionado a montar a caballo (Alberto); pero para diferenciarse mejor sin que tengan que mostrar sus artes en la esgrima, deporte que les gusta a los dos (?lvaro tiene una foto con el uniforme de tirador en su Whatsapp), Alberto se dej¨® barba poco antes de acceder al cargo de secretario de Estado de Energ¨ªa. Pero, mientras ?lvaro sigui¨® en las huestes del partido llegando a ser diputado (se trasladaba al Congreso en bicicleta) y pieza clave en el equipo econ¨®mico que dirigi¨® Crist¨®bal Montoro en la oposici¨®n, Alberto eligi¨®, sin separarse del todo, un camino m¨¢s independiente.
A ?lvaro Nadal, que tambi¨¦n aprendi¨® organizaci¨®n industrial en Harvard, le hizo una opa Baudilio Tom¨¦ (antecesor suyo en La Moncloa) para incorporarse a su equipo que no prosper¨® y el vicepresidente Rodrigo Rato, en un Consejo de Ministros, le pas¨® un papel a Crist¨®bal Montoro, titular de Hacienda: ¡°Me han dicho que quieres llevarte a ?lvaro, no me viene bien¡±. Por entonces, era asesor en el ministerio.
Funcionario hasta la m¨¦dula, en 2004 continu¨® trabajando con la Administraci¨®n socialista; pero pronto le reclam¨® Miguel Arias Ca?ete para el equipo de Econom¨ªa del PP y de la Ejecutiva del partido. Comparti¨® mesa con Elvira Rodr¨ªguez, con quien formaba pareja de mus y que recuerda que hab¨ªa o¨ªdo hablar de ¡°dos gemelos que eran unos cerebros¡±. En 2008 sali¨® diputado por Albacete tras aceptar la oferta de Mar¨ªa Dolores de Cospedal. En las ¨²ltimas elecciones sali¨® parlamentario por Madrid.
Despu¨¦s ya lleg¨® su actividad parlamentaria y, con la victoria popular en 2011, su nombramiento como rasput¨ªn econ¨®mico del presidente, la persona que le lleva la agenda y le prepara para las reuniones internacionales. Un puesto que, en ocasiones, genera tensiones con los departamentos econ¨®micos y que depende de la buena mano de su ocupante para lubrificar las relaciones y evitar que salten chispas, las mismas que tratar¨¢ de evitar con las el¨¦ctricas con las que ahora tendr¨¢ bajo sus supervisi¨®n.
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