¡°Voy a pedirle a Rajoy que impulse las reformas que necesitan los catalanes¡±

Albert Rivera (Barcelona, 1979) encara esta legislatura como un cap¨ªtulo decisivo para su trayectoria pol¨ªtica. Ciudadanos se ha apostado su futuro como partido a que el Ejecutivo de Mariano Rajoy cumpla con las 150 reformas que recoge su pacto de investidura. Adem¨¢s, Rivera espera que la vicepresidenta Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa escuche sus propuestas para afrontar el reto independentista en Catalu?a. Y ya dise?a su oferta para la Asamblea General de Ciudadanos, en la que propondr¨¢ ampliar la direcci¨®n para evitar los problemas de liderazgo que ha observado en el PSOE y en Podemos, y que predice para el PP cuando el presidente decida dar un paso al lado.

Pregunta. Con un gobierno en minor¨ªa y con una oposici¨®n dividida, ?cu¨¢les cree que ser¨¢n los ejes de la legislatura?

Respuesta. El eje principal va a ser reformistas o inmovilistas: cu¨¢nta voluntad pol¨ªtica existe en los partidos de la C¨¢mara para reformar y ser valientes con los temas que no funcionan en Espa?a, o para seguir en el establishment diciendo que todo va bien. La educaci¨®n y el marco laboral son dos ejemplos muy claros. ?Vamos a seguir diciendo que se genera empleo y que vamos muy bien, o vamos a asumir que nuestro modelo es un fracaso? ?Seguiremos vanaglori¨¢ndonos de lo maravillosa que es nuestra educaci¨®n o asumiremos que estamos liderando el fracaso escolar en 2015 en Europa? Son temas que merecen valent¨ªa, ganas de reformar y decir que hay un problema. Ese va a ser el eje. A lo mejor vemos socios muy raros. En el tema laboral, cuando escucho a Podemos, y a veces al PP o al PSOE, parece que defienden lo mismo, un cierto inmovilismo. Y yo no soy partidario de no tocar las cosas que no funcionan.

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P. ?No ser¨ªa m¨¢s f¨¢cil garantizar que el PP cumple con los 150 compromisos de su acuerdo entrando en el gobierno?

R. Sin duda. Si no estuviera Rajoy y no fuera un gobierno continuista ser¨ªa seguramente mejor estar en el gobierno. Es una l¨¢stima que no haya habido posibilidad de formar por primera vez en Espa?a un gobierno de coalici¨®n. Ha sido el propio PP el que ha impedido que ni Ciudadanos ni el PSOE se planteen eso: lo ha fiado todo al continuismo del presidente del partido, a blindar la pol¨ªtica de Rajoy. Los viejos partidos todav¨ªa tienen que hacer una limpieza importante de corrupci¨®n para que pueda haber gobiernos de coalici¨®n. En un futuro igual sucede. Con un presidente de salida, va a ser m¨¢s f¨¢cil la relaci¨®n con el gobierno que con su partido.

P. Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa asume la interlocuci¨®n con las Comunidades. ?Intentar¨¢ usted influir en la relaci¨®n con Catalu?a?

R. Vamos a ver c¨®mo act¨²a la vicepresidenta. Hace falta alguien que recuerde que hay que cumplir las leyes, pero tambi¨¦n hace falta que abordemos los debates reales que afectan a los catalanes. Voy a pedirle a Rajoy que impulse las reformas que necesitan los catalanes. Propongo tres v¨ªas de actuaci¨®n y espero que el Gobierno nos escuche y tambi¨¦n que el gobierno de la Generalitat quiera bajar del monte. Una de ellas es la financiaci¨®n auton¨®mica, una de las reivindicaciones de muchas Comunidades pero tambi¨¦n de Catalu?a. Dos, un plan de infraestructuras nacional, con algunas reivindicaciones hist¨®ricas y justas, como el corredor mediterr¨¢neo. Y tercero, la reforma constitucional, las competencias, cu¨¢les son del Estado y cu¨¢les de las Comunidades. Esos tres temas me parecen una buena mesa de negociaci¨®n y di¨¢logo con las Comunidades y especialmente con Catalu?a. Son temas transversales. Cuando uno habla de financiar los servicios p¨²blicos, igual habla en Galicia que en Catalu?a; cuando uno habla de reformar la Constituci¨®n, se habla en su conjunto; cuando habla de infraestructuras, leg¨ªtimamente las quiere buenas para su tierra. ?Va a ser capaz la vicepresidenta de entender que no solo hay que aplicar la ley, que tambi¨¦n hay que hacer pol¨ªticas en algunos asuntos concretos? Voy a intentar convencer y ayudar para que ese debate se produzca. ?Van a bajar del monte el se?or Puigdemont, Junqueras y Mas y se van a sentar en una mesa para reformar la ley de financiaci¨®n, la Constituci¨®n o para hacer un plan de infraestructuras? Si les ponemos la silla en la mesa tendr¨¢n que bajar.

P. ?Por qu¨¦?

R. Porque los catalanes no van a perdonar que el gobierno de la Generalitat no se implique en esos temas. Sacar¨ªamos al independentismo del victimismo. Espa?a nos roba, hay mala financiaci¨®n, no funcionan bien las infraestructuras, la Constituci¨®n no se ha reformado en 40 a?os... y cuando lo vamos a hacer, ?te sientas en la mesa o sigues manifest¨¢ndote con la estelada? Ese juego pol¨ªtico es lo que no s¨¦ si ser¨¢ capaz de hacer el gobierno. Ayudar¨¦ en lo que pueda a que el gobierno lo entienda de esa manera.

?P. Su equipo econ¨®mico es muy cr¨ªtico con Crist¨®bal Montoro. ?Su continuidad en Hacienda dificulta pactar los Presupuestos?

"Es una l¨¢stima no haber podido formar un Gobierno de coalici¨®n"

R. El acuerdo de Presupuestos, por suerte, no depende de Crist¨®bal Montoro. Depende del acuerdo de investidura y del presidente en ¨²ltima instancia. Hicimos el esfuerzo de trasladar una tabla de ingresos y gastos y el PP se comprometi¨® a ella. Podemos poner matices a cada una de las partidas, discutir la puesta en marcha de esas medidas en este primer a?o, pero lo que no es discutible es el acuerdo de investidura. Ser¨ªa absurdo. Conf¨ªo en que ese acuerdo se traslade a medidas legislativas y medidas presupuestarias.

P. Si el gobierno no reclama la amnist¨ªa fiscal, ?se sentir¨¢ traicionado?

R. La traici¨®n no ser¨ªa a Ciudadanos, ser¨ªa a los espa?oles. Imag¨ªnense que les suben el IRPF a los espa?oles para no acometer la petici¨®n de la amnist¨ªa. Hay tiempo antes del 30 de noviembre de parar la prescripci¨®n para recaudar como m¨ªnimo el 10%. Solo falta voluntad pol¨ªtica, y la voluntad pol¨ªtica se plasm¨® en el acuerdo de investidura. Estoy convencido de que ni al Gobierno ni a Montoro, como en muchas otras cosas, les gustar¨¢ reconocer que tienen que girar o virar su pol¨ªtica, pero no les queda otra. Rajoy dijo el mi¨¦rcoles: ¡®Voy a cumplir, no les quepa la menor duda¡¯. A sus palabras me remito.

P. Tras conocer el nombre de los nuevos ministros, ?le parece un gobierno reformista o decepcionante?

R. Uno no se decepciona cuando no espera nada. Los nombramientos tienen que ver a veces m¨¢s con cuestiones internas del PP que con elecciones de personas que vayan a reformar un ¨¢mbito determinado. La entrada de Mar¨ªa Dolores de Cospedal [ministra de Defensa], o de Juan Ignacio Zoido [de Interior], u otros equilibrios que ha tenido que hacer el presidente, tienen m¨¢s que m¨¢s ver con eso. El cambio ha llegado al Parlamento, pero el cambio no ha llegado al Gobierno, empezando por el presidente.

P. ?Durar¨¢ la legislatura lo suficiente como para implantar todas las medidas del pacto?

R. La legislatura no tiene por qu¨¦ ser corta. Si el PP y Rajoy quieren ser presidente m¨¢s tiempo, cosa que tendr¨ªa sentido porque es su segundo y adem¨¢s su ¨²ltimo mandato; si el PSOE seguramente necesita tiempo y quiere tiempo para rehacerse y tener un proyecto alternativo; y si Ciudadanos quiere que se cumplan estas medidas, todo tiende a pensar que la legislatura quiz¨¢s va a ser menos corta de lo que algunos se piensan. Seguramente a Podemos le gustar¨ªan elecciones cada tres meses, pero al resto de grupos nos interesa que esto dure y sea fruct¨ªfero. No tengo indicios para pensar que la legislatura sea muy corta, otra cosa es que sea compleja, que lo va a ser.

P. ?Qu¨¦ Rajoy espera encontrarse?

R. El discurso del primer debate abri¨® la puerta a que muchos pens¨¢ramos que hab¨ªa un mea culpa, una especie de ¡®lo he entendido, esto va a cambiar, estoy forzado a dialogar¡¯. En el discurso del s¨¢bado se puso la venda antes que la herida. Tengo esa duda, qu¨¦ Rajoy nos vamos a encontrar. Por mucho que nos quiera trasladar la responsabilidad a la oposici¨®n, es ¨¦l quien tiene que entender que tiene que dar un giro en algunas pol¨ªticas y en reformas estructurales. El gran reto que tiene Espa?a por delante no es parchear de mercado laboral, la educaci¨®n, la justicia, sino reformarlas de arriba abajo.

P. ?C¨®mo lograr¨¢ sacar adelante esas reformas si necesitan el apoyo de otros partidos?

R. La paradoja es que con 32 esca?os le hemos arrancado una serie de compromisos a este Gobierno en minor¨ªa, y que el PSOE, con 85, ha tenido que abstenerse sin ninguna condici¨®n, gratis, sin cambios de pol¨ªticas concretas. Espero que el PSOE se sume. Hay una pasarela, una v¨ªa abierta, que son las 100 reformas comunes (de los acuerdos que ha firmado con los dos partidos). Espero que el PSOE y Ciudadanos puedan dar un viraje a la pol¨ªtica del PP haciendo fuerza con esos 117 esca?os que representamos los dos grupos y que Podemos se pueda sumar en algunos temas. No quiero cerrar la puerta a ning¨²n acuerdo ley por ley, porque los cuatro grupos tenemos que tener cintura para entendernos.

P. ?Y c¨®mo evitar¨¢ que el PP monopolice los ¨¦xitos de las reformas?

"Al PP, PSOE y a Ciudadanos nos interesa que la legislatura dure"

R. Uno de los retos comunicativos de Ciudadanos es que todas las reformas que nosotros exigimos las ponga en marcha el Gobierno y que la gente sepa que son de Ciudadanos tambi¨¦n. La pregunta es: ?alguien piensa que Rajoy quiere poner en marcha una comisi¨®n de investigaci¨®n contra su corrupci¨®n, acabar con los aforamientos, un pacto educativo despu¨¦s de la LOMCE? Hay una parte comunicativa buena para Ciudadanos y mala para Espa?a: como el PP no ha hecho nada de eso en cuatro a?os y adem¨¢s Rajoy es inmovilista por naturaleza, seguramente todo lo que sean reformas tiene m¨¢s que ver con el sello naranja que con la voluntad de autoenmienda de un presidente que hemos visto nombrando el gobierno que no tiene mucha. Es un reto explicarlo, pero tampoco me obsesiona. Al final del camino, lo que tenemos que intentar es que la gente diga, estando Ciudadanos controlando al gobierno ha sido mejor que con mayor¨ªa absoluta de este gobierno. Hay un escepticismo con esta legislatura que incluso nos ayuda. Todo el mundo piensa que va a ser un desastre, que no va a haber manera de sacar nada. Pues todo lo que salga¡­

P. Sin embargo, su situaci¨®n es esquizofr¨¦nica: quiere ser oposici¨®n, pero debe votar medidas con el gobierno. ?C¨®mo manejar¨¢ eso?

R. Es hacer la oposici¨®n en lo que el gobierno no cumple, o no hace bien, y luego, en los temas importantes, de pa¨ªs, de Estado, estar juntos, con el PSOE tambi¨¦n y con Podemos si se puede tambi¨¦n. No me siento inc¨®modo. No creo que sea esquizofr¨¦nico. Es un papel de oposici¨®n distinto al de la oposici¨®n como se ha entendido en Espa?a en los ¨²ltimos 35 a?os. En algunos pa¨ªses centroeuropeos o n¨®rdicos es muy habitual que los partidos de la oposici¨®n negocien con el gobierno y aprueben los Presupuestos. Y no pasa nada. ?Cu¨¢nto le importa a un ciudadano que se abstenga o vote a favor un partido a cambio de unas partidas presupuestarias concretas? Yo creo que no penaliza. La sociedad va un paso por delante de la endogamia pol¨ªtica y period¨ªstica en este ¨¢mbito. No creo que sea esquizofrenia. Es un ejercicio mucho m¨¢s abierto de hacer pol¨ªtica.