El cazador se hace viejo
El cambio de h¨¢bito en los j¨®venes ocasiona una ca¨ªda "preocupante" en los cazadores federados
La Federaci¨®n de Caza es la que m¨¢s licencias deportivas ha perdido en los ¨²ltimos cinco a?os. De las 66 evaluadas por el Ministerio de Educaci¨®n, Cultura y Deporte, la actividad cineg¨¦tica cuenta con 67.000 licencias menos que en 2010, llegando a las 333.000 el a?o pasado, seg¨²n el ¨²ltimo Anuario de Estad¨ªsticas Deportivas. Las causas var¨ªan entre los federados y los animalistas, pero hay un factor en el que todos coinciden: La poblaci¨®n cazadora envejece y se debilita el relevo generacional.
La caza contin¨²a siendo la tercera federaci¨®n que m¨¢s licencias tiene en Espa?a (tras el f¨²tbol y el baloncesto), pero desde 2009 cuenta con p¨¦rdidas anuales. ¡°El titular es que hay menos cazadores que antes¡±, afirma ?scar Beltr¨¢n, director gerente de la Oficina Nacional de la Caza. Est¨¢n al tanto de la disminuci¨®n de licencias y la atribuyen principalmente a un despoblamiento de los pueblos. ¡°Cada vez hay m¨¢s migraci¨®n hacia la ciudad o fuera del pa¨ªs, lo que produce un abandono del cuidado del h¨¢bitat donde viven las especies de caza menor, por eso ahora se ven tantos conejos y perdices en Madrid y Barcelona¡±.
Luis Fernando Villanueva, presidente de la Asociaci¨®n de Propietarios Rurales (APROCA), reconoce que la ca¨ªda en las cifras de federados son "preocupantes". No solo en los ¨²ltimos cinco a?os, si no en las ¨²ltimas tres d¨¦cadas. "Los j¨®venes tienen otro tipo de alicientes, casi todos los que somos hijos de cazadores acompa?¨¢bamos a nuestros padres y eso se ha ido perdiendo". Con el fin de cambiar la percepci¨®n en los menores respecto a la caza, que "generalmente ven la figura del cazador denostada", dice Villanueva, ha lanzado la?Fundaci¨®n Artemisan. A trav¨¦s de estudios quiere lograr que los ni?os "entiendan que el cazador es necesario para conservar el medio ambiente".?
La crisis econ¨®mica, que?afecta principalmente a los j¨®venes, tambi¨¦n ha influido en la baja de federados seg¨²n Beltr¨¢n: ¡°Ahora prefieren ir de botell¨®n que de cacer¨ªa, es m¨¢s barato¡±. Jos¨¦ Mar¨ªa Manche?o, presidente de la Federaci¨®n de Andaluc¨ªa, la m¨¢s grande de Espa?a, concuerda con que la crisis ha sido una de las responsables de que los j¨®venes no se inscriban, particularmente en C¨¢diz y Huelva. ¡°Falta un empuje m¨¢s fuerte en el relevo generacional¡±, dice Manche?o, quien agrega que sigue habiendo j¨®venes federados de todas formas, ¡°pero ni con la intensidad ni el n¨²mero que nos gustar¨ªa¡±.
Para Theo Oberhuber, coordinadora de Ecologistas en Acci¨®n, la raz¨®n m¨¢s que econ¨®mica, recae en que ¡°los j¨®venes tienen otras aficiones menos violentas y les importa m¨¢s el medioambiente¡±. Oberhuber menciona al Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas (CIS) como una de las fuentes de su argumento. La ¨²ltima encuesta del centro donde se pregunt¨® a la gente si estaban a favor o en contra de la caza es de 1995, donde el 42% estaba ¡°m¨¢s bien a favor¡± y el 43%, ¡°m¨¢s bien en contra¡±.
Otro factor a considerar en la tendencia a la baja, es que cada Comunidad Aut¨®noma requiere un tipo distinto. Por ende, un solo cazador puede significar tres licencias: Catalu?a, Valencia y Castilla-La Mancha, por ejemplo. ¡°Con la crisis puede que hayan renovado solo una¡±, supone Beltr¨¢n. Para Oberhuber?la crisis es una excusa, ¡°si un cazador sal¨ªa antes 10 veces, ahora lo hace tres, pero sigue manteniendo su licencia aunque sea para salir un d¨ªa¡±.
Los valores
Ecologistas en Acci¨®n no tiene un movimiento contra la caza. ¡°El tema taurino tiene mucha m¨¢s coordinaci¨®n¡±, asegura Oberhuber, quien agrega que la caza est¨¢ muriendo ¡°casi por si sola¡±. El presidente de la Federaci¨®n de Andaluc¨ªa explica que la cineg¨¦tica es un hecho natural en las zonas rurales y que si cambia el pensamiento, ocurrir¨¢ solo en las grandes ciudades: ¡°La caza ha evolucionado much¨ªsimo los ¨²ltimos 15 a?os, es una herramienta de gesti¨®n y conservaci¨®n¡±.
La tenencia de armas para cazar tambi¨¦n ha sufrido un impacto. Las licencias que amparan la caza menor ¡ªescopetas¡ª han disminuido 24% en los ¨²ltimos cinco a?os seg¨²n cifras de la Guardia Civil. Sin embargo, las de caza mayor ¡ª rifles¡ª han aumentado un 10%.
Los valores de las licencias de caza no han variado y por entre 20 y 30 euros al a?o dependiendo de la Comunidad, se puede acceder a los servicios t¨¦cnicos, jur¨ªdicos y las competiciones. Pero la licencia no es lo ¨²nico que hay que financiar. ?lvaro Resi, que trabaja desde 2004 como gestor de cotos en monter¨ªas en Extremadura y Castilla y Le¨®n, confirma que se ven menos j¨®venes. ¡°A los que no tienen un trabajo o unos ingresos estables les cuestan mucho m¨¢s poder acceder¡±. Resi estima que un cazador ¡°novato¡± necesita invertir unos 1.500 euros para su primera cacer¨ªa: El rifle, los cartuchos, el permiso y pagar la jornada de caza, que puede oscilar entre 50 y 3.000 euros. ¡°Si vas hoy a una cacer¨ªa, la gente joven que ves es porque o alguien lo ha invitado o lo han dejado tirar en un momento puntual, pero no que se dedique exclusivamente¡±.
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