La defensora del Pueblo pide a Interior m¨¢s c¨¢maras y reconocimientos m¨¦dicos en los CIE

El 18 de octubre, medio centenar de inmigrantes se amotin¨® para intentar escaparse del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche. Los internos taparon las c¨¢maras de seguridad para cegar a los funcionarios del centro y se abrieron paso hasta la azotea del edificio. Su protesta puso el foco sobre las condiciones de vida en los siete CIE que hay en Espa?a, donde se suceden los conflictos. En los ¨²ltimos cinco meses, m¨¢s de 100 internos se han fugado de sus instalaciones, por las que pasaron 6.930 personas que estaban en situaci¨®n ilegal en Espa?a en 2015. La defensora pide que los internos dispongan de informaci¨®n en m¨¢s idiomas sobre protecci¨®n internacional y acceso a sus consulados; que se instalen m¨¢s c¨¢maras de videovigilancia; y que se efect¨²e un reconocimiento m¨¦dico sistem¨¢tico de los internos, antes e inmediatamente despu¨¦s de salir, que deba ser anotado en un registro. En definitiva, m¨¢s transparencia y control en la gesti¨®n de los centros.

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El 26 de octubre, Becerril y su equipo se presentaron sin previo aviso en el CIE de Aluche para investigar los hechos con unas 90 entrevistas. Una minor¨ªa de los inmigrantes denunci¨® "malos tratos", seg¨²n la defensora. Esos internos declararon "que la polic¨ªa les hab¨ªa cacheado excesivas veces y que hab¨ªa irrumpido en las salas dormitorio", seg¨²n ha descrito la exministra. "Hay otras personas entrevistadas, muchas, que afirman que el trato de la polic¨ªa fue correcto", ha subrayado.

Las ONG especializadas critican que los CIE funcionen bajo criterios de control y servicios propios de una prisi¨®n, cuando son centros de car¨¢cter no penitenciario donde se ingresa cautelarmente a extranjeros que est¨¢n pendientes de que se ejecute una orden de expulsi¨®n a su pa¨ªs de origen. Denuncian, tambi¨¦n, la precariedad de sus instalaciones y los conflictos que surgen entre internos de diferentes nacionalidades. La combinaci¨®n de todos esos problemas ha resultado en numerosos motines y fugas en los ¨²ltimos cinco meses.

El 21 de agosto, 10 personas se fugaron del CIE de Murcia. Ese mismo mes, 17 internos lo hicieron del de Madrid, tras serrar los barrotes de una ventana. El 6 de octubre, otros 67 inmigrantes escapaban del CIE murciano. A inicios de noviembre, casi 60 personas intentaron huir del CIE de Barcelona. El 14 de noviembre, otra decena de internos se escaparon de esa instalaci¨®n. Y el 27 de noviembre, 13 inmigrantes se fugaron del CIE de la capital, del que ya hab¨ªa escapado otros dos a inicios de ese mes.

"Creo que los derechos se cumplen y creo que la asistencia y las infraestructuras son mejorables", ha dicho Becerril. "Los dormitorios, que son de entre 6 y 8 personas han mejorado, como las condiciones de higiene, la sala de ocio, o que ahora se cite a los internos por su nombre, cuando antes se les citaba por su n¨²mero. Y se les ha autorizado a usar los tel¨¦fonos m¨®viles", ha continuado sobre los cambios introducidos en el CIE de Aluche tras la visita de los t¨¦cnicos del Defensor del Pueblo. "Hay aspectos a subsanar", ha subrayado. "La asistencia sanitaria hay que ampliarla lo m¨¢s posible y que contemple un examen m¨¦dico para las personas que van a ser repatriadas, antes de marcharse; una mejor asistencia por parte de traductores, que son escasos; atender de modo m¨¢s inmediato las solicitudes de ser atendidos por el director; que se les d¨¦ copia de las quejas; y que las c¨¢maras de videovigilancia se extienda a todas las zonas comunes, para que no haya puntos oscuros".