Las nuevos estatutos del PP fuerzan la salida de una docena de cargos

La placidez del 18 Congreso Nacional del PP, el pasado fin de semana, ser¨¢ muy dif¨ªcil que se repita en muchos congresos regionales y provinciales. La direcci¨®n nacional del PP s¨ª ha tomado nota de la demanda creciente, en las bases y cuadros del partido, para evitar la actual acumulaci¨®n de cargos en unas cuantas personas y quiere empezar a corregir ese fallo, sobre todo por las estructuras provinciales. La orden es que los nuevos presidentes provinciales se dediquen lo m¨¢s en exclusiva posible al partido y en todo caso lo compaginen con cargos locales pero no nacionales y menos a¨²n de gobierno. Los estatutos fueron corregidos en el c¨®nclave nacional para forzar esa situaci¨®n. Las nuevas normas podr¨ªan afectar a una docena de presidentes provinciales que ahora son secretarios de Estado, diputados en el Congreso o delegados del Gobierno.

Los estatutos del PP aprobados mayoritariamente el pasado fin de semana en el 18 Congreso Nacional conten¨ªan alguna novedad que los compromisarios no sab¨ªan muy bien qu¨¦ votaban. Lo est¨¢n comprobando ahora, cuando se ha volcado ya el nuevo texto definitivo y han observado, por ejemplo, la redacci¨®n del art¨ªculo 10 sobre el r¨¦gimen de incompatibilidades. En el primer apartado se espec¨ªfica que "no podr¨¢ desempe?arse m¨¢s de un cargo territorial de presidente o secretario general del partido, ni acumularse a ¨¦ste m¨¢s de un cargo de representaci¨®n institucional, local, auton¨®mica o nacional". Luego se precisa que s¨ª se podr¨¢ compaginar alguno de esos puestos con la funci¨®n de senador pero no de diputado en el Congreso o de eurodiputado. El PP ha creado una oficina para velar por el cumplimiento de estas ¨®rdenes pero permitir¨¢ excepciones extraordinarias que ser¨¢n aprobadas por el Comit¨¦ Ejecutivo Nacional.

En las estructuras territoriales del PP ha ca¨ªdo como una bomba esa redacci¨®n porque podr¨ªa forzar la salida de una docena de presidentes provinciales en los pr¨®ximos congresos y la mayor¨ªa de ellos no quieren dejar ese cargo. La direcci¨®n nacional tiene la intenci¨®n, de partida, de conceder pocas excepciones y de hecho el propio nuevo coordinador general, Fernando Mart¨ªnez Maillo, se ha visto afectado en primera persona. El viernes pasado acudi¨® a su pueblo, Casaseca de las Chanas, en Zamora, y anunci¨® que deja la responsabilidad de la alcald¨ªa, que gan¨® hace apenas a?o y medio. Antes ya hab¨ªa renunciado a la presidencia de la Diputaci¨®n y ahora tiene la intenci¨®n de esperar a la celebraci¨®n de los congresos provinciales del PP para ser relevado en ese puesto.

El caso de Maillo no es ni mucho menos una excepci¨®n. Son numerosos los presidentes provinciales del PP que son tambi¨¦n presidentes de la Diputaci¨®n, alcaldes o senadores y diputados, auton¨®micos y nacionales. El sorprendente respaldo en el 18 Congreso Nacional a la enmienda antiCospedal se bas¨® en ese malestar de los cuadros y bases de la organizaci¨®n.

En la propia Castilla-La Mancha, adem¨¢s del caso de compatibilidades de Cospedal, est¨¢ el de Arturo Garc¨ªa Tiz¨®n, de 70 a?os, que es concejal en Toledo, diputado nacional por esa circunscripci¨®n y presidente provincial. Quiere dejar ese cargo en el pr¨®ximo congreso. En Castilla y Le¨®n sucede lo mismo con el actual presidente del PP en Le¨®n, Eduardo Fern¨¢ndez Garc¨ªa, que adem¨¢s de otros cargos locales es parlamentario nacional.

El asunto de las incompatibilidades siempre ha sido conflictivo en el PP de Andaluc¨ªa. Su presidente actual, Juan Manuel Moreno, ha sido uno de los que m¨¢s se ha destacado por intentar poner algo de orden en ese tema, exigiendo su renuncia incluso a alcaldes que eran diputados y senadores, y ahora quiere seguir en esa l¨ªnea en los congresos regionales y provinciales de ese territorio. El problema es que los presidentes provinciales perjudicados, en este caso los m¨¢ximos responsables del partido en C¨¢diz, Antonio S¨¢nz; C¨®rdoba, Jos¨¦ Antonio Nieto; y Jaen, Jose Enrique Fern¨¢ndez de Moya, no quieren dejarlo. Sanz es en la actualidad delegado del Gobierno en Andaluc¨ªa, Nieto secretario de Estado de Seguridad, y Moya secretario de Estado de Hacienda. A los dos ¨²ltimos, adem¨¢s, se les considera muy pr¨®ximos a Cospedal frente a un Moreno al que se sit¨²a de cara al futuro entre los apoyos de Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa.

Un escenario parecido ocurre en otros territorios como Catalu?a. El nuevo delegado del Gobierno, Enric Millo, es ahora presidente del PP en Girona; y el nuevo portavoz en el parlamento catal¨¢n, Alejandro Fern¨¢ndez, es presidente del PP en Tarragona y primer teniente de alcalde de esa capital.

El criterio general de la direcci¨®n nacional del PP es que no se puede ser un alto cargo del partido a nivel provincial y tener al mismo tiempo una funci¨®n institucional o ejecutiva o ser diputado nacional. La ¨²nica duda a¨²n por resolver de la docena de casos directamente afectados se centra en los presidentes del PP que son ahora delegados del Gobierno, porque se entiende que ese rango no tiene expresamente labores ejecutivas.