Los votantes socialistas prefieren una alianza con Ciudadanos

El trabajo de campo del ¨²ltimo sondeo de Metroscopia se realiz¨® entre el 14 y el 18 de julio, por lo que no recoge el efecto que hubiera podido tener en el ¨¢nimo de los votantes la declaraci¨®n del presidente del Gobierno en calidad de testigo en el juicio de la G¨¹rtel. Aun as¨ª, mantiene el escenario dibujado desde finales de abril: cuatro grandes fuerzas pol¨ªticas acaparan casi el 90% de la estimaci¨®n de voto. En primer lugar se sit¨²a el PP (26,9%), que mejora incluso su resultado en 1,4 puntos respecto al anterior sondeo del 2 de julio. Mariano Rajoy cierra el curso pol¨ªtico con un aumento de la fidelidad de sus votantes y cierto freno en la fuga de votos hacia Ciudadanos. Pedro S¨¢nchez consolida la segunda posici¨®n (22%), e incluso mejora en cuatro d¨¦cimas su cifra anterior, aunque sigue por debajo dela estimaci¨®n de voto que lleg¨® a obtener poco despu¨¦s de su reelecci¨®n como secretario general del PSOE (22,8%).

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Como viene ocurriendo en los ¨²ltimos meses, el PSOE mantiene su capacidad de ara?ar votos de Podemos, pero sigue experimentando una fuga ¡ªmenor, en todo caso¡ª hacia Ciudadanos. Pablo Iglesias, en tercer lugar, pierde casi un punto. La fidelidad de sus votantes se ha reducido, debido en gran parte a la buena imagen de que goza entre muchos de ellos la figura de S¨¢nchez. Albert Rivera contin¨²a ocupando la cuarta posici¨®n, pero por tercer mes consecutivo logra una estimaci¨®n superior al 18% (18,5%).

Al igual que el l¨ªder del PSOE, Rivera goza de un aprecio mayor entre sus votantes que la propia marca de su partido. Mucho m¨¢s llamativo el caso de S¨¢nchez, que supera en 13 puntos porcentuales (66%) en valoraci¨®n a la propia marca PSOE (53%). En el caso del l¨ªder de Ciudadanos, la diferencia es de siete puntos a favor de Rivera. Tanto Rajoy como Iglesias mantienen entre los suyos un nivel de aprobaci¨®n pr¨¢cticamente id¨¦ntico al de las siglas.

La coalici¨®n preferida

Con los resultados de esta encuesta, ning¨²n partido ser¨ªa capaz de gobernar en solitario si se celebraran nuevas elecciones. Por eso, aunque nunca haya existido un experimento as¨ª en la historia reciente de Espa?a, la idea de una futura coalici¨®n de Gobierno sigue viva. Y la opci¨®n favorita en el conjunto de los electores, si bien con un escaso apoyo del 31%, ser¨ªa la del PSOE con Podemos. Muy de cerca, como segunda elecci¨®n, le seguir¨ªa una posible alianza gubernamental entre el Partido Popular y Ciudadanos. Pero estas cifras responden al promedio total de las respuestas entre los votantes de todos los partidos. Y en el caso de los de Podemos, su apoyo a una coalici¨®n con S¨¢nchez es abrumador: un 82%.

Es este entusiasmo masivo de una parte el que explica que en el c¨®mputo general aparezca como primera opci¨®n esa coalici¨®n. Si se escarba en las interioridades de cada grupo electoral, se aprecia que la realidad es otra. Entre los votantes socialistas, el principal deseo apunta a una alianza con Ciudadanos (51%). Entre los seguidores de Rivera, son mayor¨ªa los que prefieren estrechar lazos con el PP (47%) y, a cierta distancia, con el PSOE (37%). Y entre la masa de votantes de Mariano Rajoy, la opci¨®n mayoritaria es la de sumar con Ciudadanos (66%), y en segundo lugar, como dato llamativo, resucitar la idea de una Gran Coalici¨®n con el PSOE (28%).

La posibilidad de construir coaliciones tiene mucho que ver con el constante trasvase de votos que siguen reflejando las encuestas, que muestran unos electores ya no tan fieles a sus siglas como anta?o. Un 11,5% de votantes de Unidos Podemos estar¨ªa ahora dispuesto a votar al PSOE. Un 8,2% de seguidores de Rajoy votar¨ªan hoy por Rivera. Una situaci¨®n que se da mucho menos a la inversa. Solo un 3,1% de votantes del PSOE, o un 3,2% de Ciudadanos, har¨ªan el camino de vuelta.