El PSOE y la cuadratura de la plurinacionalidad

La Espa?a plurinacional, concepto propuesto por el secretario general del PSOE, Pedro S¨¢nchez, en la b¨²squeda de una soluci¨®n a la crisis territorial con epicentro en Catalu?a, mantiene un gran interrogante: ?Cu¨¢ntas naciones hay entonces en Espa?a? Y otros relacionados, como por ejemplo: ?Esa idea de naci¨®n tiene solo un componente cultural y sentimental o sin pretenderlo puede servir de excusa al independentismo, en un momento cr¨ªtico en Espa?a por el desaf¨ªo lanzado por la Generalitat y el Parlamento de Catalu?a? El PSOE tratar¨¢ de dar respuesta este lunes a las inquietudes internas y extramuros del partido presentando el paquete de iniciativas legislativas que va a llevar al Congreso, y que ya fueron esbozadas en la Declaraci¨®n de Barcelona del pasado julio, un texto que se anunci¨® como una ¡°oferta pol¨ªtica¡± para evitar que se produzca el ¡°choque de trenes¡±.

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Para ¡°revertir¡± los ¡°efectos perniciosos de cinco a?os de ausencia de pol¨ªtica y de di¨¢logo entre los Gobiernos de Espa?a y de la Generalitat¡±, los socialistas plantean ¡°profundizar en el autogobierno¡± de Catalu?a. Por ejemplo, con la ¡°culminaci¨®n del traspaso de las transferencias pendientes y los recursos necesarios¡± para hacerlas efectivas, como en salvamento mar¨ªtimo y protecci¨®n civil. Otros remedios que proponen son ¡°recuperar¡± el nivel de inversi¨®n del Estado y finalizar el proyecto ferroviario del Corredor Mediterr¨¢neo.

En todo caso, y a la espera del recorrido parlamentario que tengan esas iniciativas, EL PA?S ha preguntado a los dirigentes territoriales del PSOE por su interpretaci¨®n de la Espa?a plurinacional, concepto que el partido aprob¨® en su congreso de junio y que deja varios cabos sueltos: ?En qu¨¦ se distingue la naci¨®n de la nacionalidad, ya contemplada en la Constituci¨®n? ?Cu¨¢ntas naciones hay en Espa?a?

Resolver o avivar la crisis

¡°?Contando a Tartesos o sin contarla?¡±, responde con iron¨ªa Javier Lamb¨¢n, presidente de Arag¨®n. ¡°Por favor, como espa?ol, como aragon¨¦s y como socialista, no me siento concernido de ninguna manera por este debate. Es lo m¨¢s inocuo que puedo decir¡±.

¡°Hay las mismas que en 1978¡±, contesta Guillermo Fern¨¢ndez Vara, presidente de Extremadura y al frente del Consejo Pol¨ªtico del PSOE. ¡°No caigamos en un debate nominalista. Tiene unos componentes sentimentales que hay que gestionar desde la raz¨®n¡±, defiende Ximo Puig, presidente de la Comunidad Valenciana.

Las explicaciones de los l¨ªderes territoriales constatan las dificultades para definir ¡ªy asumir en algunos casos¡ª la plurinacionalidad como clave de b¨®veda de la apuesta de Ferraz por una reforma de la Constituci¨®n que culmine en un Estado federal. El resultado refleja puntos de vista opuestos entre algunos de los principales l¨ªderes socialistas, divididos entre quienes ven en el proyecto una oportunidad para terminar con las tensiones territoriales de Espa?a y quienes temen que precisamente las aviven.

¡°Nuestro pa¨ªs es plurinacional de manera obvia¡±, dice Carmen Calvo, miembro de la direcci¨®n del PSOE y para quien naci¨®n y Estado ¡°no son equiparables sino que son distintas realidades¡±. ¡°Espa?a es un Estado ¨²nico con una unidad territorial incuestionable y un ¨²nico sujeto de soberan¨ªa, que son todos los espa?oles¡±, sentencia. Partiendo de esta premisa, Calvo subraya que ¡°existen sentimientos de pertenencia de diferente intensidad¡±. ¡°Pueden ser distintos por razones culturales o hist¨®ricas, pero en un Estado se pueden tener diferentes sentimientos acerca de la naci¨®n¡±, alega.

La plurinacionalidad reabre las disensiones que intent¨® cerrar la Declaraci¨®n de Granada de 2013, consensuada tras interminables debates por los socialistas durante el mandato de Alfredo P¨¦rez Rubalcaba. Las discrepancias con la l¨ªnea oficial del PSOE existen, aunque se han difuminado despu¨¦s de la derrota de Susana D¨ªaz en las primarias de mayo. La presidenta de Andaluc¨ªa y secretaria general de la principal federaci¨®n declin¨® pronunciarse para este reportaje. Su silencio es, en s¨ª mismo, un mensaje.

¡°Me siento muy c¨®moda con el art¨ªculo 2 de la Constituci¨®n¡±, se limit¨® a decir D¨ªaz, frente a la apuesta de S¨¢nchez por la plurinacionalidad, en el congreso federal. El resto de dirigentes cr¨ªticos con S¨¢nchez tampoco tienen previsto dar la batalla, y menos si D¨ªaz no lo hace. Se han replegado en sus territorios. La prioridad son sus procesos congresuales.

La soberan¨ªa reside ¡°en el conjunto del pueblo espa?ol, de acuerdo con los art¨ªculos 1 y 2 de la Constituci¨®n¡±, recogen las resoluciones del 39? congreso socialista del pasado junio. ¡°La unidad del Estado¡± se mantiene en la nueva propuesta, pero se a?ade: ¡°Perfeccionando el car¨¢cter plurinacional del mismo¡±. Lo que no aparece por ning¨²n lado es la Espa?a ¡°naci¨®n de naciones¡±, f¨®rmula en la que S¨¢nchez insisti¨® durante la campa?a de las primarias, refiri¨¦ndose a ¡°naciones culturales¡± y no pol¨ªticas cuya ¡°singularidad¡± debe ser reconocida.

¡°Naci¨®n jur¨ªdico-constitucional hay una sola. Lo mismo digo si la llamamos naci¨®n pol¨ªtica, c¨ªvica o de ciudadanos¡±. Es la perspectiva de Javier Fern¨¢ndez, presidente de Asturias y de la gestora que dirigi¨® el PSOE entre la dimisi¨®n de S¨¢nchez como secretario general y su reelecci¨®n en las primarias. ¡°En cuanto a lo que la Constituci¨®n llama nacionalidades, que se puede interpretar como naciones culturales, el t¨¦rmino ha sido pol¨¦mico antes incluso de que Renan se preguntara lo que era en 1882. Yo tengo una idea muy poco nacionalista de naci¨®n¡±, desarrolla Fern¨¢ndez. ¡°Tenemos que terminar el edificio, se dej¨® sin concluir con la redacci¨®n del art¨ªculo 2 de la Constituci¨®n, que indica que Espa?a est¨¢ formada por nacionalidades y regiones. Reconozcamos esa plurinacionalidad que la Constituci¨®n ya reconoc¨ªa¡±, apunta por su parte el extreme?o Fern¨¢ndez Vara.

¡°La naci¨®n es un sentimiento, una realidad identitaria, emocional, que hay que reconocer¡±, expresa Francina Armengol, presidenta de Baleares. Y subraya: ¡°Es indiscutible que en Catalu?a hay un sentimiento de naci¨®n, y en la misma situaci¨®n estar¨ªa el Pa¨ªs Vasco¡±. La reflexi¨®n de Miquel Iceta, primer secretario del PSC, es que, ¡°como la naci¨®n tiene que ver con un sentimiento, debe decidir cada autonom¨ªa la denominaci¨®n que mejor se ajusta a la voluntad mayoritaria de sus gentes¡±. ¡°Hay cosas que es dif¨ªcil regular por ley y debe regular cada Parlamento auton¨®mico¡±, opina.

¡°Hay comunidades que por razones culturales, hist¨®ricas o ling¨¹¨ªsticas tienen ese car¨¢cter de naci¨®n que reconoce el Consejo de Europa sin que esto presuponga el derecho a constituirse en Estado¡±, comparte Idoia Mendia, secretaria general del PSE-EE. La impresi¨®n de Francisco Oc¨®n, secretario general del PSOE de La Rioja, es que ¡°ser¨ªa de necios negar que [la identificaci¨®n con una naci¨®n] es un hecho evidente en Catalu?a, Galicia y Euskadi¡±. Oc¨®n cree que el n¨²mero de naciones en Espa?a ¡°se debe englobar dentro de la reforma de la Constituci¨®n, que ni siquiera recoge los nombres de las comunidades aut¨®nomas¡±.

Armengol incide en que la regi¨®n que gobierna se denomina en su Estatuto ¡°nacionalidad hist¨®rica¡±. ¡°Y eso se hizo en el Gobierno de [JAUME][Jaume] Matas, del PP¡±, remarca. El Estatuto de la Comunidad Valenciana recoge tambi¨¦n la condici¨®n de nacionalidad hist¨®rica.

En lo que s¨ª coinciden todos los dirigentes del PSOE que han atendido a este diario es en que el reconocimiento de naci¨®n no puede contribuir en modo alguno a la diferencia entre los ciudadanos en funci¨®n de d¨®nde residan. Delimitar las competencias de las diferentes Administraciones es una de las cuestiones cruciales para evitar la desigualdad por los servicios recibidos en un modelo federal. ¡°Ser¨¢n iguales¡±, zanja Oc¨®n.

¡°Las competencias que garantizan la igualdad de los ciudadanos, vivamos en el territorio que vivamos, ser¨¢n del Estado federal. Las que respondan al sentimiento de identidad territorial quedar¨¢n dentro de la competencia de los territorios. Es b¨¢sicamente el modelo auton¨®mico pero perfeccionado y poniendo en marcha mecanismos federales que obligan a la lealtad, coordinaci¨®n y solidaridad entre todos¡±, indica Carmen Calvo.

¡°La aprobaci¨®n por el ¨²ltimo congreso del PSOE del t¨¦rmino Estado plurinacional no lleva aparejado ning¨²n estatus especial para las comunidades que adquieran el reconocimiento de naci¨®n¡±, advierte Fern¨¢ndez. El presidente asturiano se muestra preocupado por ¡°la confusi¨®n¡± que seg¨²n ¨¦l la plurinacionalidad ¡°induce¡± y ¡°las expectativas que genera para los que piensan que tener la categor¨ªa de naci¨®n o nacionalidad o regi¨®n abre una din¨¢mica semejante a la de las competiciones deportivas: Primera Divisi¨®n, Segunda...¡±. ¡°Hay que tener cuidado en que las distintas visiones de Espa?a nos puedan llevar a distintas visiones del Estado, que nos hagan evolucionar m¨¢s que hacia un Estado federal hacia uno diferencial no solo en lo cultural sino en lo econ¨®mico y fiscal¡±, concluye sobre las posibles consecuencias jur¨ªdicas y competenciales del reconocimiento de naci¨®n frente a una autonom¨ªa.

Estado asim¨¦trico

¡°Espa?a ya es un pa¨ªs asim¨¦trico en temas competenciales, de financiaci¨®n¡­ No reconocerlo es no ver la realidad¡±, interviene Armengol. No obstante, la presidenta de Baleares apremia a clarificarlo: ¡°La Constituci¨®n tiene que fijar nominalmente, competencialmente y desde el punto de vista financiero lo que tiene cada territorio¡±. La dirigente cree que el Estado debe garantizar los servicios comunes y dar capacidad de decisi¨®n a los territorios. ¡°La soluci¨®n es la corresponsabilidad dentro del Estado federal... Estamos en un Estado donde desde el poder central se decide todo. El problema de Espa?a es que no existen unos ¨®rganos de Estado federal adecuados¡±. Como ejemplo, Armengol pone el Senado, que no es la C¨¢mara territorial que tantos demandan, o el control que el Gobierno tiene del Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera.

Mendia tambi¨¦n insta a la ¡°definici¨®n clara¡± de las competencias exclusivas del Estado. Para la secretaria general del PSE-EE, defender la igualdad de todos los espa?oles ¡°no equivale a considerar imprescindible un sistema de financiaci¨®n homog¨¦neo¡±. ¡°Ahora, es necesario un sistema de financiaci¨®n justo con todos los integrantes de ese Estado federal¡±, finaliza. ¡°El problema es el centralismo. Hay que ir hacia un Estado federal que garantice los servicios p¨²blicos en igualdad a todos los ciudadanos¡±, sintetiza Puig.

La variedad de opiniones corrobora el reto may¨²sculo de articular un Estado federal donde cada uno ¡°se pueda sentir espa?ol como quiera pero sin distinciones entre ciudadanos¡±, dice Fern¨¢ndez Vara. De ah¨ª, en parte, la llamada a la mesura de Iceta. ¡°Es absurdo ponerse a discutir sobre lo que ser¨¢ el final de un largo proceso de negociaci¨®n. Es dif¨ªcil que las formulas aparezcan al principio. Lo normal es que lo hagan al final, cuando hay consenso¡± con los dem¨¢s partidos, conf¨ªa el primer secretario del PSC.