El expresidente de Murcia declara como imputado por tercera vez en un a?o
El instructor investiga si Pedro Antonio S¨¢nchez fraccion¨® contratos de obras p¨²blicas para no sacarlos a concurso
Pedro Antonio S¨¢nchez,?ex presidente de Murcia, ha declarado este viernes en calidad de investigado ¡ªantigua figura de imputado¡ª, por tercera vez en el ¨²ltimo a?o. Tras sentarse ante el juez acusado de media docena de delitos en los casos Auditorio y P¨²nica, S¨¢nchez se enfrenta ahora al caso Pasarelas, que estudia si se fraccionaron contratos de manera fraudulenta para adjudicarlos a dedo.
El caso se remonta a sus a?os como alcalde en el municipio de Puerto Lumbreras, un cargo que ocup¨® entre 2003 y 2013, y est¨¢ estrechamente relacionado con el caso Auditorio, a ra¨ªz del cual el juez abri¨® esta pieza separada. S¨¢nchez ha llegado a los juzgados de Lorca a las ocho y media de la ma?ana, nada m¨¢s abrirse sus puertas, y ha abandonado los juzgados dos horas m¨¢s tarde, sin hacer ninguna declaraci¨®n a los periodistas m¨¢s all¨¢ de un escueto "Buenos d¨ªas, gracias".
El juez instructor del caso, Antonio Morente, investiga si S¨¢nchez cometi¨® alguna irregularidad al adjudicar en 2007 el proyecto de rehabilitaci¨®n y embellecimiento de un puente y una pasarela sobre la rambla de Nogalte, unos trabajos que se encargaron al arquitecto Mart¨ªn Lej¨¢rraga, el mismo que construy¨® el auditorio y que tambi¨¦n est¨¢ investigado en ambas causas.
La primera instructora del caso Auditorio, Consuelo Andreo, apreci¨® en su d¨ªa indicios de delito en la forma de contrataci¨®n p¨²blica llevada a cabo para esas obras, que se fraccionaron en cinco lotes, siempre por un importe inferior a los 12.020 euros que establece la ley de Contratos como m¨¢ximo para los contratos menores. De esa manera, se adjudicaron a L¨¦jarraga los proyectos sin sacarlos a concurso p¨²blico, aunque todos juntos sumaban una inversi¨®n de 54.500 euros.
La jueza decidi¨® separar esta pieza del caso Auditorio y la investigaci¨®n recay¨® en el juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 3 de Lorca, cuyo titular, Antonio Morente, inco¨® diligencias en julio de 2016 y envi¨® las actuaciones a la Fiscal¨ªa. El ministerio p¨²blico esper¨® hasta enero de 2017 para pedir que se declarase la complejidad del plazo y ampliar as¨ª la fase de instrucci¨®n. El plazo m¨¢ximo para esa solicitud estaba caducado por dos d¨ªas y el juez decidi¨® archivar el asunto. Pero, a finales de noviembre de 2017, la Audiencia Provincial de Murcia orden¨® su reapertura, ampliando de nuevo la tormenta judicial que llev¨® a S¨¢nchez a dimitir como presidente de la comunidad aut¨®noma el 3 de abril de 2017, y como diputado y presidente del PP murciano el 27 de septiembre de ese a?o.
Los casos Auditorio y P¨²nica, que estaban siendo juzgados por el Tribunal Superior de Justicia de Murcia al estar S¨¢nchez aforado, regresaron tras su dimisi¨®n a los tribunales que los instru¨ªan en primera instancia ¡ªa Lorca, el primero, y a la Audiencia Nacional el segundo¡ª y se encuentran a la espera de la apertura de juicio oral.
En el caso Auditorio, el ex presidente est¨¢ acusado de los delitos de fraude, prevaricaci¨®n, malversaci¨®n y falsedad documental por su gesti¨®n durante su etapa de alcalde de la adjudicaci¨®n, ejecuci¨®n y recepci¨®n de un auditorio en Puerto Lumbreras. El edificio se construy¨® con una subvenci¨®n de seis millones de euros concedida por la comunidad aut¨®noma y la obra se recepcion¨® en 2011 a pesar de no estar finalizada.
En cuanto a la operaci¨®n P¨²nica, el juez encuentra indicios de delitos de fraude a ente p¨²blico, cohecho y revelaci¨®n de informaci¨®n reservada que habr¨ªan tenido lugar en 2014, cuando S¨¢nchez era consejero del Gobierno murciano y presuntamente habr¨ªa contactado con empresas de esa trama para contratar con cargo a los presupuestos de su consejer¨ªa trabajos de mejora de su imagen en internet de cara a impulsar su candidatura como cabeza de lista del PP en las elecciones auton¨®micas del a?o siguiente. S¨¢nchez siempre ha defendido que esos contratos no llegaron a materializarse, si bien no ocurri¨® as¨ª porque la trama estall¨® antes.
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