Sexo adolescente en la era del porno online

¡ª ?Porno? S¨ª, s¨ª. Claro que forma parte de la educaci¨®n sexual. A veces es lo ¨²nico que sabe un chaval de 14.

¡ª Los m¨¢s peque?os ahora est¨¢n muy sueltos. Tienen m¨®vil desde muy ni?os y los de 12 ya ven cosas que nosotros no hemos visto hasta hace un a?o o as¨ª.

¡ª Si no hablas con tus padres o con alguien, ves el porno y piensas: pues el sexo es as¨ª.

Un grupo de alumnos de 4? de la ESO del colegio concertado cat¨®lico Santa Mar¨ªa de la Providencia, en Alcal¨¢ de Henares (Madrid), se re¨²nen para hablar de sexo y educaci¨®n sexual a petici¨®n de esta periodista. Tienen 15 y 16 a?os. Est¨¢ presente el profesor de Religi¨®n, a pesar de lo cual los chicos abordan el tema con una naturalidad sorprendente para alguien 25 a?os mayor que recuerda una mentalidad muy distinta en lo que antes era segundo de BUP. A la primera pregunta, si quieren hablar por separado chicos y chicas para sentirse m¨¢s c¨®modos, responden todos con un ¡°Noooo, juntos mejor, no hay problema¡±. Y, efectivamente, durante una hora y media debaten de forma muy relajada. Con algunas risitas, pero sin tapujos.

Algunos mencionan experiencias personales y otros prefieren hacer observaciones generales sobre lo que ven en su grupo de amigos o en su entorno. Casi desde el principio surge una idea en la que inciden una y otra vez: a pesar de las apariencias, a pesar de vivir en un mundo hipersexualizado, a pesar de que en Internet te puedes informar sobre cualquier cosa, hace falta m¨¢s educaci¨®n sexual. Y desde muy pronto.

Los chavales cada vez se inician antes. La ¨²ltima encuesta de la Sociedad Espa?ola de Anticoncepci¨®n, de 2016, solo de mujeres, situaba la edad media de la primera relaci¨®n en los 16,2 a?os para las menores de 20. Sus madres, las mujeres de 45 a 49, la hab¨ªan tenido con 19. Sondeos anteriores del equipo Daphne? cifraban en los 16 a?os el primer coito de chicos y chicas frente a los 17,7 a?os en 2003.

Estos chicos no se las dan de saberlo todo, al contrario. Quieren que les hablen m¨¢s claro, que les den m¨¢s informaci¨®n pr¨¢ctica. Tienen acceso ilimitado a im¨¢genes sexuales expl¨ªcitas y a un universo de clips de porno que aparecen en la pantalla de su smartphone desde que los algoritmos detectan que les puede interesar el tema, pero reconocen que, parad¨®jicamente, no siempre conocen cuestiones b¨¢sicas. La educaci¨®n sexual no est¨¢ en el curr¨ªculum escolar y, como mucho, reciben alg¨²n taller de dos o tres sesiones en algunos cursos. Y esto, no en todos los centros.

'Infoxicaci¨®n' y vaginoplastias

¡°Se da mucho lo que en nuestro ¨¢mbito llamamos ¡®infoxicaci¨®n¡±, opina Noem¨ª S¨¢nchez, psicopedagoga, educadora social y asesora sexual que imparte talleres en institutos y atiende por las tardes las dudas de adolescentes y j¨®venes de 12 a 35 a?os en el Centro de Informaci¨®n, Documentaci¨®n y Asesoramiento Juvenil de la concejal¨ªa de juventud del mismo municipio. ¡°Hay much¨ªsima informaci¨®n, pero intoxicada, que desinforma m¨¢s que informa. Siempre ha habido pornograf¨ªa, pero no es lo mismo comprar una revista o ver una pel¨ªcula de tanto en tanto, como suced¨ªa antes, que tener acceso libre en cualquier momento. Tampoco es lo mismo ir al ordenador, como hace unos a?os, que tener porno en un m¨®vil que va siempre contigo. Yo no estoy en contra, ojo, pero hay que saber lo que se ve, y los chavales no lo saben. Las chicas creen que la depilaci¨®n integral es lo natural porque es lo que se ve en las pel¨ªculas". El porno ha provocado tambi¨¦n que muchas pr¨¢cticas, como el sexo anal, se adelanten.

S¨¢nchez lleva nueve a?os trabajando en estos temas y a su consulta llegan cada tarde adolescentes con todo tipo de dudas y preocupaciones. ¡°Chicos angustiados porque no duran lo que creen que tienen que durar o porque no tienen un pene enorme. O, lo m¨¢s reciente y preocupante: chavalas jovenc¨ªsimas preguntando por cirug¨ªa est¨¦tica genital¡±.

"Los ni?os de 12 a?os est¨¢n muy sueltos. Ven en sus m¨®viles cosas que nosotros? a esa edad no ve¨ªamos", dice un alumno de 16

A los alumnos del colegio de Alcal¨¢ lo de la cirug¨ªa no les suena de nada, pero otros educadores dicen haber recibido la misma consulta. Y el problema es global. En Reino Unido se ha publicado recientemente una gu¨ªa con dibujos sobre las distintas formas que puede tener una vulva para tratar de mostrar a las adolescentes que no hay un ¨²nico canon de normalidad genital. M¨¢s de 200 menores de 18 a?os brit¨¢nicas, seg¨²n cifras del servicio de salud p¨²blico de Reino Unido citadas por la BBC, se sometieron a una labioplastia [una intervenci¨®n quir¨²rgica para cambiar la forma o el tama?o de los labios menores o mayores] entre 2015 y 2016. De ellas, m¨¢s de 150 ten¨ªan menos de 15 a?os. Y en Estados Unidos el fen¨®meno va en aumento. La depilaci¨®n integral impulsada por el porno provoca que las chicas se fijen en cada mil¨ªmetro de su anatom¨ªa y que algunas tengan complejos desde que comienzan a mantener relaciones sexuales.

¡°Me parece importante explicarles lo que es la pornograf¨ªa¡±, contin¨²a S¨¢nchez. ¡°No podemos hacer como si no la vieran, porque es hip¨®crita. Hay que abordarlo y desmontar lo que tienen en la cabeza. Decirles que es una industria y que cada v¨ªdeo es un teatrillo. Que el cuerpo de la mujer se tiene que preparar para el coito. Que no todo el sexo es coital. Que aunque el porno muestre otra cosa, la mujer no tiene porqu¨¦ limitarse a satisfacer los deseos del hombre. Que hay que querer y aceptar el propio cuerpo. En fin, son muchas cosas. Y es complicado, porque soy yo sola frente a lo que han visto durante mucho tiempo, frente a unos estereotipos cada vez m¨¢s fuertes¡±.

La pol¨¦mica de la porno eskola

Hace unos meses se desat¨® una curiosa pol¨¦mica escolar en Vitoria. El Ayuntamiento bec¨® un proyecto de un ilustrador y una sex¨®loga que hab¨ªan creado unas unidades did¨¢cticas para explicar la sexualidad a trav¨¦s de la pornograf¨ªa. Son cuatro unidades con propuestas de actividades que tratan de ¡°reeducar al consumidor de pornograf¨ªa¡±, denunciar el sexismo de la industria, destruir sus roles de g¨¦nero y ¡°ofrecer una visi¨®n del sexo feminista¡±. Algunas, para mayores de edad, proponen incluso ver fotos y v¨ªdeos expl¨ªcitos para comentarlos despu¨¦s. La iniciativa, llamada porno eskola, alarm¨® a una asociaci¨®n de padres y madres de colegios concertados y los autores decidieron cerrar la web en la que colgaban el material. ¡°No sab¨ªamos si nos iban a denunciar, pero preferimos no tener l¨ªos¡±, se?ala la autora, Iratxe Gil. ¡°Desde entonces lo facilitamos a quien nos lo pide, y ha habido inter¨¦s. El porno est¨¢ ah¨ª y lo ven chavales de nueve a?os. Hay que enfrentarse a ello. Creo que al final lo que m¨¢s asust¨® fue el nombre, lo de 'porno eskola¡±.

En el colegio de Alcal¨¢, las chicas dicen que no les gusta el porno. Ellos¡­ que, hombre, que s¨ª, que para qu¨¦ nos vamos a enga?ar. ¡°Es que la mujer est¨¢ sometida y el hombre domina siempre¡±, lamenta una chica. ¡°Nunca mandan ellas¡±. ¡°Bueno, yo no veo mal que una chica vea porno, no s¨¦ por qu¨¦ todas hab¨¦is saltado diciendo que no lo veis¡±, dice otra. A continuaci¨®n se abre un debate sobre la depilaci¨®n integral. Muchas dicen que es higi¨¦nico y necesario porque las mujeres tienen la regla. Otra replica: ¡°Se hace por presi¨®n. Si tienes pelos ya te consideran una guarra, eso es as¨ª. Y te agobias. Pero la verdad es que es solo est¨¦tico. Si t¨² te lavas, no est¨¢s sucia. Los chicos no se depilan y no por eso son unos guarros¡±.

?Cu¨¢ndo empez¨¢is a tener relaciones sexuales completas?

¡ª Entre los 14 y los 16 es lo m¨¢s normal, dir¨ªa yo. A los 14 vas descubriendo y luego ya... a ello.

¡ª A los 14 no tienes mucha idea. Si lo haces es m¨¢s por curiosidad o por quedar bien. Yo creo que es mejor esperar. A los 16 sabes m¨¢s, escuchas experiencias de amigos y aprendes.

¡ª No hay que tener prisa, pero hay veces que te presionan en plan ¡®?todav¨ªa eres virgen?¡¯ Si llevas tiempo con tu novio te llaman estrecha si quieres esperar un poco o le dicen a ¨¦l que ya le vale a su novia, que ya es hora.

¡ª Y si eres chica y te l¨ªas con varios, eres una puta, claro.

¡ª A los chicos tambi¨¦n nos etiquetan. Si no est¨¢s con nadie te llaman ¡°pringao¡± o ¡°maric¨®n perdido¡±.

Homofobia y respeto a la diversidad sexual

?Hay mucha homofobia?

¡ª Yo no he visto tratar mal a nadie, pero esos comentarios se oyen.

¡ª Aunque tambi¨¦n est¨¢ como de moda decir que eres bisexual. Sobre todo en el mundillo m¨¢s perroflauta, m¨¢s inconformista.

No es raro que en talleres de este tipo algunos alumnos pregunten con naturalidad cosas como qu¨¦ tienen que hacer dos chicos o dos chicas para mantener sexo oral seguro entre ellos.

¡°La evoluci¨®n de este tema es curiosa¡±, reflexiona S¨¢nchez. ¡°Por un lado hay mucho respeto a la diversidad sexual y gente muy activista pero por otro a¨²n existe mucha homofobia. Creo que contribuye a ello que la gente mezcla conceptos como sexo, g¨¦nero, identidad sexual y orientaci¨®n sexual. Tambi¨¦n veo un retroceso en la igualdad en las relaciones heterosexuales. A veces me encuentro patrones que son como los de hace 50 a?os, muy machistas".

Ana Mej¨ªa, psic¨®loga, y Mar¨ªa de los ?ngeles Gil, enfermera, llevan los talleres sobre sexualidad para colegios e institutos de Alcal¨¢ de Henares del ¨¢rea de salud, el que han recibido estos chicos. Los ofrecen para tercero y cuarto de la ESO (14 y 15 a?os) y, desde hace unos a?os, tambi¨¦n para sexto de primaria (11). ¡°Vimos que era necesario empezar antes porque los chavales empiezan a recibir mucha informaci¨®n muy pronto y hay que ayudarlos a filtrarla¡±, se?ala Mej¨ªa. ¡°Vivimos en la paradoja de criar chicos inmaduros, hiperprotegidos, pero que por otro lado tienen un acceso ilimitado a la pornograf¨ªa y al sexo desde muy peque?os. Sucede en todos los entornos sociales¡±.

Saber todo y nada

¡°Hay chavales que se van de excursi¨®n en primero de la ESO y meten preservativos en la mochila por si acaso¡±, a?ade Gil. ¡°La vacuna del papiloma humano se ha tenido que ir adelantando porque se ve¨ªa que las chicas ya hab¨ªan tenido relaciones sexuales cuando se la pon¨ªan. Por otro lado, parece que lo saben todo pero luego hay ni?as que no saben que tienen cl¨ªtoris, que la vagina no es por donde sale el pis o que piensan que con la regla no pueden hacer nada. Es curioso que pregunten por tr¨ªos o sexo con animales y que sin embargo no sepan c¨®mo funciona un t¨¢mpax. En los talleres muestran mucho inter¨¦s y tratamos de responderlo todo. No se deben dejar preguntas sin respuesta. Y es b¨¢sico hablar tambi¨¦n de la parte afectiva. Insistimos mucho en que solo tengan relaciones cuando quieran, donde quieran y con quien quieran¡±.

De los 31 colegios p¨²blicos que hay en el municipio, solo un tercio les pide que lleven a cabo los talleres. Lo mismo pasa en el resto del pa¨ªs: m¨¢s all¨¢ de la reproducci¨®n, que se estudia en ciencias naturales, depende de cada centro que haya alg¨²n taller de educaci¨®n sexual o no. En algunos no se da nada. Y, cuando se hacen algunas sesiones, los propios chicos dicen que es insuficiente, que querr¨ªan m¨¢s.

Los expertos coinciden en tres pilares necesarios para avanzar: que los profesionales est¨¦n formados en educaci¨®n afectivo-sexual, la implicaci¨®n de los padres y el colegio, y que esta materia forme parte del curr¨ªculo desde la infancia, como en pa¨ªses como Holanda o Suecia. Que no sea cada centro educativo el que decide si le dedica tiempo o no.

¡°Hace falta una educaci¨®n sexual organizada, estructurada, cient¨ªfica¡±, defiende Juan Madrid, director del Centro Madrid Salud Joven. ¡°Hay que hablar de ello mucho antes. Comenzar a los 14 o 15 a?os, cuando ya han construido las relaciones y los estereotipos de g¨¦nero, no tiene sentido. Hay que subrayar, adem¨¢s, que no hay una pol¨ªtica de salud dirigida a la adolescencia. Al adolescente no le atiende nadie. Los pediatras como mucho llegan hasta los 14 a?os, y los m¨¦dicos de familia no les hacen mucho caso. Est¨¢n bastante abandonados y no se tiene en cuenta que la mayor¨ªa de los problemas, enfermedades de transmisi¨®n sexual, embarazos no deseados y abortos son evitables¡±.

"El porno lo condiciona todo", opina una experta. "Las chicas van con depilaci¨®n integral porque es lo que se ve en las pel¨ªculas y hay algunas que incluso preguntan por cirug¨ªa est¨¦tica genital con 15 o 16 a?os"

El Centro Madrid Salud Joven ofrece talleres de sexualidad a colegios e institutos del distrito centro de la capital. Pero, de nuevo, muchos no lo piden. La Ley de salud sexual y reproductiva y de la interrupci¨®n voluntaria del embarazo, de 2010, que estableci¨® un sistema de plazos para abortar, obligaba en su art¨ªculo 9 a que la formaci¨®n en salud sexual y reproductiva se incorporara al sistema educativo, pero esto jam¨¢s se ha llevado a cabo.

El pasado lunes uno de estos cursos reuni¨® a un grupo de primero de Bachillerato de un instituto p¨²blico madrile?o. Son 26 chicos de 16 a 18 a?os. Igual que en el otro cole, dicen que un mayor respeto a la diversidad sexual convive con una cierta homofobia, y que la desigualdad entre chicos y chicas est¨¢ ah¨ª. "La verdad es que nosotras mismas nos machacamos diciendo cosas como 'esta es una guarra que se abre de piernas a la primera", se queja una chica. "Esto no deber¨ªa ser as¨ª. M¨ªralos a ellos, que se dicen 'ole ah¨ª, eres el puto amo".

Solo seis han ido alguna vez a un centro para hacer consultas sobre sexualidad a pesar de que tambi¨¦n reconocen que no tienen tanta informaci¨®n como querr¨ªan. ¡°Hay gente que no usa condones porque no sabe d¨®nde conseguirlos y le da verg¨¹enza ir a la farmacia¡±, dice una chica. Algunos han hecho la ESO en el mismo instituto, pero otros vienen de otros centros. ¡°Yo he estudiado en un colegio de monjas y a m¨ª nadie me ha hablado nunca de esto¡±, se queja una adolescente de larga melena. Juan Madrid propone a una chica y a dos chicos, por separado, dibujar una vulva con todas sus partes. Los tres superan la prueba razonablemente bien.

"Queremos fuentes fiables"

Igual que los chavales del otro grupo, todos piden que se les hable de sexo m¨¢s y sin tapujos, y que haya m¨¢s espacios en los que puedan plantear sus dudas. Dicen que quieren "fuentes fiables".

¡ª Hay chicas que toman la p¨ªldora del d¨ªa despu¨¦s sin conocer sus efectos secundarios, sin saber que no es un m¨¦todo anticonceptivo que puedan usar todo el rato. Una amiga m¨ªa tuvo problemas con eso, dice uno de los alumnos de Alcal¨¢.

?Hay mucho sexo sin protecci¨®n?

¡ª Pues s¨ª, la verdad es que s¨ª. O sea, no siempre. Pero, sobre todo cuando has bebido, no tienes muy presentes los riesgos. Aunque los conozcas, no est¨¢s muy mentalizado.

¡ª Hay que hablar de todo. De sentimientos, de machismo, de buen trato y tal. Pero tambi¨¦n de lo otro. Que nos ense?en a poner un cond¨®n, que nos digan qu¨¦ hacer si se rompe, que nos hablen no solo de sexo heterosexual sino tambi¨¦n chico-chico y chica-chica. Y deber¨ªan hacer los talleres antes para que los m¨¢s peque?os empiecen a hacer las cosas bien desde el principio.

?Qu¨¦ tendr¨ªa que saber un chaval o chavala de 12?

¡ªQue no tiene que darse prisa. Que cuando lo haga sea con alguien con quien tenga confianza. Que no lo haga por presi¨®n. Que no presione nunca a la otra persona. Y deber¨ªan explicarle c¨®mo hacerlo de forma segura, qu¨¦ puede ocurrir si se despista y qu¨¦ tiene que hacer en ese caso.

¡ª ?A los padres les dir¨ªa que no se corten. A m¨ª me habr¨ªa gustado hablar m¨¢s con ellos. Pero no en plan que con 15 a?os te digan ¡®tenemos que hablar¡¯, como conversaci¨®n solemne. En ese momento ya ni te vale y adem¨¢s da verg¨¹enza. Si se trata con naturalidad siempre, yo creo que es mejor. El padre de una chica de la clase, que es m¨¦dico, vino un d¨ªa y nos habl¨® de todo de forma clara. La verdad es que estuvo genial.

?Entonces os gustar¨ªa hablar m¨¢s de sexo en clase y en casa?

En ambos grupos responden al un¨ªsono: ?S¨ª!