El tr¨¢fico mar¨ªtimo asedia a la marsopa en la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica
Un estudio cient¨ªfico alerta de que este cet¨¢ceo no puede regresar a su h¨¢bitat en las costas atl¨¢nticas por el impacto humano
?Por qu¨¦ la marsopa com¨²n es cada d¨ªa menos com¨²n en nuestras costas? La respuesta la ha dado un equipo de cient¨ªficos que investigan la distribuci¨®n de estos cet¨¢ceos al descubrir que el impacto humano causado por el tr¨¢fico mar¨ªtimo de embarcaciones es el principal factor de que esta especie (Phocoena phocoena) no pueda regresar a su h¨¢bitat natura en aguas de la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica, poniendo en riesgo la supervivencia de uno de los cet¨¢ceos m¨¢s peque?os y vulnerables del planeta.
El estudio lo acaba de publicar la prestigiosa revista de biolog¨ªa marina, Marine Biology, en el que los investigadores del Bottlnose Dolphin Research Institute (BDRI) de O Grove (Pontevedra), concluyen que este factor ambiental incide directamente en la supervivencia de este misterioso mam¨ªfero por lo que se encuentra en clara regresi¨®n en nuestras costas. Se trata del estudio cient¨ªfico m¨¢s detallado a nivel internacional sobre los factores (tanto ambientales como antr¨®picos) que condicionan la distribuci¨®n y abundancia de la marsopa com¨²n.
El trabajo se llev¨® a cabo en la costa espa?ola, principalmente en el sur de Galicia, zona considerada como un reducto para esta especie, pero no exenta de amenazas tal y como muestra el estudio que supone uno de los m¨¢s amplios y minuciosos realizados hasta ahora. Los bi¨®logos han empleado cuatro a?os consecutivos en hacer el diagn¨®stico sobre este vulnerable animal y han recorrido m¨¢s de 9.000 kil¨®metros para observar hasta setenta grupos de marsopas que llegan a congregar un promedio de 4,8 individuos, aunque incluso se ha logrado avistar concentraciones de 25 ejemplares.
Estos grupos son diez veces menos frecuentes que los de delfines mulares de los que se han podido observar hasta 712 grupos en torno a las aguas gallegas.
Si el a?o pasado, el BDRI confirmaba el regreso a las costas gallegas de ballenas azules, hoy los cient¨ªficos de este instituto, cuya base de operaciones est¨¢ en la r¨ªa de Arousa, hacen hincapi¨¦ en la vulnerabilidad de la marsopa com¨²n y su delicada situaci¨®n actual, recientemente considerada una subespecie aislada gen¨¦ticamente de las poblaciones del norte de Europa. ¡°Es un claro ejemplo de la regresi¨®n que sufren las poblaciones de cet¨¢ceos en nuestros mares que podr¨ªa compararse perfectamente con la situaci¨®n que vive otra marsopa, la vaquita, en M¨¦xico, y que se encuentra a punto de extinguirse¡±, alertan los bi¨®logos.
Los resultados del estudio muestran, al contrario de lo que se pensaba hasta ahora, que la marsopa com¨²n era una especie predominantemente costera y que prefieren aguas con m¨¢s de 100 metros de profundidad y en numerosas ocasiones se aventuran hasta el borde de la plataforma continental. ¡°Ello no indica que las marsopas no visiten con frecuencia el interior de las r¨ªas y las aguas costeras, pero s¨ª que existe una tendencia a mantenerse alejadas de la costa por el impacto humano causado por el tr¨¢fico de embarcaciones de motor¡±, constata el estudio.
Las marsopas evitan estar presentes en zonas de alta concentraci¨®n de embarcaciones a motor posiblemente por la contaminaci¨®n ac¨²stica y comportamiento asustadizo de la especie. Igualmente, se pudo confirmar que los delfines mulares no tienen nada que ver en la distribuci¨®n de las marsopas ya que se pudieron ver grupos de delfines y marsopas compartiendo el territorio sin agresividad alguna entre ambas especies.
Los cient¨ªficos han podido conocer mejor el grado de vulnerabilidad de una de las especies de cet¨¢ceos m¨¢s amenazadas a nivel nacional, aportando una informaci¨®n de gran valor para las instituciones responsables de la gesti¨®n de las actividades humanas en aguas ib¨¦ricas para contribuir a la protecci¨®n y conservaci¨®n de esta especie tan peque?a como fr¨¢gil.
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