?Por qu¨¦ fregona solo puede ser ella y ¨¦l no?
Alumnos de un instituto de Torremolinos piden a la RAE que modifique la acepci¨®n despectiva del t¨¦rmino y use el g¨¦nero neutro
¡°Utensilio para fregar los suelos sin necesidad de arrodillarse¡±, aclara el Diccionario de la Real Academia Espa?ola (RAE) sobre la fregona. ?Qui¨¦n no sabe la definici¨®n del artilugio de limpieza? Pero hay otra acepci¨®n oficial de la palabra que ha llamado la atenci¨®n de unos alumnos del IES Los Manantiales de Torremolinos, en M¨¢laga, que es tachada de despectiva en el diccionario y que ellos consideran machista: ¡°Mujer tosca e inculta¡±. Hay otra m¨¢s: ¡°Criada que sirve en la cocina y friega¡±. Las dos, en femenino, es decir, el t¨¦rmino peyorativo se refiere siempre a las mujeres, nunca a los hombres.
Este ¡°micromachismo¡± ha sido cazado por los estudiantes de la asignatura Cambios Sociales y de G¨¦nero de dos cursos de Tercero de la ESO del centro educativo malague?o, que trabajan durante el curso en la b¨²squeda de vocablos con significados negativos para la mujer. ¡°Se?o, ?has visto la definici¨®n que viene de la palabra fregona?¡±, le dijeron hace pocas semanas a la profesora que imparte la materia, Francisca Escorza. La docente hab¨ªa hablado en clase del triunfo de los alumnos de Primero de Bachillerato del instituto canario de La Orotava, que en apenas un mes consiguieron gracias a un v¨ªdeo que la Real Academia modificara la quinta acepci¨®n de la palabra f¨¢cil, de tal forma que ya no se refiere a la mujer, sino a la persona que ¡°se presta sin problemas a mantener relaciones sexuales¡±.
As¨ª que los escolares de Torremolinos decidieron hacer algo similar y han puesto en marcha una campa?a que pide ¡°a los se?ores de la RAE¡±, a trav¨¦s de las redes sociales, que var¨ªen estas dos definiciones despectivas porque es ¡°injusto¡± e ¡°incoherente¡±. ¡°Si ella es fregona, todos somos fregona¡±, resume uno de los chicos en el v¨ªdeo grabado con el tel¨¦fono m¨®vil de una alumna en el patio del instituto. ¡°La fregona sirve para limpiar, no para humillar¡±, dice otro estudiante. El mensaje que lanza el medio centenar de alumnos es alto y claro: ¡°No somos fregonas¡±.
El objetivo no es borrar del diccionario ese sentido del t¨¦rmino, sino que desaparezca la vinculaci¨®n exclusiva con la mujer y que se utilice el g¨¦nero neutro. Escorza pone el ejemplo de besugo, vocablo masculino que en su segunda definici¨®n se refiere a una ¡°persona torpe o necia¡±. Pues lo mismo con fregona. ¡°?Por qu¨¦ no evitar que esa acepci¨®n negativa recaiga sobre un solo g¨¦nero?¡±, contin¨²a la docente. Para sostener la campa?a de los chavales, la profesora ha remitido una carta a la Real Academia para que comprenda ¡°la esencia¡± de la propuesta. ¡°Utilizando el g¨¦nero neutro en este tipo de definiciones trabajamos juntos en la eliminaci¨®n de los micromachismos que desgraciadamente a¨²n perviven en nuestra sociedad¡±, dice la misiva.
La respuesta de los acad¨¦micos, de momento, no es alentadora. La contestaci¨®n, muy cordial, ha sido que el diccionario pretende recoger el l¨¦xico de la lengua hablada ¡°en Espa?a y en los pa¨ªses hisp¨¢nicos¡± e incluye las palabras que ¡°tienen o han tenido¡± uso en este idioma, y lo hace ¡°en el g¨¦nero en el que se documentan¡±. ¡°Es requisito fundamental para el mantenimiento, la inclusi¨®n o la enmienda de voces que corresponden a las distintas ¨¢reas y pa¨ªses de habla hispana, que su empleo est¨¦ suficientemente documentado en textos [¡] que deben abarcar, adem¨¢s, un periodo de tiempo de al menos seis o siete a?os¡±, ha respondido la RAE.
Escorza ve fundamental la divulgaci¨®n de la petici¨®n, se est¨¦ a favor o en contra. ¡°Se difunde y se crea reflexi¨®n, porque a veces no nos damos ni cuenta. Y si se reflexiona, ya es importante¡±, precisa la docente. Aplaude el debate y da la bienvenida, aunque la posici¨®n sea contraria, a comentarios como el de Arturo P¨¦rez Reverte en su cuenta de Twitter. ¡°Ahora le tocar¨¢, supongo, a La ilustre fregona, del universalmente machista Cervantes. Dudo entre recomendar cambiarle el t¨ªtulo (se aceptan sugerencias) o que directamente sea quemado el libro en los patios de los colegios¡±, escribi¨® el escritor y acad¨¦mico hace unos d¨ªas sobre esta iniciativa del instituto malague?o.
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