Los nacionalistas aminoran la presi¨®n sobre el Gobierno de S¨¢nchez
El traslado de los presos etarras a c¨¢rceles cercanas al Pa¨ªs Vasco y el traspaso de la gesti¨®n de la Seguridad Social se estudiar¨¢ en comisiones bilaterales sin plazo
El PNV, de manera evidente, y los nacionalistas catalanes, en menor medida, han levantado la presi¨®n de sus demandas sobre el Gobierno tras la llegada de Pedro S¨¢nchez a la Presidencia. S¨¢nchez se ha entrevistado este lunes con el lehendakari, ??igo Urkullu. El traslado de los presos etarras a c¨¢rceles cercanas al Pa¨ªs Vasco y el traspaso de la gesti¨®n de la Seguridad Social ¡ªsin tocar la caja ¨²nica¡ª se estudiar¨¢ en comisiones bilaterales sin plazo. El Gobierno descarta que esa demandasobre la Seguridad Social se concrete en esta legislatura.
La reuni¨®n de este lunes entre Pedro S¨¢nchez e I?igo Urkullu en La Moncloa puso en evidencia que el nacionalismo vasco no quiere colocar en una situaci¨®n demasiado inc¨®moda al nuevo jefe de Gobierno. Desde el Ejecutivo catal¨¢n, con actitudes mucho m¨¢s dif¨ªciles y demandas insuperables para el Estado, se apreci¨® tambi¨¦n un aminoramiento de la tensi¨®n durante la breve conversaci¨®n que mantuvieron S¨¢nchez y el presidente catal¨¢n, Quim Torra, el pasado viernes en la inauguraci¨®n de los Juegos Mediterr¨¢neos en Tarragona. Ambos se ver¨¢n en La Moncloa el pr¨®ximo 9 de julio.
S¨¢nchez ha comenzado con Urkullu la ronda de reuniones que va a mantener con todos los presidentes auton¨®micos. La cita con el lehendakari podr¨ªa haber acabado mal si este hubiera planteado a S¨¢nchez a modo de exigencia el traspaso de la gesti¨®n de la Seguridad Social y de las prisiones. No fue as¨ª, sino que ambos quedaron en crear una comisi¨®n bilateral que estudie las 37 transferencias que est¨¢n pendientes de ser asignadas a la Administraci¨®n vasca, seg¨²n visi¨®n unilateral del Pa¨ªs Vasco que Madrid quiere comprobar.
De todas ellas las prioridades est¨¢n en la gesti¨®n de la Seguridad Social y los centros penitenciarios, que forman parte, adem¨¢s, del acuerdo de gobierno de coalici¨®n firmado y en vigor entre el PNV y el PSE-PSOE en el Pa¨ªs Vasco. De todo ello se hablar¨¢ sin tiempo limitado ni previsi¨®n de fechas, seg¨²n reconoci¨® ayer Urkullu tras su reuni¨®n de casi 90 minutos con el presidente del Gobierno.
Aunque Urkullu insisti¨® en que el traspaso que solicita es de ¡°la gesti¨®n¡± de la Seguridad Social y no de la competencia, por lo que no se producir¨ªa una ruptura de la caja ¨²nica, en fuentes gubernamentales se precisa que el asunto es igualmente muy delicado y no est¨¢ entre sus previsiones que pueda llevarse a efecto en esta legislatura. El Gobierno vasco no parece que vaya a hacer de esta demanda su caballo de batalla, como tampoco del traspaso de la gesti¨®n de las c¨¢rceles. No existe esa presi¨®n aunque s¨ª el recordatorio de los peneuvistas de que ambas cuestiones forman parte del acuerdo de gobierno de coalici¨®n entre el PNV y el PSE-PSOE.
Todos los asuntos delicados se pasan a sendas comisiones: a la primera, con las 37 competencias pendientes, se a?ade otra para estudiar el traslado de los presos etarras a c¨¢rceles pr¨®ximas al Pa¨ªs Vasco, que el Gobierno central estudiar¨¢. Pocas reticencias se observan al respecto una vez que ETA ha anunciado su disoluci¨®n, lo que favorece el fin, con condiciones y caso por caso, de la pol¨ªtica de dispersi¨®n de los presos etarras.
La reuni¨®n s¨ª termin¨® con la certeza de que asuntos mucho menos llamativos pero muy pr¨¢cticos saldr¨¢n adelante. No habr¨¢ problema ni necesidad de esperar para que haya traspasos al Pa¨ªs Vasco de determinadas autopistas, como la A-68 y parte de la A-1 y el Puerto de Pasaia.
A pesar de que su relaci¨®n con el anterior Gobierno presidido por Mariano Rajoy no fue mala, como se apreci¨® con la aprobaci¨®n de los Presupuestos y de inversiones muy relevantes para el Pa¨ªs Vasco, parece que con el Ejecutivo de Pedro S¨¢nchez el contacto puede ir mejor. ¡°Ya hay algunas diferencias con respecto al Gobierno anterior¡±, se?al¨® Urkullu. ¡°En mi segundo mandato como lehendakari, nunca he sido recibido en Moncloa, y tampoco se cre¨® ning¨²n grupo de trabajo para materializar los traspasos¡±, remarc¨® Urkullu para establecer diferencias entre el presidente popular y el socialista.
Adem¨¢s, tambi¨¦n se van a estudiar los recursos ante el Tribunal Constitucional que el Gobierno de Espa?a, presidido entonces por Mariano Rajoy, present¨® contra leyes del Ejecutivo auton¨®mico. En la medida que el Gobierno estime que el Ejecutivo vasco pueda tener raz¨®n, se retirar¨¢n algunos de los recursos presentados y pendientes de estudio.
Respeto a las v¨ªctimas
Durante la reuni¨®n no se produjeron exigencias de Urkullu para que de todas estas comisiones bilaterales salgan plazos concretos para llevar adelante las transferencias que se piden.
Del lado del Gobierno central hubo tambi¨¦n pocas objeciones, ya que s¨®lo se trataba en principio de hacer comisiones de estudio. No obstante, las m¨¢ximas ¡°cautelas¡±, seg¨²n expresi¨®n de Urkullu, que expres¨® Pedro S¨¢nchez se refer¨ªan a las v¨ªctimas del terrorismo de ETA. El presidente del Gobierno, explic¨® Urkullu en la rueda de prensa posterior a la reuni¨®n, quiso dejar claro que la pol¨ªtica penitenciaria de acercamiento de presos tendr¨¢ siempre muy en cuenta el sentimiento y el respeto a las v¨ªctimas del terrorismo.
El lehendakari entiende ¡°las razones de cautela¡± de S¨¢nchez y le ha dado cuenta de las iniciativas que lleva a cabo el Gobierno vasco para ¡°la memoria, reconocimiento y reparaci¨®n a las v¨ªctimas¡±. A su juicio es el momento de ¡°avanzar en la convivencia normalizada¡±. Dentro de ese objetivo incluye ¡°la necesidad de un nuevo enfoque para la pol¨ªtica penitenciaria en este nuevo tiempo tras la disoluci¨®n definitiva de ETA¡±. Dentro de la legalidad, s¨ª cree Urkullu que es el momento de ¡°una reorientaci¨®n legal de la pol¨ªtica penitenciaria y el acercamiento de personas presas¡±.
Sin utilizar el lenguaje de su antecesor Juan Jos¨¦ Ibarretxe, que decidio llevar adelante una reforma del Estatuto en clave netamente soberanista que fue rechazado por las Cortes, Urkullu s¨ª se aproxim¨® a reivindicaciones cl¨¢sicas del nacionalismo vasco. Pero sin rupturas. ¡°Vemos la necesidad de abordar una reflexi¨®n sobre el actual modelo de Estado desde la asunci¨®n de su propia realidad plurinacional y la existencia de hechos diferenciales que demandan un tratamiento propio y singular¡±, dijo el lehendakari. Y apostill¨®: ¡°No hemos hablado de ruptura, sino de convivencia desde el respeto mutuo¡±.
S¨ª pidi¨® a S¨¢nchez ¡°explorar la v¨ªa de una convenci¨®n constitucional que permita interpretar el esp¨ªritu originario del pacto que supuso la Constituci¨®n¡±. ¡°Esto supone apostar por un constitucionalismo ¨²til al servicio de resolver los problemas y no enconarlos¡±, dijo. A estas apreciaciones no ha hubo respuesta del Gobierno salvo el principio general establecido por la ministra portavoz, Isabel Cela¨¢, en d¨ªas previos: ¡°En una mano, di¨¢logo; en otra, la Constituci¨®n¡±.
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