Llarena se debate entre renunciar ya a la entrega de Puigdemont o acudir al tribunal de la UE

El juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena se debate entre dos opciones ante el futuro judicial del expresidente catal¨¢n Carles Puigdemont. Una de ellas, renunciar ya a la entrega del l¨ªder independentista si se confirma que no hay ninguna posibilidad de que Alemania acepte entregarle por rebeli¨®n. Esa opci¨®n, defendida abiertamente por algunos sectores del tribunal, no es, sin embargo, la ¨²nica que est¨¢ encima de la mesa. Tambi¨¦n se considera una posible acci¨®n ante el Tribunal de Justicia de la UE para plantear que la justicia alemana que no ha aplicado correctamente la orden europea de detenci¨®n. Hay una tercera posibilidad: aceptar la entrega de Puigdemont en los t¨¦rminos acordados por el tribunal alem¨¢n, es decir, solo por el delito de malversaci¨®n. Pero esta alternativa es la menos probable y fuentes consultadas la descartan por los riesgos que conllevar¨ªa, incluido que el l¨ªder independentista consiguiese la libertad en Espa?a y hasta pudiera recuperar la presidencia de la Generalitat.?

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?Qu¨¦ opciones tiene Llarena tras la entrega de Puigdemont solo por malversaci¨®n?

El alto tribunal espa?ol no tiene todav¨ªa conocimiento oficial de la resoluci¨®n de Alemania, pero tem¨ªa desde hace meses la decisi¨®n que ha tomado este jueves, por lo que ha estado estudiando los pros y los contras de los caminos que le quedar¨ªan para evitar que los delitos que atribuye a Carles Puigdemont queden impunes. Si se confirma la negativa de la justicia alemana a entregar al expresidente de la Generalitat por rebeli¨®n pero s¨ª hacerlo por malversaci¨®n, el juez Pablo Llarena deber¨¢ decidir si acepta la entrega solo por este delito (lo que impedir¨ªa juzgarlo en Espa?a por ning¨²n otro) o la rechaza y deja que se quede de momento en Alemania.

Fuentes del Tribunal Supremo han se?alado que Llarena no va a tomar ninguna decisi¨®n hasta que pueda analizar el "contenido jur¨ªdico" de la resoluci¨®n de la Audiencia de Schleswig-Holstein. Adem¨¢s, el alto tribunal cuenta con que no tiene que decidir su estrategia de forma inmediata porque el abogado del expresident ha anunciado un recurso ante el Tribunal Constitucional alem¨¢n para intentar evitar tambi¨¦n la entrega por malversaci¨®n. Con todo, en el Supremo admiten que no hay ya opci¨®n para conseguir la entrega por rebeli¨®n y que el margen de actuaci¨®n de Llarena es muy reducido, aunque entre las fuentes consultadas hay discrepancias sobre qu¨¦ decisi¨®n ser¨ªa ahora la m¨¢s correcta.

Un sector del Supremo es partidario de rechazar la entrega de Puigdemont por malversaci¨®n y condenarle a vivir fuera de Espa?a porque la justicia espa?ola mantendr¨ªa la orden de detenci¨®n nacional y el expresidente ser¨ªa arrestado si entra en el pa¨ªs. Adem¨¢s, si el expresidente cambiara Alemania por otro territorio, el Supremo podr¨ªa reactivar la orden de detenci¨®n europea o internacional. Esta situaci¨®n se mantendr¨ªa al menos durante los 20 a?os que tarda en prescribir el delito de rebeli¨®n, seg¨²n las fuentes consultadas. Con todo, otras fuentes consultadas advierten de que esta v¨ªa implicar¨ªa la renuncia a juzgar al expresidente, lo que se interpretar¨ªa como un agravio respecto a los l¨ªderes independentistas que no se han fugado y se han puesto a disposici¨®n de la justicia espa?ola.

Dentro del tribunal no se descarta la posibilidad de acudir al Tribunal de Justicia de la Uni¨®n Europea para que este se pronuncie sobre si Alemania ha aplicado bien la orden europea de detenci¨®n. La Fiscal¨ªa General del Estado tambi¨¦n ha analizado esta opci¨®n porque considera que Alemania se ha extralimitado al aplicar la normativa europea que regula la euroorden. Este acuerdo marco establece que el pa¨ªs ejecutor de la entrega (en este caso, Alemania) "debe limitarse a un apoyo pr¨¢ctico y administrativo" y a valorar que los hechos sean constitutivos de delito en ambos Estados "con independencia de los elementos constitutivos o la calificaci¨®n del mismo". Tanto el Supremo como la Fiscal¨ªa espa?ola creen que Alemania se ha excedido en el papel que le correspond¨ªa para decidir la entrega y ha entrado en el fondo de asunto (si hubo o no violencia y de qu¨¦ alcance). Acudir a Luxemburgo abrir¨ªa la puerta a que el tribunal europeo se pronuncie sobre ello y, en caso de confirmar esta tesis, se pueda replantear la situaci¨®n.

Esta posibilidad permitir¨ªa adem¨¢s ganar tiempo para evitar que Puigdemont sea entregado por malversaci¨®n mientras los miembros de su Govern que se quedaron en Espa?a se enfrentan a un delito de rebeli¨®n. Desde que se comprob¨® que las entregas de los procesados fugados iban a ser m¨¢s complicadas de lo previsto y pod¨ªan impedir juzgar a los huidos por los mismos delitos por los que se va a juzgar a los que no huyeron, el alto tribunal descart¨® que los 25 procesados se sentaran juntos en un mismo juicio. Para ello abri¨® una pieza separada, lo que implica que el tribunal juzgar¨¢ a finales de este a?o o principios del que viene solo a los 18 encausados que est¨¢n a disposici¨®n del Supremo sin esperar a que la justicia de Alemania, B¨¦lgica, Suiza y Escocia resuelva sobre la entrega de los huidos.

Si la opci¨®n de Luxemburgo no tuviera ¨¦xito, Llarena podr¨ªa volver a plantearse la entrega del expresidente catal¨¢n solo por malversaci¨®n e intentar juzgarle por el tipo agravado de este delito, que prev¨¦ penas de hasta 12 a?os de c¨¢rcel. Si es condenado, una vez cumplida la pena, la ley permitir¨ªa reactivar la investigaci¨®n por rebeli¨®n cuando hubieran pasado 45 d¨ªas desde la puesta en libertad definitiva si Puigdemont no sale de Espa?a, una posibilidad que tambi¨¦n ha manejado el tribunal pero que ahora mismo se considera solo una hip¨®tesis muy a medio plazo.

Fuentes del alto tribunal descartan que el Supremo vaya a aceptar la entrega de Puigdemont si no es para juzgarle por rebeli¨®n. Porque lo contrario tendr¨ªa varios inconvenientes, uno de ellos con importantes repercusiones pol¨ªticas: quedar¨ªa sin efecto la suspensi¨®n temporal como diputado ordenada por Llarena esta semana y que solo es aplicable para los procesados por rebeli¨®n. Esto implicar¨ªa que el expresidente mantendr¨ªa todos sus derechos como parlamentario, al menos, hasta que hubiera una condena que le inhabilitara.

La entrega solo por malversaci¨®n tambi¨¦n abrir¨ªa la puerta a que, incluso en el caso de ser condenado por el subtipo m¨¢s grave, Puigdemont cumpliera penas inferiores a las que podr¨ªan afrontar el resto de procesados. La ¨²ltima reforma del c¨®digo penal para este delito contempla la posibilidad de rebajar la pena en uno o dos grados si el acusado repara de forma ¨ªntegra el dinero malversado. Esta reparaci¨®n del da?o podr¨ªa dificultar, adem¨¢s, la posibilidad de encarcelar de forma preventiva al expresidente una vez que estuviera en Espa?a, aunque el Supremo alegue el elevado riesgo de fuga. Si Puigdemont quedara en libertad y con sus derechos como diputados intactos, podr¨ªa aspirar a volver a ser presidente de la Generalitat.