Sangre castrense

El magistrado F¨¦lix Az¨®n lleva el esp¨ªritu castrense en la sangre. Hijo de guardia civil ¡ªsu padre, fallecido, era brigada del instituto armado¡ª, se crio y creci¨® en el cuartel de Almunia de San Juan, Huesca. ¡°Mis amigos eran hijos de compa?eros de mi padre, yo me hice juez gracias a su apoyo, ni en mis mejores sue?os pens¨¦ que alg¨²n d¨ªa ser¨ªa yo director de la Guardia Civil, estoy encantado¡±, dec¨ªa emocionado tras conocerse su nombramiento y pensando en el orgullo que sentir¨ªa su padre.

Este juez de 63 a?os, casado y padre de dos hijos, que ha desarrollado gran parte de su carrera en Barcelona, a caballo entre el Tribunal Superior de Justicia y la Escuela de Jueces ¡ªocup¨® el puesto de subdirector entre 2004 y 2006¡ª, fue n¨²mero uno de su promoci¨®n en la especialidad de Social y, antes, fue considerado uno de los mejores abogados laboralistas de Zaragoza.

Durante su etapa de vocal en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), adonde lleg¨® en 2008 apoyado por la asociaci¨®n progresista de Jueces para la Democracia y por el PSOE, hizo buenas migas con la magistrada Margarita Robles, hoy ministra de Defensa y una de sus principales valedoras, aunque es tambi¨¦n conocida su buena relaci¨®n dentro del partido con el secretario de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, y con el presidente del Gobierno aragon¨¦s, Javier Lamb¨¢n.

Con Robles ¡ªa quien agradeci¨® el cargo el d¨ªa de su toma de posesi¨®n y que lo define como ¡°aut¨¦ntico, natural y muy eficaz¡±¡ª y con la magistrada Inmaculada Montalb¨¢n hicieron frente com¨²n contra Carlos D¨ªvar, entonces presidente del Consejo General del Poder Judicial, cuando fue acusado de malversaci¨®n de fondos p¨²blicos.

Permaneci¨® en el CGPJ hasta 2013, cuando regres¨® a su puesto de juez en la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a, donde ha ejercido hasta hoy, compatibiliz¨¢ndolo con clases en varias universidades.