Puro teatro

Es el D¨ªa de la Marmota de nuevo, pero en la versi¨®n letraherida del tercer presidente insurrecto desde 2012. Cada uno de ellos ha querido dialogar. Cada uno de ellos ha lanzado su ¨®rdago. Cada uno de ellos ha terminado rompiendo la vajilla. Ahora es el turno de Torra y lo est¨¢ haciendo tambi¨¦n a su manera, Torra¡¯s way, letraherido y obvio como pocos, salido directamente del Diccionario de lugares comunes del independentismo en la versi¨®n del verbalismo m¨¢s radical, que convierte a Catalu?a en una colonia de la Espa?a autoritaria y a quienes no est¨¢n por la labor secesionista en colonos y colaboradores con el invasor.

Torra ha marcado una diferencia respecto a Mas y Puigdemont, encaramado en la cima de sus amplificaciones ret¨®ricas, no ha proferido ninguna amenaza ni ha impuesto ning¨²n plazo. Dice que lo ha hecho en homenaje precisamente a la Marmota, para no repetir el cuento de la hoja de ruta. Su ¨²nica visi¨®n tenebrosa es una sentencia condenatoria en el juicio sobre la secesi¨®n. No nos dijo que har¨¢ entonces, al margen de rechazarla de nuevo verbalmente y de convocar a los parlamentarios catalanes, los de la Ciutadella, los de Congreso y Senado y tambi¨¦n los de Bruselas para consultarles el caso: la asamblea de parlamentarios independentistas asoma la oreja para despu¨¦s de las sentencias. Con la eventualidad de un desacato, es decir, poner a los presos en libertad, unas elecciones anticipadas o nuevamente m¨¢s discursos.

Cae todav¨ªa lejos. Antes est¨¢ el calendario de oto?o, lleno de festejos y aniversarios, para los que Torra convoca a los suyos y por reacci¨®n a los otros. El teatro, por m¨¢s teatro que sea, cuando es un teatro tan encendido puede encender tambi¨¦n las calles. A eso juega al menos una parte notable de la platea que le aplaudi¨® sus incendios verbales. Antes est¨¢ tambi¨¦n el juicio, la "Causa General" le llama, la petici¨®n fiscal, la vista, las sentencias, zanjado todo por Torra y los suyos como un juicio injusto y una inocencia que no hace falta demostrar porque resulta que se les imputa por votar y no por pretender liquidar la vigencia de la Constituci¨®n en Catalu?a.

Pero a la vez, junto a la soflama y la mentira, ah¨ª est¨¢ el gui?o a Pedro S¨¢nchez. Ha entendido que se trata de pol¨ªtica y que se resuelve con la democracia. Ah¨ª es donde el presidente insurrecto pone pie en pared r¨¢pidamente, no fuera caso que no pudiera terminar su personal ciclo de la Marmota: dialogar sobre todo, pero con un solo objetivo, un refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n. ?Otro?