El Gobierno usa un atajo legal para garantizar la aprobaci¨®n de los Presupuestos

El Gobierno quiere a toda costa presentar y aprobar cuanto antes los Presupuestos de 2019, su proyecto clave, el que le permitir¨¢ ejecutar sus medidas progresistas y evitar las elecciones anticipadas. Para lograrlo, el Ejecutivo utiliz¨® anoche por sorpresa un atajo legal inesperado: el grupo socialista registr¨® en el Congreso una enmienda a una ley completamente diferente ¡ªuna reforma de la ley del Poder Judicial para mejorar la formaci¨®n de los jueces en la lucha contra la violencia machista¡ª para meter ah¨ª un cambio que reforma la ley de estabilidad presupuestaria y elimina la capacidad de veto del Senado, controlado por el PP. As¨ª, se lograr¨ªa una reforma expr¨¦s para levantar el veto, poder presentar los Presupuestos en noviembre y aprobarlos antes de las elecciones municipales y auton¨®micas de mayo.

El Gobierno sostiene que esto, por extra?o que parezca, se puede hacer y ha sido autorizado por el Tribunal Constitucional en otras ocasiones. El Ejecutivo cita expresamente otros ejemplos recientes como la modificaci¨®n de la Ley del Registro Civil a trav¨¦s de una ley de medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia.

La estrategia se cumpli¨® con el mayor sigilo y todos los pasos previstos. Este martes se cerraba el plazo de enmiendas para esta reforma, que tiene un nombre complejo: "Proposici¨®n de ley org¨¢nica 6/1985 del Poder Judicial sobre medidas urgentes en aplicaci¨®n del Pacto de Estado en materia de violencia de g¨¦nero". Es clave que sea org¨¢nica, porque la ley de estabilidad lo es y no puede ser modificada por otra de menor rango.

Esta reforma se est¨¢ llevando por consenso, tiene muy pocas enmiendas y ha pasado desapercibida, por eso parec¨ªa ideal para plantear all¨ª esta argucia. El argumento jur¨ªdico se basa en que el desarrollo del pacto de Estado de violencia de g¨¦nero, del que nace esta reforma, necesita para su aplicaci¨®n que se aprueben los nuevos Presupuestos de 2019 que le dotar¨¢n de los fondos necesarios. As¨ª se justifica en la enmienda que se cambie en esta ley, como disposici¨®n adicional, la norma de estabilidad presupuestaria, aparentemente sin ninguna conexi¨®n.

Al cerrarse el plazo de enmiendas, el PP y Ciudadanos, que controlan la Mesa del Congreso y se hab¨ªan propuesto complicarle la vida al Gobierno en este asunto, se quedan sin instrumentos. La ley pasar¨¢ ahora por la Comisi¨®n de Justicia, donde el PSOE y sus aliados tienen mayor¨ªa, y despu¨¦s al pleno del Congreso, donde tambi¨¦n la tienen.

Los dem¨¢s grupos que apoyaron la moci¨®n de censura est¨¢n a favor de cambiar la Ley de Estabilidad Presupuestaria para eliminar la capacidad de veto del PP, por lo que es razonable pensar que tambi¨¦n apoyar¨¢n este atajo, aunque es probable que la oposici¨®n utilice todos los mecanismos legales a su alcance para intentar impedirlo.

La norma ir¨¢ despu¨¦s al Senado, donde el PP podr¨ªa vetarla, pero ah¨ª el Gobierno puede pedir el procedimiento de urgencia y en 20 d¨ªas podr¨ªa levantarse ese veto en el Congreso. Todo cuadra en los planes del Gobierno, aunque ahora empezar¨¢ a jugar la oposici¨®n.

El Gobierno y el PSOE abren as¨ª dos v¨ªas paralelas. Una, la directa, es la reforma de la ley presupuestaria, cuya toma en consideraci¨®n se aprob¨® este martes con el apoyo de todos los grupos que conforman la nueva mayor¨ªa salida de la moci¨®n de censura.

Esa es la que m¨¢s le gustaba al Ejecutivo, la que pact¨® primero con Unidos Podemos y despu¨¦s sum¨® a los dem¨¢s grupos. Pero el PP y Ciudadanos, que tienen la mayor¨ªa de la Mesa del Congreso, bloquearon su tramitaci¨®n por v¨ªa expr¨¦s y en lectura ¨²nica alegando que no era una cuesti¨®n urgente. As¨ª los populares y los naranjas tienen toda la capacidad para retrasar durante meses la tramitaci¨®n simplemente ampliando el plazo de enmiendas, algo que el Reglamento permite casi ilimitadamente.

Con ese retraso, los Presupuestos de 2019 y con ellos toda la legislatura peligraba. Pedro S¨¢nchez insisti¨® el lunes en que quiere tenerlos presentados a finales de noviembre o principios de diciembre para poder aprobarlos en febrero o marzo, antes de las elecciones municipales y auton¨®micas de mayo. El Gobierno no puede aceptar que toda la legislatura dependa de ese control de la Mesa del Congreso, que est¨¢ en manos del PP, as¨ª que ha buscado esta segunda v¨ªa.?

El Ejecutivo de S¨¢nchez pretende cambiar la Ley Presupuestaria para modificar los objetivos de d¨¦ficit y deuda del pr¨®ximo a?o. El PSOE busca suavizar los l¨ªmites presupuestarios para configurar unas cuentas p¨²blicas m¨¢s expansivas que le permitan rebajar el ajuste del pr¨®ximo a?o en unos 5.000 millones. De esta forma, dispondr¨¢ de m¨¢s margen para convencer a Unidos Podemos de que le preste su apoyo.

Este atajo legal demuestra que el Ejecutivo no quiere ir a elecciones y har¨¢ todo lo que est¨¦ en su mano para consolidar la legislatura y aprobar los Presupuestos con sus medidas estrella de reforma fiscal y aumento de gasto social. Ahora habr¨¢ que ver si la jugada funciona en tiempo y forma.