Ciudadanos se mueve y descoloca a todos

Hay cosas que la c¨¢mara no puede apreciar. Que solo ven los que est¨¢n contemplando en vivo un espect¨¢culo. El mi¨¦rcoles, durante la sesi¨®n de control en el Congreso, algunos diputados veteranos, acostumbrados a ver mil batallas dial¨¦cticas aparentemente dur¨ªsimas entre personas que no pierden la buena relaci¨®n cuando se apagan las c¨¢maras, notaron algo distinto. Los gestos, las miradas, las manos de Albert Rivera y Pedro S¨¢nchez mientras se cruzaban ataques dec¨ªan muchas cosas. "Hay algo que no veis ni siquiera desde la tribuna de prensa. Aqu¨ª abajo se notaba la tensi¨®n. Esto trasciende a la pol¨ªtica, es algo personal. Y no tiene arreglo", resum¨ªa un diputado del PP que desde su esca?o pod¨ªa ver con claridad a los dos. Es tan fuerte que S¨¢nchez, el jueves, en la presentaci¨®n de su libro, ni siquiera desminti¨® abiertamente que fuera algo personal ante una pregunta de Jes¨²s Calleja sobre Rivera.

La guerra entre el PSOE y Ciudadanos ha roto la pol¨ªtica espa?ola y amenaza con bloquearla. Ciudadanos lo ha dejado claro: si suma la derecha, habr¨¢ Gobierno r¨¢pidamente. Si no, solo hay dos opciones si PSOE y Podemos no suman, como indican todas las encuestas: o S¨¢nchez intenta una investidura con los independentistas, algo extremadamente complejo ¡ª"esta vez los votos no iban a ser gratis como en la moci¨®n de censura, ni los nuestros ni los indepes", explican en la c¨²pula de Podemos¡ª o Espa?a se va de nuevo a un bloqueo como el de 2016, con riesgo de nuevas elecciones.

Todos los partidos ven claro el motivo del movimiento de Ciudadanos: en realidad no es un cord¨®n sanitario al PSOE, es un tap¨®n para la fuga que est¨¢ detectando hacia Vox y una forma de centrar su batalla en el bloque del centro derecha, donde Rivera juega su partida definitiva. "En la reuni¨®n de la ejecutiva hubo mucha discusi¨®n hasta que aparecieron los datos que tra¨ªan los expertos. Nuestro electorado rechaza mucho m¨¢s a S¨¢nchez que a Vox. Y hay un peligro muy serio de sangr¨ªa fuerte a Vox. No podemos permitirlo", sentencia un dirigente del partido naranja.

Los datos dejaron sin argumentos a los que quer¨ªan dejar la puerta abierta a pactar con el PSOE. Algunos son sorprendentes. Hay m¨¢s rechazo a S¨¢nchez entre el electorado de Ciudadanos que entre el de Vox. Un 90% de cr¨ªticos. Y hay m¨¢s animadversi¨®n hacia el presidente que hacia el partido de Santiago Abascal. Si a eso se le suman encuestas como la que hizo 40dB. para EL PA?S que se?ala que el 24% del voto de Vox en las elecciones andaluzas vino de Ciudadanos, la l¨®gica est¨¢ muy clara. "No es una decisi¨®n f¨¢cil, no todos estamos c¨®modos. Pero los que nos critican con tanto entusiasmo desde la izquierda no nos votan. Hay que lograr votos para poder hacer nuestro proyecto, la pol¨ªtica es as¨ª. Adem¨¢s, no podemos dejar en manos de la extrema derecha la bandera de Espa?a", sentencia otro dirigente.

Un problema personal

Parece evidente que entre S¨¢nchez y Rivera hay algo personal, pero es a¨²n m¨¢s claro que el trasfondo pol¨ªtico tambi¨¦n es muy fuerte. "Nosotros necesitamos recuperar una parte del espacio de Ciudadanos. Estamos creciendo mucho y vamos bien, pero si toda nuestra subida es a costa de Podemos no vale para gobernar, no sumamos. Necesitamos recuperar en el centro", sentencia un miembro de la c¨²pula del PSOE, feliz por el movimiento de Ciudadanos. La guerra es tan fuerte que incluso la portavoz, Isabel Cel¨¢a, us¨® la rueda de prensa del Consejo de Ministros para atacar a In¨¦s Arrimadas por su viaje a Waterloo. Mientras PSOE y Ciudadanos pelean, los dos bloques se distancian cada vez m¨¢s y parece casi imposible romperlos.

La directora de 40dB., Bel¨¦n Barreiro, lo tiene claro: "Este movimiento de Ciudadanos es l¨®gico, aunque arriesgado. El elector de derecha tiene mucha facilidad para cambiar el voto. Estamos viendo un baile fuerte ah¨ª. Est¨¢n tratando de frenar la fuga sobre todo a Vox. Hay muy poca diferenciaci¨®n ideol¨®gica entre Cs, PP y Vox, seg¨²n las encuestas. Ciudadanos y Vox se mueven en un electorado similar, urbano, digital, en niveles de renta parecidos, aunque los de Vox son m¨¢s duros con la inmigraci¨®n y mucho m¨¢s machistas. Si vamos a preferencias, los votantes de Ciudadanos tienen un Gobierno con el PP como primera opci¨®n clara. Y hay tantos votantes suyos que prefieren un pacto Cs-PP-Vox como los que apuestan por el Cs-PSOE. Ellos no ven tan mal a Vox como lo ve un votante del PSOE. A Ciudadanos cada vez le queda menos electorado progresista, se juega mucho m¨¢s en la derecha", analiza.

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Las encuestas no detectan que Rivera pueda ganarle al PP y por tanto aspirar a ser presidente con el bloque de derechas, pero ¨¦l s¨ª lo ve posible. Y esa es su gran batalla. "Si no lo logr¨® en Andaluc¨ªa, y lo ten¨ªa a tiro, ahora es imposible", se conjura un diputado del PP.

La volatilidad del voto del bloque de centro derecha inquieta mucho a Ciudadanos. En sus estudios cualitativos han llegado a preguntar a la misma persona en tres meses diferentes para descubrir con sorpresa que cada mes cambiaba el voto. El presidente de GAD3, Narciso Michavila, maneja datos similares. "Estamos viendo que el voto de izquierda y el nacionalista est¨¢ m¨¢s decidido. El de derechas es el m¨¢s indeciso, como pas¨® en Andaluc¨ªa. Una ma?ana se levanta de Vox, al mediod¨ªa est¨¢ en el PP y por la noche en Ciudadanos. El partido de Rivera tiene una fuga importante a Vox, que tiene que frenar. En las elecciones andaluzas Ciudadanos nos sal¨ªa primero en intenci¨®n directa, pero lo correg¨ªamos con nuestros an¨¢lisis y sab¨ªamos que no iba a ganar al PP porque los populares tienen un votante mayor, menos abstencionista. Ahora ya no nos sale por arriba del PP ni en intenci¨®n directa. Aunque s¨ª creemos que estar¨¢ por encima de Vox, al contrario de lo que se dice. Vox pasar¨¢ del 10%, pero es muy dif¨ªcil que vaya m¨¢s all¨¢ del 13%, hay comunidades como Galicia, Canarias, Pa¨ªs Vasco, Catalu?a, Baleares donde apenas entra", se?ala.

Lo que tienen claro tanto Barreiro como Michavila es que el PSOE tiene posibilidades de seguir creciendo hasta las elecciones. "Va a estar primero a mucha distancia del PP. Y tendr¨¢ un gran resultado en Catalu?a. Aunque sumar es otra cosa. Podemos est¨¢ cayendo mucho", sentencia Michavila. La guerra en la derecha, que ya se ve volviendo al poder, es pues la gran batalla de las elecciones, pero la movilizaci¨®n de la izquierda podr¨ªa dar la sorpresa. Un veterano diputado del PP recuerda que al final su partido suele aguantar mucho mejor de lo que nadie espera. "Los socialistas creen que nos han pillado a contrapi¨¦ con la convocatoria electoral. Nosotros tenemos siempre la maquinaria lista. Que no se olvide que montamos una manifestaci¨®n como la de Col¨®n en tres d¨ªas. M¨¢s les vale no subestimarnos". La batalla ya ha empezado y ser¨¢ dur¨ªsima hasta el 28 de abril.