La nueva transversalidad
En muy poco tiempo, el PSOE ha recuperado la confianza de no pocos ciudadanos, pero, sobre todo, de ciudadanos muy distintos
Vivimos tiempos convulsos. Hace no tanto, el bipartidismo entr¨® en crisis, dando lugar a un sistema de cuatro partidos que, cuando cre¨ªamos que empezaba a cristalizar, se ha visto sacudido por una nueva ola de inestabilidad electoral de la que nace ahora un sistema de pentapartido, eso s¨ª, imperfecto, con cinco grandes m¨¢s algunos peque?os.
En los ¨²ltimos meses, desde la formaci¨®n del Gobierno socialista de Pedro S¨¢nchez, se ha ido desencadenado un baile de votos que, ahora, a pocas semanas de las pr¨®ximas elecciones generales, se est¨¢ agudizando: la m¨²sica de la pol¨ªtica suena a todo volumen (para muchos es ruido m¨¢s que otra cosa) y los ciudadanos, seg¨²n se aprecia en las encuestas, siguen danzando a su ritmo, movi¨¦ndose en los espacios de la derecha, de la izquierda y en aquellos sin claros tintes ideol¨®gicos, los que caen en tierra de nadie.
Uno de los fen¨®menos m¨¢s importantes que se detectan en el microscopio electoral, mucho m¨¢s n¨ªtidamente tras el anuncio de elecciones, es el retorno a la transversalidad que, durante muchos a?os, hab¨ªan caracterizado las victorias electorales en Espa?a, especialmente las del Partido Socialista. Con Gonz¨¢lez y despu¨¦s con Zapatero, cuando ganaba el PSOE lo hac¨ªa entre los j¨®venes y los mayores, entre las mujeres y los hombres, entre las clases bajas y las clases medias o altas, entre las personas sin estudios y entre los universitarios, en los pueblos y en las grandes ciudades. En los a?os de crisis, los socialistas perdieron esta transversalidad. En los comicios de 2015 y 2016, ning¨²n partido ganaba en todas las dimensiones: los nuevos se hac¨ªan con la Espa?a m¨¢s digitalizada, destacando Ciudadanos entre los acomodados y Podemos entre los empobrecidos, mientras que los viejos conservaban el voto de la sociedad m¨¢s anal¨®gica, el PP entre los m¨¢s pudientes y el PSOE entre los m¨¢s vulnerables.
El PSOE ganar¨¢ las pr¨®ximas elecciones generales y su victoria ser¨¢ transversal: en muy poco tiempo, el partido ha recuperado la confianza de no pocos ciudadanos, pero, sobre todo, de ciudadanos muy distintos. El PSOE vuelve a ser primera fuerza entre los grupos m¨¢s diversos. Ganar en el pentapartidismo, sin embargo, poco tiene que ver con las victorias de anta?o: la formaci¨®n de un nuevo Gobierno socialista plantear¨¢ dilemas de dif¨ªcil soluci¨®n, que pondr¨¢n en riesgo esta nueva oleada de apoyo al PSOE, a¨²n endeble. El desaf¨ªo ser¨¢ mantener la nueva transversalidad a la hora de formar Gobierno o elegir socios.
Bel¨¦n Barreiro es directora de 40dB.
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