El ultranacionalismo de Vox fracasa en Catalu?a, Euskadi, Navarra, Galicia y Canarias
El partido de Abascal concentra el 75% de sus votantes en solo seis autonom¨ªas
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Lejos de cohesionar Espa?a, el discurso de Vox tiene un efecto disgregador sobre la naci¨®n cuya unidad dice querer preservar. As¨ª se deduce del an¨¢lisis de los resultados de las elecciones del 28-A. El partido de Santiago Abascal ha fracasado estrepitosamente en Catalu?a, el Pa¨ªs Vasco y Navarra (donde su porcentaje de voto no llega al 5%), en Galicia (5,2%) y en Canarias (6,5%), muy lejos del 10,2% que ha tenido en el conjunto de Espa?a.
Por el contrario, el 75% de sus 2,6 millones de votos proceden de solo seis de las 17 comunidades aut¨®nomas: Andaluc¨ªa, Madrid, Murcia, Comunidad Valenciana, Castilla y Le¨®n y Castilla-La Mancha. Las comunidades que tienen su propio nacionalismo o un fuerte sentimiento identitario se muestran inmunes al ultranacionalismo espa?ol de Vox.
La distribuci¨®n provincial del voto de Vox muestra que el partido que defiende la supresi¨®n del Estado auton¨®mico y la vuelta a la Espa?a centralista no ha conseguido apoyos en las tres comunidades hist¨®ricas (Pa¨ªs Vasco, Catalu?a y Galicia), en la comunidad foral navarra y en Canarias. Su irrupci¨®n en el juego pol¨ªtico no hace sino agrandar el divorcio pol¨ªtico entre estas comunidades perif¨¦ricas y el resto de Espa?a.
La circunscripci¨®n donde Vox ha sacado mejores resultados es Ceuta, donde ha logrado el 24% de los votos y ha sido la segunda fuerza pol¨ªtica, superando al PP. A¨²n as¨ª, el ¨²nico esca?o en juego se lo ha llevado el PSOE.
Por provincias, el porcentaje m¨¢s alto lo ha obtenido en Almer¨ªa (19,2%). En esta provincia se encuentran algunos de los municipios donde Vox ha tenido mejores resultados de toda Espa?a, como El Ejido (30,2%), N¨ªjar (28,8) o Adra (24,9). Se trata de una provincia con una fuerte presencia de inmigrantes extracomunitarios, mano de obra de los invernaderos, y la que menos se ha identificado hist¨®ricamente con Andaluc¨ªa, hasta el punto de que se plante¨® la posibilidad de formar una comunidad biprovincial con Murcia a ra¨ªz de su fuerte abstenci¨®n en el refer¨¦ndum andaluz del 28 de febrero de 1980.
No es casualidad que la comunidad aut¨®noma donde Vox ha conseguido mejores resultados sea precisamente Murcia (18,6%), que comparte muchas caracter¨ªsticas (entre otras, la alta tasa de inmigrantes o el peso del sector agr¨ªcola) con su vecina andaluza. Vox tiene en algunos municipios murcianos, como Torre-Pacheco (25%) o Fuente ?lamo (24,3%), porcentajes pr¨®ximos a los de Almer¨ªa.
Despu¨¦s de Murcia, las comunidades que han dado mejores resultados a Vox son Castilla-La Mancha (15,2%), Madrid (13,8%), Andaluc¨ªa (13,3%) y Castilla y Le¨®n (12,5%). En Madrid ha obtenido 520.000 votos (tres cuartas partes de los que ha tenido el PP); y en Andaluc¨ªa, 611.220; lo que significa 215.000 m¨¢s que en las elecciones auton¨®micas de diciembre pasado, cuando logr¨® el 10,97% de los sufragios.
Por el contrario, en Catalu?a, Galicia, Navarra, Pa¨ªs Vasco, Canarias y La Rioja se queda por debajo de la media nacional. En ?lava, la provincia de la que es originario Abascal, solo logra el 3,2% de los votos y, en el conjunto del Pa¨ªs Vasco, el 2,2%; a pesar de la pr¨¢ctica desaparici¨®n del PP. En Canarias, Vox fue la sexta fuerza pol¨ªtica, sin esca?os y con el 6,5% de los votos.
En Catalu?a, aunque sac¨® un diputado por Barcelona, se qued¨® en el 3,6%, Sus mejores resultados los consigui¨® en dos localidades con fuerte presencia del Ej¨¦rcito: Talarn (12,88%), sede de la Academia de Suboficiales, y Sant Climent de Sescebes (14,63).
Parad¨®jicamente, la Reconquista m¨ªtica que Abascal quiso rememorar con su campa?a electoral se ha estrellado en algunas de las comunidades aut¨®nomas espa?olas en las que hubo menor presencia musulmana, mientras que su mayor eco lo ha obtenido en lo que fue el? antiguo Al Andalus.
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