El presidente sordo de una mesa electoral en C¨¢diz, ejemplo ¡°del compromiso c¨ªvico¡± del 26-M
Pedro Bueno ha cumplido con su obligaci¨®n, ayudado por int¨¦rpretes, como un acto de ¡°reivindicaci¨®n y visibilidad¡±
¡°Pod¨ªa excusarme, pero quer¨ªa hacerlo. Aqu¨ª estoy a pecho descubierto¡±. Pedro Bueno hace un breve alto en su cargo de presidente de una mesa electoral en El Puerto de Santa Mar¨ªa (C¨¢diz) para explicar por qu¨¦ dijo s¨ª a su obligaci¨®n como ciudadano. Acept¨® de buen grado la encomienda hace unos d¨ªas y esta ma?ana lleg¨® a su puesto ilusionado, pero ¡°nervioso¡±. Bueno es sordo y necesita una int¨¦rprete de lengua de signos para ejercer su tarea, pero poco importa. Cumple con su deber como un acto de ¡°reivindicaci¨®n y visibilidad¡±, como asegura, con la ayuda de una int¨¦rprete.
Bueno, de 42 a?os, lleg¨® la ma?ana de este domingo bien temprano a su mesa, ubicada en la sede de la empresa municipal Impulsa, en El Puerto. Es uno de los gaditanos llamados a velar por el buen funcionamiento de las 1.521 mesas en los 582 colegios electorales que est¨¢n operativos en la provincia de C¨¢diz este 26 de mayo de elecciones municipales y europeas. Pero su caso no es uno m¨¢s. Bueno es la ¡°evidencia del compromiso c¨ªvico¡± de esta jornada electoral. As¨ª lo ha definido el delegado del Gobierno de Espa?a en Andaluc¨ªa, Lucrecio Fern¨¢ndez, cuando le ha puesto como ejemplo durante el primer avance de la participaci¨®n del d¨ªa.
El portuense, mozo de almac¨¦n en una empresa farmac¨¦utica, agradece orgulloso el gesto de Fern¨¢ndez cuando le explican c¨®mo han sabido de su presencia en la mesa. Y no ha andado desencaminado el delegado, porque Bueno podr¨ªa haberse negado por su condici¨®n de sordo a ejercer su tarea que, en principio, iba a ser como suplente. Pero nunca se plante¨® hacerlo, ni siquiera cuando supo que el que iba de presidente no podr¨ªa ejercer su cargo y, por tanto, le iba a tocar a ¨¦l. ¡°Fui a la reuni¨®n previa incluso sin int¨¦rprete¡±, explica ante la que es su primera vez en una mesa electoral.
¡°Estoy muy contento con la experiencia¡±, ha a?adido en un breve receso en el que ha atendido a EL PA?S. Lo suyo est¨¢ lejos de ser una imposici¨®n mal llevada, m¨¢s bien todo lo contrario. Est¨¢ ¡°encantado¡± con su tarea, al igual que el resto de sus compa?eros en el colegio electoral. ¡°Llevo desde 2006 encarg¨¢ndome de las elecciones y siempre querr¨ªa un Pedro en mi vida¡±, ha aseverado sonriente Marisa P¨¦rez, trabajadora municipal y encargada del colegio junto a Jos¨¦ Manuel Moreno, tambi¨¦n empleado en una empresa del Ayuntamiento.
La presencia de Pedro Bueno ha sorprendido a algunos de los votantes que hoy se han acercado hasta el colegio en Impulsa. Pero el asombro ha virado pronto a la normalidad al ver que era ¡°de las mesas m¨¢s r¨¢pidas¡±, seg¨²n asegura P¨¦rez. Bueno no es ajeno a la curiosidad que ha generado su aceptaci¨®n del cargo y explica que justo ese es uno de los motivos que le llevaron a aceptar la encomienda. ¡°Es por reivindicaci¨®n y visibilidad¡±, a?ade con orgullo.
Para que Pedro Bueno haya podido desempe?ar su cargo como presidente con total normalidad, el Ministerio del Interior ha dispuesto un recurso de dos int¨¦rpretes de lengua de signos en dos turnos.
Cuando una persona sorda recibe una notificaci¨®n para ser miembro de una mesa electoral puede rechazar el cargo alegando su discapacidad o aceptarla. Si da su conformidad, debe solicitar en un plazo de siete d¨ªas las medidas espec¨ªficas que pueda necesitar para poder ¡°ejercer el cargo en igualdad de condiciones con el resto de los ciudadanos¡±, tal y como explica en su web Fiapas, la Confederaci¨®n Espa?ola de Familias de Personas Sordas.
Tanto en el caso de Bueno como de cualquier otra persona sorda que quiera ejercer su obligaci¨®n, corresponde a la Junta Electoral de Zona aprobar la gesti¨®n del recurso necesario, como ha ocurrido en esta ocasi¨®n. Ya el pasado 28 de abril, d¨ªa de celebraci¨®n de las Elecciones Generales, una persona sordociega en Tenerife y otra sorda en Murcia solicitaron sus respectivos recursos para poder acceder a su obligaci¨®n en una mesa.
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