Verdades, mentiras, excusas y bloqueos de las investiduras de 2016

Las relaciones pol¨ªticas en Espa?a llevan a?os basadas en la desconfianza y esa r¨¦mora se ha cobrado ya varias v¨ªctimas. El volantazo de Pablo Iglesias del viernes puede permitir ahora finalmente un Gobierno de coalici¨®n entre el PSOE y Unidas Podemos. Pero esa soluci¨®n no diluye el recelo casi cong¨¦nito entre ambas formaciones, y en especial de los socialistas hacia las reclamaciones y jugadas in extremis de Iglesias.

"A m¨ª ya me intent¨® enga?ar Iglesias como m¨ªnimo tres veces en aquellas investiduras de 2016 y claro, ahora no me f¨ªo nada", rememora Antonio Hernando, ya retirado de la pol¨ªtica activa y entonces portavoz del PSOE en el Congreso y mano derecha de Pedro S¨¢nchez. Antonio Hernando, entre la primavera de 2016 y el final de aquel verano, fue el encomendado de negociar dos intentos de investidura a la desesperada de Pedro S¨¢nchez y Mariano Rajoy, as¨ª como los frustrados pactos del abrazo y el beso, el primero del PSOE con un Ciudadanos m¨¢s humilde que el actual, y el segundo con un Podemos en la cresta de la ola.

Las elecciones generales del 20 de diciembre de 2015 acabaron con la mayor¨ªa absoluta del primer mandato de Rajoy, sepultaron el bipartidismo al dejar al PSOE en 90 esca?os y proyectaron a las nuevas marcas, Podemos y Ciudadanos, con 69 y 40 actas, respectivamente. Rajoy declin¨® por sorpresa y de forma in¨¦dita en Espa?a proponerse candidato ante el Rey, y S¨¢nchez se lanz¨® a la arena en una segunda ronda de contactos.

El 24 de febrero de 2016, S¨¢nchez y Rivera firmaron el pacto del abrazo con 150 puntos comunes para un programa de gobierno, y el PSOE releg¨® los contactos con Podemos. Entre el 1 y el 4 de marzo se organiz¨® el debate de investidura, que S¨¢nchez perdi¨® (131 votos del PSOE, Cs y Coalici¨®n Canaria frente a 219 en contra). Aquellas sesiones se recuerdan por la dura intervenci¨®n inicial de Iglesias achac¨¢ndole a S¨¢nchez la herencia de "la cal viva" de la ¨¦poca de presidente de Felipe Gonz¨¢lez y ofreci¨¦ndole horas m¨¢s tarde el pacto del beso, tras propinarle un ¨®sculo en los labios a su socio de Ahora en Com¨² Podem, Xavier Domenech, como ejemplo de uni¨®n "atrevida" que podr¨ªa indagarse a "la valenciana" entre los socialistas y todo tipo de confluencias, con la abstenci¨®n de los independentistas.

S¨¢nchez, en su alegato final, pidi¨® a todos los partidos que fueran responsables y facilitaran la "salida del bloqueo y el desgobierno institucional". Rajoy no le crey¨® y tach¨® la operaci¨®n de "farsa, enga?o y fraude".

Antonio Hernando ha reiniciado su vida fuera de las siglas y el Parlamento, pero tiene v¨ªvida la memoria de aquellas charlas en la sala Sert del Congreso: "Lo intentamos antes de la votaci¨®n, pero Podemos dijo que no a su abstenci¨®n, alegaban que era demasiado tarde y que ya hab¨ªamos cerrado un acuerdo con Ciudadanos. Era verdad, pero quisimos hablar con ellos para acordar un programa de Gobierno. Me sent¨¦ incluso con Iglesias a un lado y Jos¨¦ Manuel Villegas, de Ciudadanos, a otro para negociar y quedamos en seguir hablando. Iglesias se mostr¨® incluso encantado de conocer a Rodolfo Ares. Salimos para dar ruedas de prensa. Pero al llegar a su despacho, Iglesias le dijo a ??igo Errej¨®n, que era el portavoz de Podemos, que me llamara para decirme que ellos no sal¨ªan y no firmaban. Rompi¨® deliberadamente".

Las suspicacias del PSOE contra Podemos se arrastraban desde el inicio de aquella legislatura. S¨¢nchez ten¨ªa el nombre de Patxi L¨®pez para presidir aquellas Cortes en las que se proyectaron im¨¢genes tan novedosas como la de Carolina Bescansa con su beb¨¦ en el hemiciclo. Antonio Hernando no olvida tampoco que Bescansa, cofundadora de Podemos y ahora tambi¨¦n en el olvido, se lleg¨® a ver con el PNV y hasta con Francesc Homs, el delegado en el Congreso de la Converg¨¨ncia Democr¨¤tica de Catalunya de Artur Mas, para proponerse como alternativa para dirigir las Cortes. Fuentes parlamentarias rememoran que Homs, otro pragm¨¢tico ahora en la abogac¨ªa, espet¨®: "?Qu¨¦ sac¨® yo de fastidiar as¨ª al PSOE?".

Domenech tambi¨¦n est¨¢ ya fuera de la contienda pol¨ªtica y desde su plaza recuperada en la Universidad catalana compara el escenario actual con el de entonces y concluye: "La sensaci¨®n que me queda de fondo es de melancol¨ªa de aquel bipartidismo imperfecto del PSOE y el PP con alianzas puntuales con PNV o CiU o de que pueda volver y eso solo lo resolver¨¢ la historia".

En la direcci¨®n actual de Podemos, y Domenech lo reafirma, destacan algunas diferencias sustanciales con aquel encallamiento que propici¨® Iglesias: "El PSOE formaliz¨® un pacto minoritario con Ciudadanos (130 esca?os) en relaci¨®n al actual con Podemos (165) y se ped¨ªa a Iglesias que nos abstuvi¨¦ramos con Rivera de vicepresidente y eso no causaba ning¨²n problema". Lo que Podemos y Domenech s¨ª ven semejante es la amenaza ventajista de repetir elecciones: "Rajoy fracas¨® en dos investiduras y tras dos elecciones a punto estuvo de ir a las terceras y entonces se cruji¨® al PSOE para que permitiera arrancar, lo que acab¨® con la dimisi¨®n de S¨¢nchez. Ahora se intenta crujir a Podemos y Ciudadanos".

Rafael Hernando, en aquel momento portavoz del PP y ahora de retirada en el Senado, apunta como el culpable de todo lo que ocurri¨® en 2016 a S¨¢nchez: "Lo peor fue la falta de voluntad del PSOE de llegar a un acuerdo para desmontar el sistema bipartidista dependiente de las bisagras nacionalistas y de aquel bloqueo al no aceptar un Gobierno de coalici¨®n con el PP vienen estos lodos". Y no ve m¨¢s paralelismo.

Antonio Hernando, desde la amistad que le une desde entonces, replica a Rafael Hernando con una aritm¨¦tica m¨¢s favorable: "La diferencia con hace tres a?os es que ahora no hay alternativa al Gobierno de Pedro S¨¢nchez y que 123 esca?os pesan m¨¢s ahora que entonces".

Rajoy se present¨® a primeros de septiembre de 2016 para ser investido y recab¨® 170 votos (esta vez PP con Ciudadanos y CC) frente a los 180 del resto de los grupos. En su defensa adujo frente a S¨¢nchez: "Permita al menos que en Espa?a se forme Gobierno y no bloquee".?