Un debate nada secundario

El debate de los portavoces ha permitido ver y contrastar las principales propuestas pol¨ªticas de los partidos en esta corta y at¨ªpica campa?a del 10-N. Moderado por el periodista Xabier Fortes y su sentidi?o, ha tenido un inter¨¦s adicional: la reciente representaci¨®n parlamentaria de Vox ha permitido ver, por primera vez, a esta formaci¨®n pol¨ªtica en un debate.

El mal llamado debate de los n¨²meros dos no ha sido -en absoluto- un debate secundario. Al contrario.

Adriana Lastra (PSOE) ha resistido los ataques de casi todos los portavoces. Ha estado inteligente al no enredarse en las interpelaciones directos de sus oponentes. Ha ido de menos a m¨¢s. El PSOE lleg¨® l¨ªder al debate y sale sin heridas a pesar de que no lo ten¨ªa f¨¢cil. Lo ¨²nico importante de un debate es no perderlo, y no lo ha perdido.

Cayetana ?lvarez de Toledo (PP) ha tenido problemas con los tiempos y eso le ha lastrado en sus propuestas, en especial, en el bloque econom¨ªa, empleo, pensiones e impuestos (en principio su fortaleza). Su pasi¨®n ideol¨®gica le permite atacar, pero no siempre proponer y el PP necesitaba ser alternativa. El zarpazo a Greta Thunberg puede ser un grave error.

In¨¦s Arrimadas (Ciudadanos) ha estado solvente en sus intervenciones, pero, quiz¨¢s, no ha conseguido hablar de temas nuevos como en otras ocasiones. Ha estado previsible y los sondeos negativos exig¨ªan, probablemente, otro desempe?o. Aunque en el bloque de pactos y gobernabilidad y el minuto final han sido su mejor momento del debate.

Irene Montero (Unidas Podemos) recibi¨® pocos ataques y eso le ha permitido hacer propuestas y mantener un tono m¨¢s centrado en su oferta. Repite el estilo amable de los debates electorales de Pablo Iglesias, pero mostr¨® su contundencia al hablar de violencia machista. Administr¨® muy bien sus tiempos, aunque a veces se acelera cuando se explica.

Iv¨¢n Espinosa de los Monteros (VOX) ha citado a UPyD en la b¨²squeda, quiz¨¢s, de sus votos. Se ha mostrado s¨®lido y competitivo en los duelos con el PP. Duro de fondo, sobrio de formas, y por su estilo habr¨¢ sido una sorpresa para muchos electores. Son los nuevos en estos debates, pero han estado muy experimentados.

Gabriel Rufi¨¢n (ERC) se ha ce?ido a un guion de moderaci¨®n, oferta de di¨¢logo (con todos, sin exclusiones) y no ha levantado la bandera de la independencia, sino de la democracia. H¨¢bil, pero veremos si ha dejado demasiado espacio a las CUP y JxC. M¨¢s socialdem¨®crata que nunca en sus propuestas econ¨®micas.

Aitor Esteban (PNV) ha apostado por la reflexi¨®n frente a la confrontaci¨®n o la proposici¨®n del resto de sus contendientes. Su sobriedad, su tono y sus ideas buscan mostrar la v¨ªa vasca para resolver problemas pol¨ªticos. De nuevo, el PNV ha mostrado su capacidad para ser un socio fiable¡­ pero siempre con la agenda vasca sobre la mesa.