El coste de calumniar a un guardia civil
Un concejal es condenado a pagar 5.000 euros por insultar a un agente que antes lo hab¨ªa denunciado a ¨¦l
La venganza, a veces, sale cara. Si se le suma la mentira y la calumnia, y todo ello es a un agente de la autoridad, la cantidad se pone en un pico. Por ejemplo, en 3.500 euros de indemnizaci¨®n al calumniado, m¨¢s 1.440 euros de multa a raz¨®n de ocho euros al d¨ªa durante seis meses, m¨¢s las costas judiciales, que en el caso que sigue se valoran en aproximadamente 3.000 euros. El total, sin incluir el coste de publicar la sentencia en un diario local alcanza los 8.000 euros. Ese ser¨¢ el coste para C¨¢ndido Guillermo Calvo, un ex concejal de Izquierda Unida del pueblo granadino de Arenas del Rey (1.200 habitantes), que ha sido condenado por calumnias sin publicidad a un cabo primero de la Guardia Civil al que hab¨ªa acusado en falso de diversos delitos.
Los hechos alcanzan el momento de m¨¢xima tensi¨®n en diciembre de 2015, cuando el ya ex concejal ¨Cfue primero de lista en las ¨²ltimas elecciones pero no fue elegido¨C present¨® un escrito en la comandancia de la Guardia Civil de Granada describiendo supuestas conductas ilegales por parte del entonces cabo del puesto de la Guardia Civil en Arenas del Rey, a una hora de la capital granadina.
Esa denuncia, que tanto el juez como el tribunal que estudi¨® el recurso posterior consideraron falsa en todos sus t¨¦rminos, lleg¨® firmado con un nombre falso porque, seg¨²n su testimonio recogido en la sentencia, ¡°al ponerla en Correos le dijeron que ten¨ªa que ir con un remitente¡±. El miedo pudo con el denunciante, dijo, y tir¨® de un nombre familiar para ¨¦l, el de un alcalde del pueblo de hac¨ªa d¨¦cadas. El contenido de la carta explicaba que el cabo del pueblo se dedicaba a revender parte de la marihuana que se interven¨ªa en Arenas, que ten¨ªa un negocio de compraventa de coches y que comet¨ªa abusos de autoridad maltratando a la gente en el cuartel. Ante estas acusaciones, la Guardia Civil abri¨® una informaci¨®n reservada. Result¨® que todo era inventado y justificado en que al exconcejal ¡°alguien le hab¨ªa dicho¡± o ¡°lo hab¨ªa o¨ªdo por ah¨ª¡±.
Un teniente del puesto de Loja se hizo cargo de la investigaci¨®n, que comenz¨® con una entrevista con el calumniado, entonces cabo y ahora sargento en otra localidad andaluza. A la pregunta de si sospechaba qui¨¦n pod¨ªa estar detr¨¢s de la carta, el agente no tard¨® en responder. Hab¨ªa un concejal del pueblo que llevaba tiempo hablando mal de ¨¦l. La raz¨®n: hab¨ªa actuado en varias ocasiones contra ¨¦l por supuestos il¨ªcitos. Por ejemplo, cuando denunci¨® una empresa familiar suya ante la inspecci¨®n de trabajo por tener a gente empleada sin contrato.
Tras el guardia calumniado, el siguiente en pasar por el cuartel de Loja fue el primer sospechoso, C¨¢ndido Guillermo Calvo. Parece que tard¨® poco en admitir que la carta era suya, cuenta el entonces cabo, que admiti¨® sin pesta?ear la autor¨ªa de la carta, ¡°quiz¨¢ pensando que iba a acabar conmigo¡±. La conclusi¨®n de la investigaci¨®n fue concluyente: mentira sobre mentira y todo producto de la venganza por las actuaciones del agente.
El calumniado pidi¨® conocer las conclusiones de la investigaci¨®n reservada. ¡°No quisieron d¨¢rmela¡± cuenta, aunque s¨ª sab¨ªa que hab¨ªa sido exculpado. ¡°Ped¨ª que, igual que me hab¨ªan investigado a m¨ª, actuaran entonces contra el concejal¡±. Pero, por alg¨²n motivo, explica, no quer¨ªan. ¡°Mi mayor indignaci¨®n fue que tras saber la verdad, no quisieran actuar de oficio contra ese hombre. Entonces decid¨ª que era el momento de ir al juzgado y contact¨¦ con la gente de la Asociaci¨®n Unificada de la Guardia Civil, que me han apoyado en todo¡±. Contrat¨® un abogado especialista en derecho militar con a?os de experiencia. Lo siguiente es que cuatro a?os despu¨¦s de los hechos, el ex concejal C¨¢ndido Calvo ha sido condenado por calumnias sin publicidad, con un coste econ¨®mico superior a los 5.000 euros en indemnizaciones, multas y coste de la publicidad en un peri¨®dico y aproximadamente 3.000 m¨¢s en costas judiciales, seg¨²n estimaciones de Jos¨¦ Guerrero, abogado del agentet y, quien sabe si tambi¨¦n por eso, la p¨¦rdida del esca?o municipal.
El condenado ya ha empezado a abonar la deuda. Seg¨²n admite el ahora sargento ¡°ha pedido pagar a plazos y ya me ha pagado tres meses, a raz¨®n de 400 euros al mes que deposita en el juzgado y que este me hace llegar luego a m¨ª¡±. Por la caracter¨ªstica de la condena, resume el agente, ¡°si no paga, sabe que entra en prisi¨®n. Y despu¨¦s de m¨ª, tendr¨¢ que seguir pagando la multa y las costas¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.