El PNV apela al soberanismo pactado en el nuevo estatuto
Los socialistas auguran que la enmienda adicional segunda sobre el derecho a decidir pone en riesgo el resto de acuerdos
Soberanismo s¨ª, confrontaci¨®n no. El PNV defiende en el texto articulado que registrar¨¢ hoy en el Parlamento auton¨®mico, base para actualizar el Estatuto, un Pa¨ªs Vasco con capacidad para decidir su futuro pero siempre a trav¨¦s de un pacto con el Estado. Este intento del encaje legal del derecho a decidir que plantea el partido de Andoni Ortuzar frente a EH Bildu, que ¡°catalaniza¡± el proyecto al defender v¨ªas unilaterales, resulta sin embargo insatisfactorio para PSE y PP, que creen que su sola presencia puede dinamitar un posible acuerdo.
El derecho de autodeterminaci¨®n se encuentra en esta nueva propuesta del PNV, en la disposici¨®n adicional segunda, pero se formula de manera cuidadosa a la vista de los m¨¢rgenes fijados por el Tribunal Constitucional en 2014, cuando fall¨® sobre el recurso presentado contra la declaraci¨®n de enero de 2013 del Parlamento de Catalu?a donde proclamaba su soberan¨ªa y el derecho a decidir.
Entonces, el Constitucional anul¨® el primer principio de la declaraci¨®n del Parlament donde se consideraba al pueblo catal¨¢n como ¡°sujeto pol¨ªtico y jur¨ªdico soberano¡±, pero valid¨® las referencias que conten¨ªa el texto sobre el inicio de un proceso para conseguir el ¡°derecho a decidir¡±. Dijo que estas no eran inconstitucionales siempre, eso s¨ª, que se llegara a conseguir ese objetivo dentro del marco legal y constitucional vigente. Es decir, previa reforma de la Ley Fundamental. Con ese contexto como tel¨®n de fondo, el PNV refleja ahora el derecho a la autodeterminaci¨®n como una aspiraci¨®n que, en todo caso, se materializar¨ªa tras un pacto con el Estado.
¡°La plena realizaci¨®n de los derechos hist¨®ricos del Pueblo vasco, como manifestaci¨®n institucional de su autogobierno, se exterioriza a trav¨¦s del derecho a decidir de su ciudadan¨ªa libre y democr¨¢ticamente expresado, siendo su ejercicio pactado con el Estado¡±, expone en el texto que llevar¨¢ hoy a la C¨¢mara auton¨®mica. Esta redacci¨®n final es de Mikel Legarda, excongresista y jurista del PNV.
El mensaje de los nacionalistas con su reforma estatutaria es, por tanto, que no renuncian a su catecismo pol¨ªtico, pero que no quieren llegar a la confrontaci¨®n por ello. Sin embargo, lo que considera el PSE, y de forma m¨¢s radical el PP, es que su mera presencia en el articulado ¡ªsumado a otros aspectos, como referencias a la ¡°identidad nacional¡± o la diferenciaci¨®n, aunque sin efectos, entre ciudadanos y nacionalizados¡ª es inadmisible y va a dificultar, si no imposibilitar, el acuerdo.
Gran acuerdo en materia social
La propuesta t¨¦cnica que presentan hoy el PNV, Elkarrekin Podemos y el PSE tiene en sus siete t¨ªtulos un total de 145 art¨ªculos, cuatro adicionales y cinco transitorias. Incorpora, adem¨¢s, m¨¢s acuerdos que disensos, pero estos podr¨ªan acabar por hacerla fallida, si el objetivo real es que se construya en base a grandes acuerdos. El articulado garantiza derechos que sucesivas leyes auton¨®micas han ido ofreciendo a los ciudadanos vascos y da cobertura a otros. El nuevo estatuto defiende una sociedad paritaria en la que las mujeres participen con condiciones y oportunidades iguales. Recoge adem¨¢s medidas dedicadas a garantizar la conciliaci¨®n de la vida familiar y laboral y da carta de naturaleza a la creaci¨®n de una red especial de atenci¨®n a las mujeres frente a la violencia que se ejerce contra ellas. Regula que en todos los planes educativos haya medidas destinadas a educar en igualdad. Tambi¨¦n establece que la ¡°ciudadan¨ªa¡± tiene derecho a una prestaci¨®n econ¨®mica suficiente que garantice su vida con dignidad.
Elkarrekin Podemos es el que m¨¢s se acerca al PNV en ese campo. La redacci¨®n de Arantxa Elizondo, jurista nombrada por el partido de Pablo Iglesias, sostiene que ¡°la plena realizaci¨®n de los derechos hist¨®ricos como manifestaci¨®n institucional del autogobierno vasco se materializar¨¢ a trav¨¦s del derecho de su ciudadan¨ªa a expresar su voluntad libre y democr¨¢ticamente siendo su ejercicio legal y pactado¡±.
Frente a esas dos visiones posibilistas, que buscan el pacto y ajustarse al marco legal, la de EH Bildu sigue la estela de la v¨ªa unilateral y la confrontaci¨®n con el Estado puesta en pr¨¢ctica en Catalu?a. La redacci¨®n de ??igo Urrutia, el jurista asignado por la coalici¨®n secesionista, desborda el marco legal a conciencia. ¡°En orden a salvaguardar y hacer efectivo el derecho a decidir de la ciudadan¨ªa, las instituciones vascas tendr¨¢n la potestad para regular y gestionar la realizaci¨®n de consultas populares y refer¨¦ndums en lo que corresponde tanto a asuntos pol¨ªticos, sociales de su ¨¢mbito competencial como a las relaciones que deseen tener con el Estado Espa?ol y otros espacios europeos o internacionales¡±.
El experto socialista, Alberto L¨®pez Basaguren, advierte de que el cierto consenso alcanzado con PNV y Elkarrekin Podemos en uno de los tres textos que hoy se registrar¨¢n ¡ªEH Bildu presentar¨¢ su alternativa y el PP un documento en el que mantienen su apuesta por el actual texto de Gernika¡ª puede tirarse por la borda por la inclusi¨®n de un elemento de esta naturaleza.
Nacionalizados
Sin embargo, el derecho a decidir no es el ¨²nico elemento de fricci¨®n. En los m¨¢s de 100 art¨ªculos del nuevo texto ¡ªel actual tiene 47 y el de EH Bildu m¨¢s de 200¡ª sigue figurando la distinci¨®n entre ciudadanos vascos y nacionalizados. Una diferenciaci¨®n que, en las bases pactadas entre PNV y EH Bildu, dejaba la puerta abierta a la desigualdad entre unos y otros y que en la redacci¨®n que ha acabado por hacer el PNV son iguales a todos los efectos.¡°Se reconoce la nacionalidad vasca a la ciudadan¨ªa vasca sin que ello pueda afectar la igualdad del individuo y los grupos en que se integra ni suponer factor de discriminaci¨®n alguna¡±, propone. Algunos expertos se preguntan, entonces, por qu¨¦ explicitar las dos categor¨ªas.
Tambi¨¦n hay oposici¨®n en el caso de la consulta habilitante que PNV y Bildu pactaron en sus bases, que deber¨ªa convocar a los ciudadanos una vez que el nuevo texto saliera del Parlamento vasco y antes de entrar al Congreso. Tiene dos vertientes: una presente y otra futura. La reforma del Estatuto ha de hacerse con la normativa vigente y esa prev¨¦ un refer¨¦ndum, pero una vez aprobado en las Cortes. Para el futuro cabr¨ªa a?adir una consulta habilitante, siempre pactada con el Estado y no vinculante, pero para hacerlo con esta reforma deber¨ªa aprobarse una legislaci¨®n que lo permitiera. Este martes la Mesa calificar¨¢ las propuestas y volver¨¢ el debate, ya con los partidos, sobre la Ponencia de Autogobierno.
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